Antonio de la Torre, el niño del exorcista

Aunque el tono de la película se acerca a la comedia, Abracadabra también es un drama, una dualidad que el director Pablo Berger multiplica con pasajes fantásticos, de terror, de aventuras y hasta de thriller. Por ello, el director bilbaíno que se dio a conocer en el Festival de Málaga Cine Español con Torremolinos 73 (2003) considera que su cinta es «como una muñeca rusa de géneros» y que se propone «tener al espectador hipnotizado de principio a fin», según declaraciones recogidas ayer por Europa Press.

Con la vista puesta en los estrenos de 2017, Abracadabra une de nuevo en el reparto a Antonio de la Torre y a Maribel Verdú, que ya protagonizaron la cinta de Gracia Querejeta Felices 140 (2015). El argumento se centra en la peripecia de Carmen (Verdú) por conseguir recuperar a su marido, Carlos, después de que un espíritu se apodere de su voluntad tras una sesión de hipnotismo. «A mí me gusta considerarla una comedia muy seria o un drama muy cómico», abundó ayer el director vasco, que regresa con su tercera película después de arrasar hace unos años en los Goya con la cinta muda más bien, sin diálogos y en blanco y negro Blancanieves.

Frente a la sufrida «choni» de su mujer, Antonio de la Torre es un tipo bastante «simple». Un hombre que no perdona un partido de fútbol de su equipo, currante y convencido de sus ideas, pero que dará un vuelco completo cuando la posesión se apodere de su cuerpo. «Acabo haciendo dos personajes», admitió ayer el actor malagueño, que añadió que la transformación de Carlos también provocará un cambio en el personaje de Maribel Verdú.

Atresmedia Cine apoya la nueva película de Pablo Berger, que no solo cuenta con la pareja Verdú y De la Torre, sino que también ha sumado al reparto al televisivo José Mota aparece con unos rizos que no pasan desapercibidos, Quim Gutiérrez, Julián Villagrán y José María Pou. El filme cuenta además con el respaldo de Sony, que distribuirá la película en España.