Antonio Banderas: «De esto vamos a salir muy tocados, pero hay que recuperar la confianza»
El actor malagueño está solo en su casa de Marbella desde el 12 de marzo dedicado a coordinar labores de ayuda
Lleva desde el pasado 12 de marzo recluido en su casa de Marbella, en Los Monteros, donde llegó desde Madrid, tras suspenderse el rodaje de ... la película que realiza con Penélope Cruz en El Escorial. Su pareja, Nicole Kimpel se quedó 'atrapada' en Suiza, donde permanece con su hermana, Bárbara, y su padre. Antonio Banderas está solo en esta cuarentena de la que dice vamos a salir «muy tocados», pero a la vez expresa su esperanza en el futuro de Málaga y de la Costa del Sol, aunque vienen tiempos «muy duros». En sus muchas horas libres, estudia, lee guiones y libros y, sobre todo, se dedica a coordinar la extraordinaria labor social que realiza la Fundación Lágrimas y Favores, que él fundara y preside, y a la que ha conseguido sumar a la Fundación El Pimpi y a La Caixa. Además trabaja estrechamente con la Agrupación de Cofradías, a través de su presidente Pablo Atencia, con quien le une una gran amistad. Cuando hablamos con el actor malagueño, sobre la una de la tarde del viernes, Banderas se está preparando un puchero, «de los de Málaga de toda la vida», «para comérmelo ahora y después seguir con el tema del reparto de material». Con 53.000 euros, Banderas está haciendo con su Fundación encajes de bolillos. Reparte cientos de batas de un solo uso, guantes, mascarillas, patucos y mascarillas, y los llevan a hospitales (más concretamente el Clínico de Málaga), residencias de ancianos y farmacias.
Lágrimas y Favores organiza una red productiva para fabricar material sanitario entre pequeñas empresas y familias de la Axarquía
Además, para ello han 'armado' una red de proveedores especialmente por la zona de la Axarquía a través de pequeñas empresas y de particulares, incluso familias enteras: «Todos los días van coches con voluntarios nuestros para recoger el trabajo que realizan, y los distribuimos. Tenemos todos los permisos, y la gente está colaborando de manera maravillosa. Yo por eso digo que Lágrimas y Favores está en la calle. ¡Claro que está! Nosotros mandamos las telas, que son especiales, y los patrones para las batas, y las empresas y particulares las confeccionan. Hemos conseguido una gran red de pequeños fabricantes a través de Pablo Ruiz de Alba, y la verdad es que está funcionando a todo tren, porque ayer llevamos 330 batas al Clínico, por ejemplo. Esperamos repartir unas 30.000 batas...».
Respecto a la red de voluntarios para repartir medicinas, Banderas explica que se trata de unos cien voluntarios que acudieron a la llamada de la Agrupación de Cofradías «y después he hablado con el presidente de las farmacias, Francisco Javier Florido, que es amigo personal, de Carratraca. Estos voluntarios dejan sus teléfonos en las farmacias y cuando alguien necesita medicinas y no puede ir a por ellas, se les llama y las llevan...». Por todo lo dicho, «como comprenderás, no tengo tiempo para aburrirme, y además poder servir para los demás me reconforta y me llena. Estoy muy en contacto con Pablo Atencia y con la Universidad, con quien estamos colaborando también en un importante proyecto. Por cierto, me encanta la labor que están realizando los cofrades malagueños en estos tiempos tan difíciles. Ya lo dije en su día, el presente y el futuro de las cofradías pasa por un entronque social, y se ha hecho y muy bien».
Preguntado sobre qué va a pasar cuando pase la terrible situación que estamos viviendo lo tiene muy claro: «De todo esto vamos a salir muy tocados, primero por las personas que han muerto o enfermado de gravedad, con muchas familias afectadas, pero también, mirando al futuro cercano, a nivel económico, efecto negativo que ojalá sea temporal. Para nuestra realidad socioeconómica, para Málaga y la Costa del Sol esto es un verdadero martillazo y para recuperarnos deberemos hacer todos un importante esfuerzo colectivo para recuperar la confianza. Eso será fundamental». Igualmente, el actor malagueño, el más premiado a nivel mundial en 2019, agrega que «depende del comportamiento tanto individual como colectivo que mostremos durante estos tiempos difíciles saldremos de la crisis con un sentimiento de orgullo o de vergüenza. Si aguantamos en pie en esta carrera de resistencia, seremos muy fuertes a la salida del túnel».
«Depende del comportamiento que mostremos durante estos tiempos difíciles saldremos de esta crisis con un sentimiento de orgullo o de vergüenza»
Ese «recuperar la confianza» pasa por adoptar medidas importantes, porque como dice Banderas, «nada va a ser igual mañana que hoy o ayer... Esto lo cambiará todo». «Yo no sé lo que van a hacer los demás, pero para recuperar la confianza a la que me refiero, en mis empresas, lo vamos a tener muy claro. Por ejemplo, en el Teatro del Soho vamos a adoptar cinco medidas que son de obligado cumplimiento: primero, reducir precios; segundo, el teatro, todas sus dependencias, se limpiarán y desinfectarán a diario y para ello vamos a adquirir máquinas de ozono especiales. Tercero, vamos a rogarle a los espectadores que si alguno de ellos el día de la función no se encuentra bien por cualquier motivo, se abstenga de ir a la misma y o le devolvemos el dinero íntegramente o lo acomodaremos otro día. Cuarto, si alguna persona, por cualquier motivo, comienza a toser en el teatro, personal del mismo le entregará una mascarilla para que se la ponga, y quinto, todo el personal llevará trajes antibacterianos especiales y guantes de un solo uso que se irán cambiando varias veces al día. El personal ya lo sabe y lo ha aceptado. Igual que en El Pimpi, donde las cocinas se desinfectarán todas las noches, pero también el utillaje y menaje (cubertería, platos, vasos...), los cocineros llevarán mascarillas de forma permanente y los camareros guantes. Al principio la gente se extrañará, pero nos acostumbraremos, y todos tenemos que arbitrar medidas especiales, porque sólo así conseguiremos recuperar la confianza», agrega el actor malagueño, que habla con gran convencimiento.
«Nos la jugamos y todos tenemos que apostar por ello, hay que recuperar la confianza, es nuestra salida», dice. Para Banderas, lo único positivo de todo esto es «comprobar la enorme solidaridad de los malagueños y de los españoles, pero también darnos cuenta de lo que es verdaderamente importante, de la gran categoría y capacitación de nuestros profesionales sanitarios, de su entrega, de la categoría de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y, sobre todo, del enorme afianzamiento de las Fuerzas Armadas en nuestra sociedad, demostrando su importancia y su utilidad, dando una lección de sacrificio, constancia y disciplina, siempre al servicio de la democracia y del pueblo español cuando más se les necesita... Me quito el sombrero por su actuación en estos momentos tan difíciles».
Antonio Banderas termina: «Que no lo olvide nadie, Lágrimas y Favores, advocación de nuestra Virgen que ahora es más acertada que nunca... Hay nombres que vienen dados, como dolor y gloria también. Y no lo duden, Lágrimas y Favores está en la calle».
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