Las reglas de 'Juego de tronos'

En las últimas temporadas se ha comenzado a seguir la serie a tiempo real y en todo el mundo, convirtiendo cada capítulo en el tema de conversación del día siguiente. Un fenómeno comunitario al que ahora se sumarán escenarios bien conocidos. La escarpada playa de Zumaia y la cala salvaje de Barrika del País Vasco acogen ya a los actores de la serie, cuya identidad se guarda con un nivel de seguridad parecido al de los servicios secretos. Con la salvedad de ese soplo anónimo que desveló cómo el equipo de rodaje se había instalado silenciosamente en un palacete del siglo XIX en el Campo Volantín de Bilbao.

El trasiego de ordenadores, papeleo y posters en el chalet de Olabarri se aleja del espíritu medievalista de 'Juego de tronos'. Esta novela de caballería moderna se relaciona más con la crueldad humana, las luchas de poder, el sexo crudo, las religiones enfrentadas, la brujería y los festines de uro, cebollas asadas y vino de Dorne. Es imposible condensar en unas líneas el argumento por la atomización de las tramas y la ingente cantidad de personajes. Pero no está de más apuntar algunas claves para orientarse por esta larga canción de hielo y fuego.

Se acerca el invierno

Los personajes de 'Juego de tronos' se enfrentan a dos grandes amenazas. Tras la muerte de Robert Baratheon, el rey de los siete reinos, se crea un vacío de poder que enfrentará a todas las Casas de este mundo ficticio. Además, con los primeros fríos helados un enemigo común aparece en el Norte. Unos monstruos de ojos azules y piel helada caminan hacia el Sur con ansia destructora. Los psiquiatras aseguran que representan la lucha contra la psicosis que carcome a los habitantes de este mundo violento y conspiranoico. Sin duda, George R. R. Martin creó un imaginario a imagen y semejanza de la humanidad más bárbara y descarnada.

La familia Stark es una de las pocas Casas ingenuamente honorables que gobierna en este mapa. Los viejos escritos dicen que la sangre de los Primeros Hombres todavía corre por sus venas. Durante miles de años fueron reyes en el Norte, hasta que hincaron la rodilla ante la Casa Targaryen. El protagonista de los primeros capítulos, Eddard Stark, cultivaba una imagen de nobleza y honor que los vecinos del sur caricaturizan. «Si vas a quitar la vida a un hombre tienes el deber de mirarlo a los ojos y escuchar sus últimas palabras. El gobernante que se esconde tras ejecutores a sueldo olvida pronto lo que es la muerte», aseguraba después de decapitar a un traidor. En el Norte se murmura sin cesar el lema de los Stark, como un mal presagio. «Se acerca el invierno», repiten.

Situación actual de la Casa Stark (¡Atención, spoiler!): después de seis temporadas y cinco libros, es una de las aspirantes a gobernar los siete reinos. Eddard murió decapitado por orden de los Lannister. Su mujer, Lady Catelyn, y su hijo Robb fueron cruelmente ejecutados en la Boda Roja (quizá uno de los episodios más traumáticos). Continúan vivos la hija rebelde Arya, la hija traumatizada Sansa, el hijo tullido Brandon y el tío Benjen. El hijo bastardo Jon Nieve ha conseguido el apoyo de los caballeros del Valle, de los norteños y del pueblo salvaje.

El incesto rubio

Los Lannister -rubios, altos y de elegancia aristocrática- viven en el Sur. De la desmesurada fortuna que amasan en su bastión de Roca Casterly surge el lema extraoficial que recorre todas las callejuelas de Desembarco del Rey y desprende un hedor vengativo: «Un Lannister siempre paga sus deudas». Sin embargo, la última generación de la familia, fruto de la relación incestuosa entre los hermanos Jaime y Cersei, ha debilitado su posición en la lucha por el Trono. Esta Casa alberga algunos de los personajes más complejos de la serie, como Jaime (un Guardia Real manco, ambiguamente fiel y desleal) y Tyrion (un enano borracho sumamente inteligente).

«Mi mejor arma está en el cerebro. Mi hermano tiene su espada, el Rey Robert tiene su maza y yo tengo mi mente. Y una mente necesita de los libros, igual que una espada necesita de una piedra de amolar para conservar su filo (.). No dejes que se den cuenta de que las palabras te hacen daño. Jamás te librarás de las burlas. Si te ponen un mote, adóptalo y transfórmalo en tu nombre», defiende Tyrion.

Situación actual de la casa Lannister (¡Atención, spoiler!): Todos los hijos de la actual reina de Desembarco del Rey, Cersei Lannister, han muerto de las maneras más variopintas (Myrcella, Tommen y Joffrey). Su madre se venga haciendo explotar a sus enemigos con fuego valyrio. El padre y líder de los Lannister, Tywin, murió a manos de su hijo Tyrion, que sigue vivo junto a la Reina y Jaime (con una mano menos).

Una mujer poderosa

Antes de que estallara la guerra por el Trono de Hierro, los descendientes de la casa Targaryen, Viserys y Daenerys, escaparon con los criados a causa de una revuelta contra su padre, el Rey Loco. Con el paso de las temporadas, Daenerys se ha convertido en un referente para los personajes femeninos y una aspirante a reinar sobre el resto. «Cuando Daenerys se puso en pie, el negro siseó y de las fosas nasales y la boca le surgió un humo claro. Los otros dos se apartaron de sus pechos y sumaron sus voces a la llamada, desplegando las alas traslúcidas al aire. Por primera vez en cientos de años, la noche cobró vida con la música de los dragones», concluía el primer libro de la saga.

Situación actual de la Casa Targaryen (¡Atención, spoiler!): Fiel al lema de su casa, «fuego y sangre», Daenerys lucha por la libertad del pueblo esclavizado y por convertirse en la Señora de los Siete Reinos. Después de deshacerse de su hermano, se convierte en la mayor amenaza para el resto de los aspirantes al trono de Hierro. Apodada Daenerys de la Tormenta, Madre de los Dragones, se ha aliado con el pueblo esclavo, con una armada de mercenarios, un ejército fiel, una horda de dothrakis y con la carismática líder las Islas de Hierro. Con todas las alianzas en juego, la guerra por el trono está a punto de estallar. El invierno ha llegado.