El Geolocalizador Patrimonial Feminista: una forma de visibilizar Andalucía

La Geolocalización Patrimonial Feminista cumple su sexto año de vida de la mano de Laura Triviño. Además, este año se ha unido para la causa la graduada en Educación Primaria Rocío Santana, que ha visto de cerca la capacidad de los alumnos a la hora de poner en práctica lo aprendido.

Este proyecto empezó a ver la luz en el año 2018, de una forma un tanto improvisada. La investigadora de la Facultad de Educación aprovechó sus conocimientos sobre historia de arte y arte feminista para implantar una performance de una artista visual de renombre como Yolanda Domínguez dentro de los terrenos universitarios. En dicha performance, Domínguez quiso dar un toque de atención sobre la poca presencia de las mujeres artistas en la feria ARCO. Para ello, se le ocurrió la idea de llevar un geolocalizador con una diadema para poder dar más visibilidad, a partir de ese momento diferentes mujeres se sumaron a esta iniciativa.

La esencia de esta idea le impactó mucho a Triviño, que pensó en trasladarlo a la asignatura optativa Didáctica del Patrimonio de la Cultura Andaluza del grado de Educación Primaria que imparte en la Facultad de Educación. «El objetivo era que los alumnos se hicieran una foto y un pequeño vídeo en un museo con una obra, el nombre de una calle… Todo relacionado con mujeres relevantes que conozcamos, o no», explica la Doctora en Historia del Arte por la UNED.

Esta serie de elementos visuales en la que los alumnos aparecen con un icono de ubicación, en un principio estuvieron pensados para subirse a la plataforma social de Facebook, sin embargo, la evolución de la tecnología y con ello de las redes sociales han ido trasladando este proyecto a otros entornos como TikTok. Aunque esta no ha sido la única variación que ha sufrido el proyecto durante estos seis años, el propio logo vio alterado su color en la última edición, de rojo a morado.

Estos vídeos se encuentran subidos en la plataforma de TikTok en la cuenta 'ellastbpintaban', previo aviso y consentimiento de los alumnos, que tuvieron que firmar un documento de consentimiento. En ella, además del vídeo, se encuentra una foto previa con una explicación de la mujer y el lugar donde lo han hecho.

Para Rocío Santana «ha sido muy enriquecedor» entrar en esta iniciativa con la que reconoce haber aprendido mucho de cara a su doctorado. Esta «implicación» por parte del alumnado, como bien explica ella, ha sido fundamental para poder realizar todas las partes del proyecto en el tiempo preciso. El objetivo era poder tenerlo listo para el 8M y las clases de dicha asignatura tenían su comienzo a mediados de febrero, por lo que los alumnos tuvieron un par de semanas escasas para poder tenerlo todo listo. «Ninguno puso pegas y todos se ofrecieron a hacerlo. He visto mucha implicación por parte de ellos y facilidad de trabajar porque es un grupo muy participativo».

La graduada en Educación Primaria, que se encuentra doctorando en la actualidad, ha podido comprobar cómo la actividad no solo ha sido simplemente un ejercicio de clase que se ha realizado entre las cuatro paredes de un aula, sino que ha ido mucho más allá. «Es algo que traspasa las paredes, está colgado en la red y pueden verlo más personas», razona.

El hecho del uso de las redes sociales ha permitido que ambas docentes y sus alumnos puedan recuperar y visibilizar el legado y el patrimonio cultural andaluz de muchas mujeres de diferentes ámbitos, desde profesoras, abuelas, familiares… Hasta mujeres muy conocidas como Rocío Jurado o Lola Flores.

Durante la época de pandemia el geolocalizador no se interrumpió, sino que se adecuó el formato a la situación en la que se encontraba. En aquella ocasión la doctoranda Marta Marín Corvera junto a Triviño crearon unas directrices acordes a la situación en las que se tenía que realizar un vídeo educativo de un artista por provincia. La difusión y su impacto fue tal que una de las artistas, María José López, se puso en contacto con las docentes para pedir poder usar el vídeo para hacer difusión en los centros educativos.

La evolución del geolocalizador no ha sido el único proceso evolutivo que ha sufrido el proyecto en estos seis años de vida. Los propios alumnos que desde 2018 hasta la actualidad han ido pasando por los pupitres de la Facultad de Educación han sufrido un cambio que también se ha visto reflejado en el proyecto.

Para Laura Triviño, que ha podido comprobar esta evolución en el alumnado, el factor diferencial en estos últimos años ha sido «la falta de timidez» para poder ponerse delante de una cámara y realizar un vídeo. «Eso es lo que he notado. También supongo que es porque nos están educando en eso», afirma.

Este Geolocalizador Patrimonial Feminista nace en Málaga en el año 2018, pero esto no ha impedido que se intente llevar a otros puntos de Andalucía. De hecho, durante varios años el proyecto ha roto la frontera universitaria y comarcal hasta llegar a ciudades como Cádiz, donde este año volverán a estar tanto ambas investigadoras como los alumnos de la asignatura Didáctica del Patrimonio de la Cultura Andaluza.

La iniciativa de llevar este proyecto a la ciudad gaditana viene de otra de las investigaciones de Laura Triviño. Ella ahondó en la vida de la pintora andaluza llamada Alejandrina Gessler y Lacroix, y que firmaba bajo el seudónimo de Anselma. Entre otras grandes obras publicó un libro llamado 'Recuerdos de Cádiz y Puerto Real', donde habla de todas las costumbres de esta antigua ciudad portuaria y del patrimonio gaditano, incluso de la forma de hablar.

Con la esencia de esa obra literaria decidió innovar, llevando a todos los alumnos inmersos en el proyecto a la ciudad de la bahía. El objetivo no es otro que intentar conocer el patrimonio de la ciudad, pero a través de geolocalizar los momentos más importantes de la vida de la artista gaditana. El Museo de Cádiz, La Caleta, los balnearios… Diferentes lugares marcados en el geolocalizador.

Las ideas de futuro de ambas investigadoras pasan por intentar agrupar todos los vídeos de estos cinco años. Por otro lado, buscan nuevos lugares para ampliar el horizonte del geolocalizador como es el caso de Sevilla.

Lo que sí tiene claro Laura Triviño es que el proyecto está para ser «compartido» y pueda ser de todo el mundo. Además, que cada vez más gente pueda unirse como fue en su momento Marta Marín Corvero o en la actualidad está haciendo Rocío Santana. «Es una idea que se puede llevar a los centros educativos e incluso a los museos», destaca la docente. «Sería también bueno llevarlo a los colegios y educar a través de estos vídeos, porque podemos enseñar contenidos como el papel de la mujer en la historia o la alfabetización cívica, el reto de futuro, la igualdad de género», añade Rocío Santana sobre los posibles proyectos de futuro.