La historia del «perdón» tras las obras de Benalmádena Pueblo
La remodelación del casco histórico ha triplicado ya el plazo previsto, pero falta al menos un mes para que concluyan los trabajos
No es precisamente habitual que un político pida públicamente «perdón». Y debemos suponer que tampoco debe serlo que un cura le recrimine al alcalde haberle « ... jodido». Lo primero lo hizo el primer edil de Benalmádena, Juan Antonio Lara, en un video difundido en Facebook el pasado sábado, y lo segundo el párroco de la iglesia de Santo Domingo de Guzmán, José Morales, en un audio enviado por WhatsApp al propio Lara, en el que se quejaba de que le hubiera fastidiado la temporada de bodas, y que acabó filtrado y saltó a un programa de Antena 3. El telón de fondo de los dos inusuales episodios es el mismo: las obras de remodelación de Benalmádena Pueblo.
Fuera del universo de Mark Zuckerberg y de su gigante Meta, en el mundo real de polvo y ruido de obra de Benalmádena Pueblo, cualquier vecino te lo resume antes de que termines de hacer la pregunta: «Está todo el pueblo levantado». Y «desde noviembre», apuntan algunos acertadamente. Concretamente, el día 18. Un día después el alcalde supervisaba el inicio de las obras del casco histórico; «al menos la primera remodelación integral de las últimas décadas», según fuentes del Consistorio.
Ese mismo día comenzaban también las obras en la avenida Juan Luis Peralta, una vía fundamental fundamental para el tráfico rodado al atravesar el pueblo de norte a sur, y en otras calles adyacentes. Aunque el video en el que pide «perdón» el alcalde se refiere a los trabajos del casco histórico, ambas actuaciones han corrido en realidad una suerte similar de retrasos, paralización de los trabajos y modificado del proyecto para desesperación de vecinos, comerciantes, turistas y del propio Lara, muy crítico cuando estaba en la oposición y las obras del Ayuntamiento se retrasaban y, sobre todo, si alcanzaban la temporada alta. La primera de estas actuaciones debía concluir el 1 de febrero y la segunda, el 15 de marzo, pero a las puertas del mes de agosto ambas continúan ejecutándose.
Trabajos, presupuesto y plazos
Las del casco histórico prolongarán la petición de «perdón» del alcalde al menos hasta el 24 de agosto, fecha en la que debe terminar los trabajos de acuerdo con el plazo de 77 días naturales otorgados tras la modificación del proyecto, que ha elevado el presupuesto de la obra de algo más de 459.000 a 556.000 euros, un 24,12% más. Las de Juan Luis Peralta, que pasaron a costar 1,15 millones de euros, 77.000 euros más de lo previsto, continúan ejecutándose fuera de plazo.
Los trabajos del casco histórico incluyen la renovación del pavimento y de las redes de saneamiento, la eliminación y canalización del cableado eléctrico aéreo, además de nuevas redes de alumbrado y telecomunicaciones, en un área que abarca el corazón de Benalmádena Pueblo, desde la Plaza de España, el lugar donde se encuentra la Niña de Benalmádena, a la plaza de la Iglesia y las calles Santo Domingo, Dos Olivos y Pío XII. Las obras de Juan Luis Peralta y las calles adyacentes pasan fundamentalmente por la renovación del acerado. Una inversión conjunta de 1,7 millones de euros que mejorará Benalmádena Pueblo, aunque sea más tarde de lo que vecinos, comerciantes y Ayuntamiento hubieran querido.
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