Un grupo de turistas, a la espera de pasar a disposición judicial tras colarse en Tivoli y causar destrozos

Los intrusos fueron detectados por los ex trabajadores del parque que vigilan de forma permanente las instalaciones. Fueron ellos quienes dieron aviso a la Policía Nacional, que se personó en la zona y que en un primer momento no consiguió localizarlos. Con la ayuda de los propios trabajadores se dieron cuenta que la fachada del Castillo del Terror se había desprendido en parte, por lo que a pesar de tener bloqueadas las dos entradas y salidas con las que cuenta, buscaron la forma de acceder desde una planta superior y allí los localizaron escondidos.

Tras comprobar los daños causados en el interior del recinto, que los ex trabajadores valoran inicialmente en 3.000 euros, éstos decidieron presentar denuncia contra los turistas en representación de la administración concursal. En concreto, según denunciaron, los intrusos causaron daños en tres puertas de otros tantos locales, así como en la decoración del castillo del terror y en la fachada del mismo.

Los intentos de colarse en el parque son continuos, según han denunciado en repetidas ocasiones los ex trabajadores, que desde hace tiempo asumen a nivel personal la vigilancia 24 horas de las instalaciones para evitar un expolio que, sin ellos, estaría garantizado. No todos entran con el afán de causar destrozos, muchos por el simple morbo o para grabar imágenes que después se mueven en redes sociales.

Esos mismos trabajadores son los que se encargan también de seguir manteniendo las instalaciones: limpian los viales, cuidan de las zonas verdes, revisan las atracciones y dan de comer a los animales. Hay que recordar que este es el tercer verano que Tivoli permanece cerrado y en septiembre se cumplirán cuatro años de su cierre.