La oposición exige una auditoría en Puerto Marina tras la condena de su gerente
UGT ya denunció la contratación de una empesa externa con tres trabajadores que cobra 8.000 euros mensuales «por mantenimiento»
Alberto Gómez
Sábado, 22 de noviembre 2014, 01:58
La condena por intrusismo profesional al hasta esta semana gerente de Puerto Marina, José Manuel López Merino, cuya destitución el pasado lunes detonó el pacto ... de gobierno en Benalmádena, ha vuelto a poner el foco de atención sobre las presuntas irregularidades realizadas en el recinto portuario. Tras conocer la sentencia del Juzgado de lo Penal número 11 de Málaga, la alcaldesa, Paloma García Gálvez (PP), ordenó el cese de López Merino, vicepresidente de Unión Centro Benalmádena (UCB), formación independiente que gobernaba en coalición con los populares. El primer teniente de alcalde y concejal del Puerto Deportivo, Francisco Salido, líder de UCB, se negó a revocar de sus responsabilidades a su mano derecha, algo que supuso también su destitución. En medio de este escenario, la oposición ha vuelto a exigir a la primera edil que ordene una auditoría y un informe de fiscalización del recinto portuario.
La cúpula de UCB acusa a su único concejal de «traicionar» al partido
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El apoyo ofrecido a la alcaldesa por el concejal de Deportes, Juan Olea, único edil en funciones de UCB en el Ayuntamiento tras las destituciones de Francisco Salido y Concepción Tejada, ha provocado que la cúpula de la formación independiente lo acuse de «traidor» en su diario de cabecera. La directiva del partido establece un símil deportivo y explica que la lealtad «es una obligación con el prójimo, como cuando los ayudantes técnicos dejan su puesto tras el despido de un entrenador». Olea, cuya relación con Salido está deteriorada desde hace meses, respaldó a García Gálvez y pidió la dimisión del exprimer teniente de alcalde como presidente de UCB. «Muchos votantes, entre los que me incluyo, nos sentimos defraudados y desamparados ante esta situación», afirmó Olea a SUR esta semana.
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El núcleo del partido esperaba que Olea reaccionara como Tejada, que votó en contra de las destituciones de López Merino y del propio Salido en la junta general del puerto deportivo, algo que provocó también su cese. «No voy a permitir que ningún edil de este Consistorio ampare a alguien que ha sido condenado», argumentó la alcaldesa. En caso de que García Gálvez se someta a una moción de confianza, como reclama la oposición, el concejal de Deportes ya ha anunciado su intención de votar a su favor. Los populares, por tanto, cuentan con doce apoyos (sus once ediles electos y Olea), mientras que la oposición está formada por trece personas, por lo que los populares gobernarán en minoría hasta que se celebren las elecciones municipales de 2015.
PSOE y UGT ya denunciaron hace meses «la privatización de servicios públicos» provocada por la adjudicación de las tareas de mantenimiento del puerto a una empresa privada con tres trabajadores que cobra casi 8.000 euros mensuales, justificado por Salido bajo el argumento de que en la bolsa de trabajo para estas tareas «no hay personal cualificado». El candidato socialista a la Alcaldía de Benalmádena, Víctor Navas, criticó ayer «la constante negativa del equipo de gobierno a facilitarnos información» sobre las cuentas del recinto. «Avisamos a la alcaldesa en incontables ocasiones sobre lo que estaba ocurriendo en el puerto deportivo, pero ni las constantes denuncias por la imposibilidad de acceso a la información municipal, ni las advertencias por el altísimo número de asesores externos de Francisco Salido, ni la contratación de empresas afines para obras públicas, ni el despilfarro en la realización de proyectos de peatonalización como el de calle Fragata, ni el pago de cachés inflados para la contratación de artistas, ni las dudas sobre el proceso de contratación de la empresa de mantenimiento del puerto fueron atendidas», sostiene Navas.
Un concierto polémico
El concierto que Antonio Orozco ofreció en la noche de San Juan en Puerto Marina también despertó las críticas de la oposición, que lamentó la contraprogramación de un espectáculo de estas características, con un coste cercano a los 18.000 euros para las arcas municipales, «en una noche tan popular que no requiere la programación de un concierto para atraer público». Salido alegó entonces que Orozco solo ofrecería dos conciertos en España este verano y que se trataba de «una oportunidad única para publicitar Benalmádena», a pesar de que el cantante catalán estuvo inmerso en una gira que ha recorrido decenas de municipios de toda la geografía nacional.
López Merino, hasta este lunes gerente del puerto, fue condenado a seis meses de cárcel, sustituidos por una multa económica al carecer de antecedentes penales, por ejercer como abogado sin estar colegiado en un juicio al que asistió el Colegio de Abogados de Málaga como acusación particular. Tras conocer su destitución por parte de la alcaldesa, López Merino aseguró a este periódico que García Gálvez era «una desagradecida» y que el PP no había cumplido el pacto de gobierno.
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