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La astronauta italiana de la ESA Samantha Cristoforetti, durante la rueda de prensa en Colonia, Alemania. ESA
«En el espacio trabajamos por lo que nos une y dejamos de lado los conflictos»
Samantha Cristoforetti

«En el espacio trabajamos por lo que nos une y dejamos de lado los conflictos»

Tras regresar de la Estación Espacial Internacional, la astronauta de la ESA ha hablado sobre su experiencia como parte de la tripulación Crew-4 y sus planes de futuro

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Martes, 18 de octubre 2022, 20:58

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Después de haber pasado casi seis meses viviendo y trabajando a bordo de la Estación Espacial Internacional (EEI), la astronauta italiana Samantha Cristoforetti y sus compañeros de la expedición 67 regresaron a la Tierra el pasado 14 de octubre. Como parte de su misión Minerva, Cristoforetti apoyó la realización de numerosos experimentos europeos y muchos más experimentos internacionales en estado de microgravedad, realizó su primera caminata espacial y fue nombrada comandante de la EEI, estos últimos hitos históricos, al ser la primera vez que ambas hazañas han sido realizadas por una astronauta mujer europea.

Ahora pasará una temporada en Colonia, Alemania, donde el equipo médico espacial de la Agencia Espacial Europea (ESA) le realizará un seguimiento mientras se adapta de nuevo a la gravedad terrestre en el Centro Europeo de Astronautas (EAC) y en las instalaciones 'Envihab' del Centro Aeroespacial Alemán (DLR). Ha sido en esta ciudad alemana donde se ha celebrado este martes una rueda de prensa en la que Cristoforetti ha compartido su experiencia en el espacio, su regreso a tierra firme y sus planes a corto plazo.

«Me siento bien, tengo que decir que tal vez incluso mejor que la última vez que regresé de la Estación. Probablemente, se debe en parte a la experiencia, o a que mi cuerpo tiene un cierto grado de recuerdo de esta fase de rehabilitacion en la que te tienes que volver a acostumbrar al peso de la gravedad terrestre. Me parece que esta segunda vez es todo mucho mas más fácil y menos agotador», ha declarado.

Encontrar tiempo para descansar

La astronauta ha reconocido que ha sido una etapa «muy intensa tanto física como psicológicamente», pero que, al mismo tiempo, echa y echará de menos la Estación, al haber pasado casi un año de su vida a bordo (268 días), entre las dos misiones que ha realizado a la EEI. «Es un lugar donde siempre me he sentido bien y que me ha encantado conocer. Es como vivir en una dimensión que en la Tierra no es posible, y esa ingrevidez me encanta. Además, existe un clima maravilloso a bordo, de armonía y fuertes lazos dentro del equipo, porque trabajamos para conseguir los mismos objetivos. Esa determinación de anteponer siempre las cosas que nos unen y nos hacen trabajar juntos, y dejar de lado todo lo que puede ser conflictivo, crea una atmosfera muy bonita, muy particular, que a lo largo de mi vida principalmente he sentido allí arriba», ha dicho.

Ese ha sido, en su opinión, uno de sus mayores logros en esta misión. «Mi responsabilidad principal y, por lo tanto, creo que mi logro, aunque de ninguna manera es solo mío, sino de todo el equipo, es que hemos trabajado muy bien juntos durante estos cinco meses y medio en el espacio, y que hemos regresado siendo grandes amigos», ha afirmado. Si bien ha admitido estar muy orgullosa de haber podido realizar su primera caminata espacial y de tener un puesto de responsabilidad durante la misión.

«Creo que tenemos que tomar conciencia, poco a poco, del hecho de que el espacio ya no es ese tipo de aventura que puede haber sido en el pasado, separado casi por completo de los asuntos humanos. Las capacidades espaciales de un país o un complejo de países, como nuestro caso en Europa, es una parte integral de las habilidades tecnológicas que, por lo tanto, se traducen en capacidad de innovación en competitividad y, al fin y al cabo, en crecimiento económico. Debemos tratar de entender que invertir en habilidades espaciales es invertir en habilidades tecnológicas y en innovación, lo cual es fundamental para alentar a cada vez más hombres y mujeres jóvenes a realizar carreras en campos científicos y tecnológicos», ha afirmado.

Su deseo ahora es «pasar tiempo con mi familia y descansar», aunque primero tendrá que finalizar el proceso de rehabilitación. «Siempre es un poco desafiante cuando regresas de una misión espacial, porque sabes que has estado superando tus límites durante mucho tiempo, entre el entrenamiento, el prelanzamiento, el lanzamiento y la misión, así que tienes mucha adrenalina. Luego regresas a la Tierra y una parte de ti quisiera simplemente relajarse, pero la verdad es que la misión no ha terminado todavía, y eso también es emocionante».

Nuevas compañeras astronautas

En cuanto a sus planes de futuro, ha señalado: «La gente siempre te pregunta cuando regresas del espacio, ¿qué sigue? ¿Cuál es tu sueño ahora? ¿Sueñas con ir a la luna o a Marte? Creo que he llegado a un momento de mi vida en el que mis sueños se centran menos en mis propios logros y ambiciones. Me gusta recordar que, finalmente, estamos seleccionando una nueva promoción de astronautas y creo que la prioridad para todos en este momento es asegurarnos de que tengan la oportunidad de volar lo antes posible. Aun así, si me piden que vaya yo, lo haré sin pensarlo y será un sueño hecho realidad».

La ESA se encuentra actualmente finalizando el proceso de selección de nuevos astronautas para su plantilla, con el firme propósito de lograr una proporción más equilibrada entre el número de hombres y mujeres. Sobre sus potenciales nuevas compañeras, dado que Cristoforetti es la única mujer astronauta de la ESA actualmente, ella ha dicho: «No he estado involucrada en la selección en absoluto, pero he escuchado que ha habido un gran aumento en el porcentaje de mujeres solicitantes y que hay perfiles de muchísima calidad, tanto de hombres como de mujeres, así que espero darles la bienvenida a mis nuevos colegas dentro de unas semanas o meses».

Josef Aschbacher, director general de la ESA, ha añadido sobre esta cuestión: «La diversidad es una de las principales prioridades de ESA, especialmente como parte de nuestra agenda 2025. En el proceso de selección de 2008-2009 hubo un 16% de mujeres y Samantha fue la única candidata mujer seleccionada. En esta nueva convocatoria, en la etapa final en la que estamos el porcentaje de mujeres es del 40%. Todavía no sabemos quiénes serán los candidatos finales, les puedo asegurar con total seguridad que la proporción entre astronautas femeninos y masculinos será mucho más equilibrada que en el pasado».

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