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Las obras de construcción de un nuevo residencial, en una de las zonas más transitadas de Rincón de la Victoria, junto al Ayuntamiento, el centro de salud, bancos, bares o comercios, generan una gran expectación, más allá de la habitual en las personas que tienen ... tiempo libre para observarlas, y eso que los trabajos todavía están en una fase incipiente.
No se ha puesto ni un ladrillo, lo que está en marcha es, todavía, una cata en la parcela. Es una labor obligatoria, explica la Junta de Andalucía, al proyectarse estas viviendas en la zona de protección de la Carta Arqueológica del Bien de Interés Cultural 'ZA4 Castillo de Bezmiliana'. Es decir, los trabajos afectan al área de influencia de la antigua medina musulmana, por lo que se realiza un sondeo de forma cautelar. Es un punto, a priori, sensible, y por ello, y aunque la Administración regional indica que estas labores de estudio de subsuelo corresponden a la promotora, puntualiza que están autorizadas y supervisadas por Cultura.
Eso sí, hasta el momento, «no hay resultados determinantes», sostiene la Delegación del Gobierno andaluz en Málaga «No hemos encontrado nada, ojalá», confirma el arqueólogo que está al frente de esta intervención, Eusebio José Alegre Paricio, de Axium. Esta firma es la que desarrolla su labor en el terreno en el que promueve y comercializa el edificio Muñoz, que así se llamará el nuevo bloque, la empresa Mubamar. Pero la ausencia de algún elemento de valor histórico en este terreno, en realidad, no sería frustrante. Y es que la prospección puede arrojar resultados, incluso si no se localizara nada, ya que permitirá, como mínimo, determinar con mayor exactitud los límites de la antigua Bezmiliana musulmana, sostiene Alegre.
El enclave de Bezmiliana, protegido desde 2009 por el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, que lo incluyó en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, es lo que queda de la ciudad de la época andalusí y también sirve para repasar su transformación en la posterior etapa cristiana. Este testimonio del pasado rinconero salió a la luz tras las búsquedas realizadas entre la avenida de la Candelaria, en el cruce con el Camino Viejo de Vélez, y El Castillón. La obligación de preservarlo abarca tres áreas concretas, por lo que las excavaciones en su entorno, permitirán conocer más detalles sobre la historia local, sí o sí.
Juan Bautista Salado, director del Museo de Nerja y responsable del proyecto museográfico de la villa romana de Antiopa, yacimiento que, con su empeño como arqueólogo rinconero que es, se salvó de desaparecer, aclara: «Ahí se esta excavando ya que, en el Ayuntamiento, que está muy cerca, apareció la necrópolis andalusí de Bezmiliana». Es más, como recuerda, la Carta Arqueológica del municipio, recogida en su ordenamiento urbanístico, incluye protección tipo 2, lo que implica la excavación previa en una serie de terrenos para que, en caso de que haya resultados positivos, lo encontrado no desaparezca.
Hasta el momento, las investigaciones realizadas en la finca solo han permitido localizar parte del antiguo estanco y la casa que había en lo que actualmente es el número 113 de la avenida del Mediterráneo. Las estructuras, por lo tanto, contemporáneas, son visibles desde las plantas de los edificios colindantes que quedan por encima, aunque, a pie de calle, hay un vallado, con malla, que preserva el proceso de excavación y evita accidentes de personal ajeno a la obra. «Hemos bajado ya más de dos metros y, más allá del negocio y la vivienda, solo tenemos rellenos y arena de playa», abunda el arqueólogo Alegre Paricio.
Pero, aunque los hechos son estos, sin que se puede descartar totalmente la aparición de algún vestigio de valor, lo cierto es que los comentarios sobre la futura construcción son muchos en la calle y también generan gran cantidad de reacciones y publicaciones en la comunidad virtual, en la que circulan imágenes de las piedras desenterradas. En algunos casos, directamente, se da por hecho que los restos de lo que fue el despacho de tabaco tienen miles de años.
La expectación es, incluso, «excesiva», lamenta Alegre Paricio, tanto que ha motivado una denuncia ante la Guardia Civil, por la posible vulneración de la intimidad del personal encargado de la cata, en la que se afanan cuatro trabajadores, y por la difusión de afirmaciones «malintencionadas» sobre lo descubierto, que no tienen fundamento alguno. Lo confirma el responsable de Axium que hace hincapié en que las autoridades están al tanto de cada uno de los trabajos arqueológicos, que todavía no han concluido.
Si, finalmente, llegara algún hallazgo que tuviera importancia, este sería puesto a salvo, tranquilizan fuentes municipales, también atentas al proceso.
Incluso, podrían ser integrados los vestigios en el nuevo edificio. Un ejemplo de ello está en Torre de Benalgabón, donde el centro dedicado a Antiopa ocupa los bajos de unas viviendas.
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