Moreno: «La Junta está dispuesta a hacer PCR en el aeropuerto de Málaga a turistas británicos»

Esta iniciativa la ha reclamado de forma insistente Turismo Costa del Sol desde la apertura de fronteras, pero hasta ahora sin mucho éxito. El de Reino Unido es el principal mercado internacional para la Costa y supone el 30% del negocio hotelero. En 2019 vinieron 2.931.733 turistas británicos a Málaga, el 29,6% del total de llegadas al aeropuerto Pablo Picasso, que acabó el pasado año con casi 20 millones de pasajeros.

El presidente explicó que la escasez de profesionales sanitarios no será un problema y que la creación de estos corredores ahora sí es posible, a diferencia de este verano, porque su Gobierno ha adquirido test rápidos con la misma efectividad de los PCR, pero cuyo resultado puede conocerse en 20 minutos. Así a ese turista británico, para quien el destino de la Costa del Sol «es muy querido y cercano», cuando llegue al aeropuerto se le hace un test y «mientras se toma un café tranquilo», conocerá el resultado que la Junta certificará y podrá, en caso negativo, seguir con sus vacaciones sin cuarentena. Una prueba que el ejecutivo autonómico está dispuesto a hacer al mismo turista de regreso a su país. «Estoy convencido que si hacemos un esfuerzo conjunto AENA, Estado y Junta de Andalucía, podemos empezar a fijar de una manera eficiente la seguridad en los aeropuertos», expresó el presidente, que califica de «revolución» el hallazgo de estos PCR rápidos con un 99% de fiabilidad. La Junta ya ha adquirido dos millones de pruebas, que aplica en el cribado de los municipios más afectados por la Covid.

Moreno va más allá y opina que este sistema de control podría aplicarse también en espectáculos y eventos culturales, para lo que anunció que estaría dispuesto en ese caso a ampliar los aforos. Para ello solicita la colaboración de la iniciativa privada. «¿Por qué no podríamos hacerle un PCR (a un espectador) justo antes de entrar a un espectáculo de ocio o cultural?», plantea el presidente en 'La Alameda'. Luego apostilla: «También las empresas privadas tendrán que poner de su lado para sufragar el coste de estos PCR».

En una entrevista en la que se abordó el presente y futuro de la situación en Andalucía bajo la amenaza de la pandemia, Moreno quiso lanzar un mensaje de «serenidad», aunque admite la «preocupación» por la segunda oleada de contagios. Subrayó que en Andalucía, tanto en esta como en la primera, «estamos en una incidencia baja de la tabla de las comunidades», entre las de menos contagios por 100.000 habitantes en los 14 días últimos. «Eso tranquiliza, pero no relaja», admite ante la virulencia del virus en España. Por ello remarcó que la Junta tiene reserva de camas y UCI suficientes por si se sobrepasa la cifra de 3.000 hospitalizados o se llega a los 4.500, algo que espera que no suceda.

Recordó que en el pico de la primera ola, en marzo, se llegó a los 2.705 ingresados, cuando los hospitalizados por ahora apenas superan la cifra de 1.100. Destacó la incidencia desigual en Andalucía, con datos de contagios muy altos en Almería hace cuatro semanas, luego aminorados como en Málaga, mientras ahora es Sevilla la que repunta. En el caso de Málaga dijo que esta semana «empieza a descender, de manera lenta, pero se ha ralentizado».

Moreno admite que la mayor preocupación para su gobierno es la Atención Primaria. Ante la pregunta del periodista Manuel Castillo sobre qué diría a los ciudadanos que llaman a los servicios de atención primaria o a Salud Responde y no reciben respuesta o citas con retraso de varios días, contesta: «Pedir disculpas; porque al final es un servicio público, un servicio que tenemos que hacer entre todos que funcione». Acotó, no obstante, que es un servicio que viene de «muchos recortes de la década pasada» y que esta administración que preside solo ha tenido un año y nueve meses para intentar actualizar. «No es tiempo suficiente para intentar renovar una plantilla, fortalecerla, modificarla, organizarla y además conviviendo con una pandemia».

Respondió que hay un esfuerzo por hacer más contrataciones de sanitarios pese a la «competencia brutal» por la carencia de profesionales en España. En la misma tarde de ayer Salud informó de una convocatoria de 8.000 plazas; También que se ha reforzado «por tres» los servicios de Salud Responde; que habrá una ampliación de citas presenciales del médico con el paciente ( a diez minutos cada consulta), aunque se seguirá con la atención telemática como aconseja el Ministerio de Sanidad para evitar contagios de sanitarios y pacientes. En este aspecto reiteró que Salud estudia la atención visual vía móvil o 'tablet'. Ponderó las obras que se realizan en centros sanitarios y urgencias de hospitales para adecuarlos a la emergencia del covid. «Estamos haciendo, con los recursos que tenemos, todo lo humanamente posible para contener la pandemia y para que no nos atropelle como sí ha atropellado a otras comunidades autónomas», dijo.

Moreno respondió sobre la repercusión de la pandemia en la economía y también en este aspecto se mostró optimista, deseando que los analistas económicos se equivoquen con una previsión del 30% de paro en la comunidad. «Quiero ser un poco más optimista y creo que podemos evitarlo si hay un paquete de estímulo y si tenemos en Andalucía uno simultáneo del Gobierno de España que nos permita que la economía no se pare; si eso se produce con los fondos europeos o los propios del Estado, estoy convencido de que no vamos a llegar».

Señaló como motivos para la esperanza de remontar en que meses antes de la pandemia Andalucía se había convertido en foco de atracción de inversiones internacionales, con un incremento de hasta el 80%; y que durante la crisis sanitaria el comportamiento de las exportaciones del sector agro industrial ha marcado récord, con 6.500 millones de euros. «Hemos tenido noticias de cómo fondos de inversión compran empresas tecnológicas en Málaga, como el fondo noruego, o en Sevilla. ¿Qué significa? Que hay una parte de nuestra economía que sigue, que está acostumbrada a la crisis; es más, empresas que nacieron en la crisis anterior y que están adaptadas a la crisis, y que están creciendo; por tanto tenemos músculo, capacidad y talento para salir de una manera lo más rápidamente posible de esta crisis», reflexiona en la entrevista.

También reconoce las limitaciones de sectores como el turístico por los problemas de movilidad por la pandemia. En este aspecto, reprocha al Gobierno de España que no haya reclamado ayudas a la Unión Europea para el turismo, aunque se ha congratulado que al final haya recapacitado para incluir en la prórroga de los ERTE a la hostelería. Pero también criticó por «incomprensibles» afirmaciones de ministros del Gobierno sobre turismo, sin citar nombres. «Hay partes del Gobierno que considera que el turismo es una actividad que hay que apartar, que dentro del modelo productivo español andaluz hay que modificar y tiene que pasar a un sector minoritario; hay ministros que han hecho afirmaciones muy duras contra el sector turístico y con dudas sobre si tiene viabilidad y debe ser uno de los pilares de la economía. Estoy en claro desacuerdo», apostilló.

Moreno citó el plan 'Andalucía en marcha' con el que su Gobierno quiere contribuir a la recuperación con obras en equipamientos que muevan inversión pública y privada por 3.500 millones de euros, entre ellos el tercer hospital de Málaga. Sobre esta obra expresó su deseo y convencimiento de verla echar a andar esta legislatura. «No nos va a dar tiempo a inaugurarlo (esta legislatura), pero yo sí quiero ver las obras, los cimientos. Estoy apretando para que los malagueños vean que una vez que se comienza una obra ya no hay vuelta atrás. Les puedo decir que vamos a tener un tercer hospital porque nos lo merecemos y porque es necesario para la provincia», remarcó.

Igualmente avanzó que la Junta de Andalucía reclamará al Gobierno 20.000 millones de euros del reparto de los fondos europeos, cifrados en 140.000 para España. Reiteró que el reparto debe gestarse con los criterios de paro, renta y población. Preguntado sobre si confía en la distribución del Gobierno de Pedro Sánchez, respondió: «Yo voy a intentar tener confianza. Vamos a ver si al final no la frustra (Pedro Sánchez). Y lo único que espero es que trate a Andalucía como corresponde. Si no nos tratan como nos corresponde, si una vez más se dan más recursos al País Vasco o a Cataluña, yo me opondré con todos los recursos a mi alcance».

El presidente andaluz fue muy crítico con el Gobierno por la polémica sobre el Rey y el Poder Judicial. «A mí me parece un disparate colosal que con la que está cayendo, con una crisis como la que vivimos, que estemos provocando desde el Gobierno de la nación una crisis institucional atacando a la figura del jefe del Estado», manifestó para señalar al vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, y al ministro de Consumo, Alberto Garzón, sin mencionarlos. «A mí me parece tremendamente irresponsable. Igual que lo que estamos viviendo en Madrid. Yo apelaría a la serenidad, un poco bajar el balón, que seamos sensatos, que pongamos sentido común, que intentemos empatizar con el contrario y que abramos canales de comunicación. Aquí no estamos para pelearnos y ni para el y tú más; aquí estamos para meter el hombro respetando las legítimas posiciones que cada uno tiene».

En otro momento de la entrevista también advierte de consecuencias en la sociedad por la confrontación institucional y política. «Es tremendamente lesivo para la credibilidad de una institución que desde un gobierno se eche a pelear a una comunidad contra un gobierno o contra el jefe del Estado o contra un poder como el Poder Judicial. Mucho cuidado con eso porque eso lo que hace es erosionar gravemente la credibilidad del sistema».

El presidente andaluz defiende la figura del Rey Felipe VI como «un árbitro» necesario en la política española. «Creo que la Monarquía, la Jefatura del Estado, juega un papel esencial para la supervivencia de nuestra nación, y por tanto creo que ahora mismo la mayoría de los españoles es consciente de ello y no cuestiona nuestro modelo de monarquía parlamentaria», respondió sobre si cree que está en cuestión el modelo de Estado.