Italia archiva las denuncias de Juana Rivas por maltrato

En dicha resolución, avanzada por el diario 'El Mundo' y, entre las denuncias por supuesta violencia de género sobreseídas (las presentadas en 2016 y 2018) está la primera, esa que la granadina formuló en el cuartel de Maracena de la Guardia Civil contra el italiano, que tiene la custodia exclusiva de sus hijos. En declaraciones a este diario, el abogado en España de Francesco Arcuri, Enrique Zambrano, manifestó ayer que el desenlace de esas denuncias era algo «esperado» y que la resolución es «lo suficientemente dura como realista en sus afirmaciones». Para la defensa de Arcuri, la resolución italiana se resume en dos puntos: «la falsedad de todas las denuncias y la falta de razonabilidad o lógica en las mismas». Junto a ello, Zambrano puso de relieve que «despeja cualquier duda en cuanto a la aptitud del padre, al que califica de atento y modélico». El jurista tildó de «relevante» el hecho de que no se dé crédito a la denuncia primitiva, en la que Rivas decía haber sufrido violencia física y psíquica entre 2013 y 2016, cuando residía en el país transalpino. Y es que en ella se había escudado para quedarse en nuestro país con sus hijos aprovechando que había venido de vacaciones.

Esa fue la misma denuncia que la justicia granadina remitió en su día a Italia al considerar que debía ser tramitada allí, por situar la granadina en la pequeña isla de San Pietro, al sur de Cerdeña, los supuestos malos tratos. En aquel lugar, en Carloforte, ambos regentaban una idílica hospedería, donde actualmente sigue residiendo Arcuri con los pequeños. «El tribunal dice que no es más que una denuncia excusatoria», añadió Zambrano, para quien tenía también «una motivación económica, que no era más que obtener la ayuda no contributiva».