Los golpes de calor se disparan este año con nueve casos registrados y una persona fallecida
La Junta activa un plan contra los efectos de las olas de calor como la actual para prevenir y proteger a las personas más vulnerables
La primera ola de calor del verano ya ha llegado con toda su crudeza y el Gobierno andaluz ha activado un plan para combatir ... sus efectos más severos en la salud de las personas con un protocolo de coordinación frente al impacto de estas temperaturas excesivas que superan estos días los 40 grados.
Las consecuencias de estas olas de calor que van en aumento son cada vez más graves para la salud y desde el pasado 16 de mayo, fecha en la que se activó el plan, se han registrado ya nueve casos por golpe de calor y uno de ellos se cobró la vida de una persona hace una semana en Córdoba. Según la Consejería de Salud y Consumo, esta cifra supera ya en lo que va de año a los golpes de calor registrados en los últimos cinco años para las mismas fechas. Así, en 2020, 2023 y 2024, se contabilizaron seis casos; en 2021, uno y en 2022, cuatro. Solo en 2024 se produjeron siete defunciones.
Desde el departamento que dirige Rocío Hernández se prevé que el impacto de las olas de calor irá a más en el futuro con los efectos del cambio climático y se apuesta por la protección y la prevención a través del plan que tiene en marcha desde hace más de dos décadas y que contempla un protocolo de coordinación y actuación frente a los grupos de población más vulnerables.
Estos grupos con más riesgo se sufrir las consecuencias de las altas temperaturas son las personas mayores de 65 años con patologías previas, mujeres embarazadas, personas sin hogar o con discapacidad y menores de cuatro años, especialmente lactantes.
A ellos se suman también las personas que realizan actividades físicas expuestos al sol y trabajadores al aire libre o en ambientes calurosos. Este plan estará operativo hasta el 30 de septiembre, si bien se introduce un criterio de flexibilidad que permitiría ampliarlo hasta octubre si continúan para esas fechas las altas temperaturas.
Este protocolo, que tiene como objetivo general reducir el impacto sobre la salud de la población de las temperaturas de calor extremas, involucra a muchos departamentos del Gobierno andaluz además de la Consejería de Salud como son la de Inclusión Social, Presidencia, Desarrollo Educativo, Turismo, Cultura y Empleo, así como a Emergencias 112 y a la Federación Andaluza de Municipios y Provincias.
El plan facilita la respuesta intersectorial de manera coordinada, aunando las medidas necesarias por parte de las distintas instituciones de la Administración General del Estado, de la Junta de Andalucía y de la administración local y centrando los esfuerzos preventivos en las poblaciones de mayor riesgo de morbilidad y mortalidad. La Consejería de Salud transmite una predicción de las olas de calor realizada por el Ministerio de Sanidad a partir de la información facilitada por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), estableciendo niveles de alerta según el grado de riesgo por exceso de temperatura.
Así, el protocolo determina cuatro niveles de alerta que van desde la ausencia de riesgo y nivel verde hasta el alto riesgo o nivel rojo. También es misión de la Consejería la identificación de los grupos de población más vulnerables con el fin de orientar y priorizar las medidas preventivas en cada ámbito institucional.
La Consejería de Salud subraya que la exposición a elevadas temperaturas provoca efectos directos en el organismo y que pueden ser de menor a mayor gravedad, además de provocar estrés por calor, definido como las molestias y tensión psicológica asociada con la exposición a elevadas temperaturas; agotamiento por calor con signos y síntomas que incluyen una intensa sed, debilidad, malestar general, ansiedad, vértigo, mareos, y dolor de cabeza.
Olas de calor más «precoces, intensas y duraderas»
Las olas de calor han llegado de la mano del cambio climático para quedarse más allá del verano, ya que las altas temperaturas podemos ya sufrirlas en meses atípicos hasta ahora y estaciones como la primavera o el otoño. El director general de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, Manuel Fernández, afirmó a SUR que se están registrando cada vez más olas de calor «más precoces, adelantadas a su tiempo habitual, más intensas por el alto nivel de las temperaturas, y más duraderas», todo ello vinculado a los efectos del cambio climático. Manuel Fernández vaticinó que estas olas de calor, estrechamente vinculadas a los efectos del cambio climático, van a ir a más en el futuro y precisó que Andalucía se encuentra en la primera línea de los territorios más afectados, como ya se está viendo con la circulación de mosquitos transmisores de la enfermedad del Virus del Nilo. El director andaluz de Salud Pública llamó a la responsabilidad de la ciudadanía para que tenga «una percepción del riesgo, ya que además de los colectivos de personas más vulnerables, nadie está exento de sufrir un golpe de calor por muy bien y sano que esté, por lo que afecta a toda la población, no importa la edad ni el estado de salud». Manuel Fernández insistió en una serie de consejos que son los más adecuados para combatir esta ola de calor como protegerse del sol, evitar salir en las horas centrales del día, mantenerse fresco e hidratados y alimentarse correctamente, vestir ropa cómoda y gorra y mantener la casa fresca cerrando puertas y persianas. El director de Salud Pública destacó el plan activado por la Junta con unos protocolos que mantienen una vigilancia epidemiológica exhaustiva, midiendo las distintas situaciones y niveles de riesgo, con lo que se permite impulsar medidas de protección destinadas a los distintos sectores para actuar en la prevención y mitigación.
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