El diario de una menor lleva a su padre a prisión por abusos
El cuaderno personal de la adolescente en el que narraba los tocamientos fue descubierto por su cuidadora que la acompañó a denunciar
MONTSE MARTÍN
Sábado, 2 de febrero 2013, 03:59
La Audiencia de Málaga ha condenado a un hombre a dos años y medio de cárcel por abusar de su hija menor de edad, ... a la que no podrá acercarse ni comunicarse durante cinco años. La niña tenía trece años cuando comenzó a sufrir los tocamientos, que se prolongaron durante tres años. La víctima escribió los abusos de los que era objeto por parte de su padre en un diario personal, que tiempo después fue encontrado casualmente por su guardadora. El progenitor estuvo dos años en paradero desconocido y pudo ser localizado y detenido tras varias órdenes de busca y captura del juzgado.
Los hechos se remontan a diciembre del año 2002 cuando el hombre se encontraba con su hija en casa de un amigo en Fuengirola. Ambos estaban acostados en la misma cama, cuando el acusado comenzó a tocar los genitales a su hija y a masturbarle. La niña, que entonces tenía 13 años, reaccionó protestando y le dijo a su padre que la dejara, a lo que su progenitor le contestó amenazante: «Calladita, que si no ya sabes lo que te espera». Acto seguido sacó su pene y colocó la mano de su hija encima. Como quiera que la menor la apartó, el hombre se colocó sobre la niña y se masturbó entre sus piernas, aunque no llegó a penetrarla.
La sentencia explica que a partir de entonces, el hombre repitió estos episodios «en los que ha adoptado con su hija una conducta libidinosa, llegando a besarla en la boca, tocarle los pechos y los genitales».
Durante el juicio el hombre negó los abusos alegando en su defensa que la menor le tenía rencor por haber querido más a su hermano.
Por su parte, la víctima mantuvo siempre la misma versión de lo sucedido. Fue examinada por una psicóloga judicial que concluyó que su testimonio era «creíble». Además su versión de los hechos fue respaldadas por las pruebas indiciarias que proporcionaron las declaraciones de su guardadora y el que es actualmente su marido. La primera, que había cuidado de la menor desde 2002, relató como casualmente encontró su diario personal en el que relataba los abusos y pudo enterarse de lo sucedido. Esta testigo, además, declaró que había advertido desde un año y medio antes una actitud de rechazo de la adolescente hacia su padre y manifestó que estaba en tratamiento psicológico.
La sentencia del Juzgado de lo Penal número 7 ha sido confirmada íntegramente por la Audiencia de Málaga. El tribunal ha rechazado aplicar la atenuante de dilaciones indebidas que pedía la defensa del acusado, al que le recuerda que estuvo más dos años en paradero desconocido y que recurrió un auto judicial cuya resolución tardó siete meses.
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