¿La violencia tiene género?

El juez de Violencia sobre la mujer nº1 de Marbella, Juan José Navas Blázquez, destacó durante su intervención la importancia en la sociedad del problema del maltrato, sobre el que apuntó que «tiene difícil solución». El magistrado se mostró tajante en su respuesta a la cuestión planteada en la mesa redonda y aseguró que la violencia no tiene género.

Al respecto, Navas Blázquez explicó que, «a día de hoy», en un 90 por ciento de los casos de violencia de género que instruye las víctimas son mujeres. Aun así, el juez de Violencia sobre la mujer nº1 de Marbella insistió en que, en los últimos años, la cifra de hombres que han resultado ser víctimas de maltrato se ha incrementado.

Navas Blázquez indicó que «hay que preguntarse sobre si las medidas que ha instaurado el Gobierno para frenar el problema del maltrato han sido eficaces o no». Pese a que no entró a valorar las iniciativas del Gobierno, el juez sí destacó el dato de que, en los últimos años, la cifra de víctimas de violencia de género ha continuado incrementándose, «salvo alguna excepción».

Por su parte, el representante de la Fiscalía Carlos Lláñez afirmó que la respuesta a la pregunta planteada en la mesa redonda es «controvertida» y manifestó que hay que cuestionarse sobre si toda la violencia que ejerce el hombre sobre la mujer es violencia de género o no.

En este sentido, Lláñez puntualizó que, en un plano de igualdad, hay otros tipos de violencia que no responden a la de género, a la vez que aseveró que dejó su extensa labor al frente de asuntos de malos tratos por «agotamiento personal e intelectual».

La presidenta de la asociación Despertar sin Vida, Carmen Sánchez, se mostró tajante y aseguró que la violencia no tiene género: «Hay muchos hombres maltratados por sus parejas, cada vez más. Por ejemplo, en nuestra asociación este año ya hemos atendido a 22 varones». Por ello, Sánchez cree que la ley no debería distinguir entre hombres y mujeres a la hora de ser víctimas.

El consejero general de la abogacía española Nielson Sánchez Stewart situó el origen de la desigualdad entre hombres y mujeres en la religión: «Dios es varón y a partir de ahí todo es desigualdad para la mujer». Sánchez Stewart dijo que, a nivel individual, las diferencias entre hombres y mujeres en aspectos como los salarios o el acceso a altos cargos es patente, mientras que, en pareja, «se ha avanzado tanto que nos hemos pasado». Así, añadió que la mujer dispone de herramientas que son buenas si son bien utilizadas, pero, si no, «son peligrosas».

«La cifra de hombres que han resultado ser víctimas de maltrato se ha incrementado»

«Dejé de dedicarme a la violencia de género por agotamiento intelectual»

«Dios es un varón y a partir de ahí todo es desigualdad para la mujer»