Los trabajadores del NH Alanda irán a la huelga en respuesta a los despidos

La concentración se llevará a cabo en las puertas del establecimiento que la cadena tiene en el centro de la capital malagueña. A ella están convocados, además de la totalidad de la plantilla del NH Alanda, integrada por medio centenar de empleados fijos y una veintena de fijos discontinuos, los delegados sindicales de ambas centrales.

La jornada de huelga, la única fijada hasta el momento por los sindicatos, solo podría evitarse si las partes llegan a un acuerdo in extremis un día antes en el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales (Sercla). A juicio de los sindicatos esa sería la única solución, ya que según señalan, la dirección ha contestado solo con despidos a la oferta de diálogo planteada por los trabajadores.

Según denuncia la secretaria sectorial de la Federación de Comercio, Hostelería, Turismo y Juego de UGT Málaga, Susana González, la cadena ha optado por los despidos como represalia por no llegar a un acuerdo con el comité de empresa sobre las nuevas condiciones laborales del personal. Con el añadido, según González, de que el documento solo imponía los criterios de la dirección. Este periódico intentó sin éxito contactar con algún responsable de la empresa con el objetivo de contrastar esta versión.

Según informó UGT, NH Alanda propuso a sus trabajadores las novaciones de los contratos de fijos a fijos-discontinuos con la intención de cerrar a partir del 1 de noviembre las puertas del establecimiento durante los meses de invierno. El periodo de inicio de la novación de los contratos ha sido, según el sindicato, la gota que ha abierto la caja de Pandora. Un conflicto laboral que, como ya informó SUR, arrancó motores el viernes pasado con los primeros siete despidos. Una lista negra a la que se sumaron tres nuevos trabajadores a principios de semana.

Despidos nulos

El secretario general de la Federación de Comercio, Hostelería y Turismo de UGT, José Antonio Sedano, llama la atención sobre el hecho de que todos los despidos se han producido por cuestiones disciplinarias. Sedano asegura que «son despidos nulos», sin embargo, afirma que «no nos podemos quedar quietos mientras un juez resuelve». El sindicalista pone el ejemplo de una trabajadora que se ha quedado en la calle por fumar en su puesto de trabajo siendo no fumadora, o de otro empleado al que la firma achaca dejar de cumplir con sus funciones en una jornada de asuntos propios.