El Obispado fuerza a dimitir al hermano mayor del Cautivo porque no ve bien que esté divorciado
Juan Partal tomará una decisión el lunes tras reunirse con su junta de gobierno ante la amenaza de la Iglesia de intervenir la cofradía
Ángel Escalera
Viernes, 7 de noviembre 2014, 22:57
El Obispado de Málaga ha lanzado un ultimátum al hermano mayor de la Cofradía del Cautivo, Juan Partal, para que presente su dimisión. En caso ... de que Partal no se marche y la ejecutiva de la cofradía (integrada por el hermano mayor y seis directivos) le respalde, el Obispado estaría dispuesto a intervenir la cofradía y a poner al frente de ella a una persona de su confianza. La situación de Partal (que había pedido seguir en el cargo hasta la finalización de la próxima Semana Santa) es muy complicada, puesto que si no dimite los responsables de la Iglesia malagueña lo quitarían; en caso de que los miembros de la ejecutiva de la cofradía le den su apoyo también serían apartados de sus puestos, lo que dejaría a la popular hermandad trinitaria sumida en un grave problema.
Aunque el Obispado no quiso pronunciarse ayer y dijo que no tenía nada que decir tras ser preguntado por este periódico, el hecho de que Juan Partal esté divorciado parece ser la causa de que la Iglesia malagueña no desee que siga como hermano mayor. Partal anunciará su decisión el lunes por la noche tras reunirse con su junta de gobierno, compuesta por cerca de 60 personas. SUR preguntó a Juan Partal su versión de los hechos, pero este prefirió ser prudente y no realizar declaraciones hasta que el lunes mantenga la reunión con su junta de gobierno.
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Sin embargo, otras fuentes consultadas por este periódico indicaron que, aunque el Obispado lo niega, el motivo por el que se presiona a Partal para que se marche es por su situación de divorciado. Esas fuentes aseguraron que la Iglesia no se atreve a decirlo abiertamente y sostiene que «hay una ruptura en el seno del Cautivo» que obliga a tomar medidas y a forzar la dimisión del hermano mayor. Ese fue el argumento que el delegado episcopal de hermandades y cofradías, Antonio Coronado, le dio a Partal en una reunión que tuvo con él el miércoles por la tarde.
El Obispado justifica que Partal tiene que irse en que ha recibido denuncias de un grupo de hermanos del Cautivo en las que expresan la división interna que hay en la cofradía. Esa fractura fue negada categóricamente por otros hermanos.
Lo cierto es que Coronado dejó claro que el Obispado no desea que Partal siga al frente del Cautivo en los meses que restan hasta la Semana Santa. La decisión del todavía hermano mayor se conocerá el lunes, pero su margen de maniobra es muy escaso. Si se niega a dimitir sabe que el Obispado le obligaría a irse. Además, si la ejecutiva se pone de parte de Partal se arriesga a que la Iglesia tome las riendas de la hermandad trinitaria y nombre a un comisario, figura que ya se utilizó en la Archicofradía de la Expiración y en la Cofradía del Rocío.
Tal como están las cosas, la mejor opción parece que Partal renuncie (también tendría que dejar el cargo de vicepresidente segundo de la Agrupación de Cofradías) y de forma transitoria se haga cargo de la cofradía el primer teniente hermano mayor, Juan Bautista, hasta que haya elecciones.
Este conflicto se produce a dos semanas de que la imagen de Jesús Cautivo salga en procesión por las calles del barrio de la Trinidad como culmen de los actos organizados con motivo de la bendición de la imagen. El Señor de Málaga irá en su trono de Semana Santa. La cofradía ya ha llenado dos turnos de portadores para llevar la imagen. En cada uno participarán 228 hombres, que lucirán traje oscuro.
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