Sánchez comunica a Rajoy que ni se moleste en llamarle
Recuerda al presidente del Gobierno que Aznar le mostró ayer el camino de «salida de la política»
R. GORRIARÁN
Jueves, 31 de marzo 2016, 01:13
madrid. Pedro Sánchez vino a decirle a Mariano Rajoy que se ahorre la anunciada y nunca materializada llamada de teléfono para fijar una cita con ... vistas a llegar a un acuerdo para gobernar. El líder garantizó al presidente del Gobierno que no tiene nada que pactar con el PP. Apuntó que si pese a todo Rajoy descuelga el teléfono, algo que lleva anunciando «desde hace cuatro semanas», le atenderá, pero solo para decirle que «estamos dispuestos a tender la mano al PP desde el Gobierno». El líder del PSOE ni se plantea negociar un programa de Gobierno con el líder del PP, y mucho menos si la oferta es formar una coalición entre los dos partidos para que Rajoy siga en la Moncloa
Los populares, dijo el secretario general del PSOE, son «los damnificados del cambio», y con ellos, «por respeto a sus siete millones de votantes, puedo hablar, pero no puedo acordar». Sánchez señaló que el PP lo que tiene que hacer es «pasar a la oposición para regenerarse y renovarse» porque sus problemas «solo tiene solución» lejos del Gobierno. Rajoy, en concreto, según Sánchez, debe «asumir en primera persona» la responsabilidad por los casos de corrupción que han llevado al PP a la actual situación. Se permitió incluso recordar las palabras del expresidente José María Aznar y mentor de Rajoy, quien en presencia de su sucesor abogó por «nuevos liderazgos capaces de ejercer una tracción social, moral y política a la altura de los desafíos que tenemos».
Sánchez consideró que con esas palabras, dichas en un acto de homenaje al escritor Mario Vargas Llosa, Aznar «está señalando con el dedo» a Rajoy que debe coger la puerta de «salida de la vida política».
El secretario general del PSOE ratificó su acusación al presidente del Gobierno en funciones de que es «un tapón» para la regeneración del PP, pero también de la democracia, «a la que está haciendo daño». Sánchez lanzó este mismo dardo en el fallido debate de investidura y motivó una airada reacción del líder de los populares. Entre los socialistas no creen que el presidente del Gobierno llame a su líder porque condicionó el telefonazo a que fracasara la reunión entre Sánchez e Iglesias, y, al menos ayer, eso no ocurrió.
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