Puigdemont descarta una declaración unilateral y apuesta por redactar una constitución catalana

En una entrevista de TV3, ha explicado que su objetivo es empezar a redactar una constitución catalana y, a través de un referéndum posterior, buscar así que "una mayoría" de catalanes avalen el nuevo Estado catalán.

Puigdemont ha asegurado que el juramento que hizo a la hora de prometer el cargo fue "completamente legal" pese a no citar ni al Rey ni a la Constitución, y ha lamentado que el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, no le haya llamado para felicitarle.

El político ha afirmado estar "completamente" limpio en cuanto a la corrupción, y ha negado haber cometido cualquier tipo de irregularidad antes de ser alcalde, cuando en su trayectoria como periodista fue impulsor de varios proyectos periodísticos, algunos de los cuales recibieron ayudas públicas.

Ha explicado que las subvenciones fueron legales, siempre antes de que la CiU de Artur Mas llegara al poder, y ha asegurado que es "falso e inmoral" acusarle de haberse aprovechado de algún cargo para obtener este dinero.

"Estoy preparado para que fabriquen cualquier cosa -contra él-. Es evidente que cuando se asume esta responsabilidad pringarás", ha reflexionado, asegurando que cualquier información que apunte irregularidades es infundada y solo para perjudicarle por su nuevo cargo.

«¡Visca Catalunya!»

El presidente catalán ha exigido ejemplaridad a los nuevos consejeros de su gobierno, que han tomado posesión este jueves en el Palau de la Generalitat. Los trece nuevos responsables de los departamentos del Ejecutivo autonómico han jurado su cargo bajo la fórmula de "¿promete cumplir fielmente de acuerdo a la ley las obligaciones del cargo que asume al servicio de Cataluña y con lealtad al presidente de la Generalitat?, aunque obviando la Constitución.

Puigdemont, que ha vuelto a mostrar lealtad al expresidente Mas, ha instado a los nuevos consejeros a que no renuncien a nada y a que todo lo que lleven a cargo hagan el esfuerzo de explicarlo bien. Estoy convencido de que la promesa de servicio al país la guardaréis hasta el último segundo, ha afirmado en un breve discurso dirigido a los consejeros. El jefe del Ejecutivo catalán les ha reclamado que sean conscientes del encargo que les hace el país y el pueblo catalán. Todos sabréis guardar el aspecto institucional, este encargo y el servicio a la democracia de manera ejemplar, ha asegurado. Os pido lealtad, ha insistido.

Como en la toma de posesión, se ha despedido con un ¡Visca Catalunya!. A los consejeros salientes, les ha agradecido los servicios prestados al país. Habéis aguantado el tipo con gran dignidad. Habéis sufrido mucho. Han sido tiempos muy difíciles en los que se han tenido que hacer muchos ajustes, ha recordado.

El nuevo ejecutivo catalán está jerarquizado en tres grandes áreas. Oriol Junqueras es el nuevo vicepresidente económico, del que dependen cuatro consejeros (Jordi Baiget, Empresa; Dolors Bassa, Trabajo; Josep Rull, Territorio; y Meritxell Serret, Agricultura). Neus Munté coordina el área social, desde la Consejería de la Presidencia, en la que se integran Salud (Toni Comín), Educación (Meritxell Ruiz) y Cultura (Santi Vila). La tercera pata del ejecutivo recae en Raül Romeva, consejero de Exteriores y responsable del área institucional, que engloba a Gobernación (Meritxell Borrás), Interior (Jordi Jané) y Justicia (Carles Mundó).