La CUP gana tiempo y retrasa al domingo la decisión sobre si inviste a Mas

La CUP, que tiene en vilo a la política catalana, ha decidido retrasar un día, hasta el domingo, la celebración del consejo político, en el que la cúpula de la formación anticapitalista tiene que decidir cómo desempata la votación de la asamblea del domingo pasado y por tanto si apuesta por investir a Artur Mas o aboca a Cataluña a nuevas elecciones.

Antes de la decisión final, que estaba prevista para el sábado 2 de enero, la CUP tenía que convocar a sus órganos internos, tanto las asambleas locales, como las territoriales, pero ante la dificultad de reunir a su militancia por las fechas de Nochevieja y Año nuevo, el cónclave se ha pospuesto un día más. En el encuentro participarán una sesentena de representantes de les asambleas territoriales, los diez diputados en el Parlamento catalán, así como los miembros del secretariado del partido. La cúpula ha celebrado esta pasada noche una larga reunión, en la que ya ha definido qué fórmula empleará para deshacer el empate de la asamblea y cómo decidirá la ejecutiva de la formación. Ésta deberá votar entre dos opciones. Una primera que rechaza a Mas y que consiste en trasladar los resultados de la Asamblea a un posible nuevo pleno de investidura a través, o bien de 5 votos favorables y 5 votos en contra, o bien a través de la abstención de los 10 diputados de la CUP. Ambas posibilidades tumbarían la investidura de Mas. La opción que favorece su investidura es que la CUP dé dos votos a favor de Mas y 8 abstenciones, "como traducción de la apuesta de la CUP por la independencia y un proceso constituyente y popular y de la oposición a la continuidad de las políticas de recortes y privatizaciones".

Mientras, el Parlamento catalán lo tiene todo ya preparado para que la semana que viene, si así lo decide la CUP, se pueda celebrar la sesión de investidura del presidente de la Generalitat. El lunes, un día después, de la cumbre anticapitalista, se reunirán la mesa y la junta de portavoces, que fijarán la fecha de la elección del nuevo jefe del Ejecutivo.

Antes de la decisión final, que estaba prevista para el sábado 2 de enero, la CUP tenía que convocar a sus órganos internos, tanto las asambleas locales, como las territoriales, pero ante la dificultad de reunir a su militancia por las fechas de Nochevieja y Año nuevo, el cónclave se ha pospuesto un día más. En el encuentro participarán una sesentena de representantes de les asambleas territoriales, los diez diputados en el Parlamento catalán, así como los miembros del secretariado del partido. La cúpula ha celebrado esta pasada noche una larga reunión, en la que ya ha definido qué fórmula empleará para deshacer el empate de la asamblea y cómo decidirá la ejecutiva de la formación, aunque no ha trascendido.

Mientras, el Parlamento catalán lo tiene todo ya preparado para que la semana que viene, si así lo decide la CUP, se pueda celebrar la sesión de investidura del presidente de la Generalitat. El lunes, un día después, de la cumbre anticapitalista, se reunirán la mesa y la junta de portavoces, que fijarán la fecha de la elección del nuevo jefe del Ejecutivo.