El Unicaja, ante el riesgo de no competir en tres semanas
La plantilla del Burgos está confinada por coronavirus y hoy se somete a nuevas pruebas para determinar la evolución de los contagios
La dinámica positiva que acumula el Unicaja puede verse interrumpida de forma abrupta. Al nuevo escenario sin competición europea y partido entresemana, se puede ... unir una circunstancia imprevista en el calendario a estas alturas de la temporada. El equipo malagueño podría estar sin jugar hasta el 10 abril y eso altera cualquier planteamiento.
El Unicaja, en principio, recibe el próximo sábado al Hereda San Pablo Burgos (17.30 horas), pero ese encuentro está a día de hoy en el aire. El equipo burgalés lleva tres semanas sin competir en la Liga Endesa desde el 27 febrero cuando jugó ante el Real Madrid, debido a un contagio masivo por coronavirus dentro de su plantilla. La Liga ACB ha ido aplazando sus encuentros de forma escalonada y a lo largo de esta semana tendrá que pronunciarse sobre el choque del sábado en Málaga. El Unicaja había esquivado los aplazamientos por contagios hasta el momento. No registró positivos que alterasen su calendario y tampoco se vio afectado por los de otros equipos. Ahora está por ver cómo es la evolución del virus en el Burgos para determinar si se juega el choque. Según se apuntaba ayer, los jugadores se someten hoy a nuevos test PCR para determinar evaluar si no hay rastro del virus, pues el miércoles juegan contra el VEF Riga en la Basketball Champios League de la FIBA.
El Burgos informó esta semana de un nuevo positivo en su plantilla, en la que se habían registrado seis contagios
El conjunto que dirige Joan Peñarroya tiene pendientes dos partidos de Liga y uno de la Baskeball Champions, de la que es el vigente campeón. Hasta el momento ha confirmado seis positivos en la plantilla, el último el de Miquel Salvó esta misma semana. La ACB exige un mínimo de ocho profesionales para la disputa de los encuentros.
Si finalmente el partido ante el Burgos no se juega este sábado, el Unicaja ya no volverá a competir hasta el 10 de abril en Málaga ante el Andorra. Se da la circunstancia de que en Semana Santa le toca descanso en la Liga por el ajuste del calendario al haber 19 equipos, por lo que ya habría que esperar hasta el siguiente fin de semana para el encuentro contra el Andorra.
Se trata de una situación anómala para un equipo que está acostumbrado a jugar cada tres días durante muchos meses. Ahora, sin Eurocup podía llegar más fresco a los partidos, pero tres semanas sin competir puede provocar un desajuste en el ritmo de competición. Quizá Katsikaris aproveche este tiempo para introducir nuevos conceptos si finalmente se confirma el largo parón. A los profesionales tampoco les hará mucha gracia estar tanto tiempo sin competir, porque, al fin y al cabo, lo que les gusta es jugar y no entrenar. La ACB informará esta semana sobre la situación del Burgos.
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