Ibon Navarro: «La Copa es como un 'spin-off' dentro de la temporada: puede pasar cualquier cosa»

El trabajo ya está hecho y en la última sesión antes de viajar lo importante, asegura, es que queden todos los conceptos claros. A priori irán todos menos Ejim, que sigue arrastrando problemas en el sóleo. No quiso hablar de los pinchazos ante el Girona y el Breogán y explicó por qué: «Ya os expliqué que en estas tres jornadas entre la última jornada de la primera vuelta y la Copa siempre pasan cosas y nosotros no podemos mantenernos ajenos, porque son muy naturales. Tenemos claro el diagnóstico de lo que ha pasado fuera de casa. Si me hacéis una pregunta cara al próximo partido en Liga fuera de casa, podemos hablarlo, pero en la Copa del Rey no influye nada. Te sales de esto, todo el mundo parte de cero y no hay dinámicas ni tendencias. Es una competición que nada tiene que ver con la Liga ACB».

Se medirá al Joventut en cuartos, un equipo que exigirá al Unicaja especialmente por dentro. Sus pívots, «pero también los 'treses' y los 'cuatros'», tendrán trabajo ante el cuadro que dirige Dani Miret. Mantiene un bloque muy importante de jugadores en los últimos años que condiciona su juego y también el tuyo. Es un equipo muy peligroso. Va a llegar muy preparado y hay alguna connotación nueva respecto a años anteriores«, agregó sobre su próximo rival. Avisó de los peligros de Dekker: »Respecto al cambio por Kaiser Gates, que es por el que entró, está más cerca de su máximo potencial. Se ha adaptado muy bien y le han dado un rol importante, en el que se encuentra muy a gusto. Es muy completo y le da muchas cosas que faltaba«.

Se reafirmó en que no le gusta jugar el jueves, primer día de competición, «y ni mucho menos el primer partido». Así lo argumentó: «Es por experiencia. El campo está vacío y hay algunos equipos que no han llegado aún a la Copa. No has visto la iluminación, el ambiente siempre es frío y casi nunca se ven buenos partidos. Todas esas cosas no son buenas para nosotros. Eres el conejillo de indias». Los favoritismos, para él, son algo que están en las redes y en los periódicos y «salvo que alguien piense que va a ganar el Real Madrid, lo demás es muy volátil».

Lo ocurrido en la pasada Copa, en la que el Unicaja cayó en la ronda de cuartos ante el Tenerife, no es, para el vitoriano, motivo alguno para tener miedo y ni mucho menos para estar acordándose siempre: «El día siguiente saldrá el sol y nos quedarán dos competiciones para seguir peleando. Esa palabra no existe».

En estos últimos partidos se ha trabajado para que el grupo llegue a la Copa en el estado más homogéneo posible. «Habría algunos que estarían muy fuera si no hubiéramos hecho lo que hemos hecho, pero no están en el punto perfecto. Ojalá que el precio merezca la pena porque nos ha costado algo». Más allá, aseguró no tenerlo nada claro con el resto de eliminatorias: «No me jugaría ni un céntimo en ningún cruce».

Ibon Navarro no perderá a ningún jugador en la próxima ventana, aunque será por motivos médicos (nada graves, eso sí). Así lo explicó: «La mayoría se queda porque tienen algún problema, no porque no quieran. Todos tienen deberes médicos porque tienen cosas que les están limitando. Les fastidia, pero entienden que si van y no solucionan sus problemas, el perjudicado es el equipo. El equipo ha tenido que hacer malabares para cuidar a esos jugadores».