Sánchez-Cervi: «Ahora estaríamos preparando la fase de ascenso»
El preparador físico del Unicaja femenino explica que elequipo mantiene el tono cara a una posible vuelta a la competición
marina rivas
Martes, 21 de abril 2020, 01:13
En cuanto a su proyección deportiva, el Unicaja femenino es quizás de los equipos más afectados de la provincia por esta pandemia global. ... Justo el fin de semana que se decretó el estado de alarma, el conjunto liderado por Lorena Aranda podía haber certificado su clasificación para la fase de ascenso a la Liga Endesa femenina, todo un hito en el año en que su equipo debutaba en la segunda categoría nacional. «Esto nos llegó de improviso. Cuando empezó la crisis sanitaria estábamos organizando el viaje del fin de semana, que íbamos a jugar en la cancha del Barça CBS. En esta ocasión yo, que no suelo viajar, sí que me iba a trasladar porque era un partido especial. Si ganábamos, teníamos ya prácticamente hecho el meternos en la fase de ascenso», rememora el preparador físico del primer equipo femenino y de la cantera cajista, José Sánchez-Cervi.
Siguiendo el mismo hilo temporal, el malagueño recuerda, en tono jocoso, que fue un visionario. El primer lunes del confinamiento, acudió a las instalaciones de Los Guindos –entonces desérticas– para aprovechar al máximo posible el material que guardan. «No había nadie allí. Estaban ya empezando a fumigarlo todo y cerraron casi al día siguiente o esa misma tarde. Me subí al gimnasio y fui previsor. Me tiré cuatro horas haciendo ejercicios y grabándolos en vídeo… Unos doscientos hice, y son los que a día de hoy le sigo enviado a las jugadoras para sus entrenos», explica. Y, efectivamente, tirando del editor de su ordenador, envía en vídeos explicativos las rutinas diarias a las jugadoras. Aunque no son los únicos ejercicios de su agenda.
Los planes
Sánchez-Cervi pide a la plantilla que, en ayunas y nada más levantarse, hagan unosveinte minutos de activación con ejercicios de 'cardio', aunque sea saltando a la comba o trotando en el sitio. Después, a media mañana, las cajistas desarrollan la rutina indicaday, además, los lunes, miércoles y viernes, el preparador realiza entrenos guiados de 45 minutos intensos (nivel cardiovascular alto) a través de la aplicación Zoom. Por supuesto, como todos los preparadores estos días, uno de sus retos iniciales fue adaptar las tablas de ejercicios a los materiales de los que cada una dispusiera en su casa. «Las más mayores sí tienen cosas de gimnasio en sus casas, pero el resto apenas tiene nada, así que tiramos mucho de botellas y garrafas de agua, latas, mochilas que cargamos con libros...», explica.
Eso sí, pasan las semanas y no baja el ritmo, porque pese a que él mismo es consciente de que el estado de forma de las jugadoras no será igual tras la cuarentena (pérdida de masa muscular y aumento de los porcentajes de grasa), el objetivo es llegar lo mejor posible. ¿Por qué? Porque el club todavía no pierde la esperanza de que se reanude la competición o se proceda a jugar de forma directa ya una fase de ascenso a la que podría acceder el Unicaja, como actual cuarto del grupo B. Aunque como Sánchez-Cervi explica, reina la sugestión ahora mismo. «Hay mucha incertidumbre con la vuelta, cada vez más. Esta misma semana estaríamos con la preparación de la fase de ascenso, que creo que iba a ser en Madrid y la federación no se ha pronunciado», valora el preparado.
Lo que tiene claro es que se debe pensar en las protagonistas si se reanuda la Liga. «Tanto las jugadoras que están tocadas (sobre todo Gema García, del menisco, Lorena Liñán y Angelique Robinson, con una condromalacia en la rodilla) como el resto, pueden tener riesgo de lesionarse sin una readaptación correcta y creo que con dos semanas de preparación se quedarían cortas», explica. A esto se le une un factor fundamental más: que el contrato de las jugadoras acaba al final de este mes y habría que trabajar y gestionar cada caso para posibles prórrogas de los mismos en caso de disputarse esa fase de ascenso.
Muchas dudas y pocas soluciones a la vista. Por ahora, al preparador del conjunto no le queda más remedio que continuar enviando y valorando las rutinas de las jugadoras (la entrenadora del equipo, Aranda, también las hace) y trabajando junto al resto de profesionales del conjunto, intentando mantener la calma y primando el estado de la plantilla. De quedarle algo de tiempo libre durante el día, Sánchez-Cervi sólo tiene una gran pasión más allá del baloncesto, correr. Es aficionado a las 'ultras', las carreras de grandes distancias (400, 500, incluso 1.000 kilómetros) que lleva años disputando. Aunque ahora no pueda salir de su casa de Torremolinos, a modo de ejemplo, el pasado fin de semana cubrió un circuito de cincuenta kilómetros en su domicilio. Sólo un entrenamiento para alguien que vive por y para el deporte.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión