Reducen a tiros en el Morlaco a un hombre que se fugó de un control e hirió a cuatro policías

Todo comenzó sobre las seis de la tarde de este domingo 14 de julio en la zona de La Malagueta, donde una unidad de la Policía Local le dio el alto al percatarse de que estaba consumiendo sustancias estupefacientes dentro del vehículo.

Lejos de detenerse, el individuo reaccionó emprendiendo la huida a gran velocidad. La persecución se prolongó desde La Malagueta a la calle Levi, en Morlaco, donde los agentes abrieron fuego contra el conductor ante el peligro que suponía para los demás usuarios. El hombre iba acompañado por una chica que resultó ilesa.

No en vano, en el transcurso de su huida, el conductor hirió a cuatro agentes de la Policía Local, uno de los cuales fue atropellado. Los otros tres funcionarios lesionados iban en sendas motos y en un furgón que se sumó a la persecución.

La Policía Local mantiene cortados los accesos a la calle Levi, ya que se ha establecido un cordón policial para que los especialistas del Grupo de Homicidios -ya presentes en el lugar- investiguen la escena y reconstruyan el suceso.

Mientras los agentes de Homicidios realizaban gestiones para reconstruir el suceso, sus compañeros de Policía Científica comenzaban a señalizar con testigos las pruebas del tiroteo. En el lugar aún permanecía el coche en el que viajaba el herido, que había sido precintado por la policía. También estaba la mujer que lo acompañaba, que resultó ilesa. Fuentes cercanas al caso indicaron que, al cierre de esta edición, el individuo estaba siendo intervenido quirúrgicamente para extraerle los proyectiles.

Esta misma semana se ha producido otra persecución policial que acabó en tiroteo, aunque en este caso fueron disparos al aire efectuados por la Guardia Civil para desarmar a un individuo que los encañonó. El hombre, que iba con un coche cargado de hachís, trató de escapar de los agentes que lo seguían -pertenecientes a la comandancia de Algeciras, donde se llevaba la operación contra el narcotráfico que tenía como objetivo al conductor- y acabó empotrándose contra un camión. Según fuentes próximas a la investigación, el sujeto se bajó del vehículo tras el accidente y, al parecer, encañonó a los guardias, que sacaron sus armas reglamentarias y realizaron disparos intimidatorios para desarmarlo.