Borrar
El grupo de bomberos de Málaga que partirá mañana a Canarias, cuando el volcán cumple 70 días en erupción. MIGUE FERNÁNDEZ
Bomberos de Málaga viajan a La Palma: «Lo más duro será ver la tristeza social»

Bomberos de Málaga viajan a La Palma: «Lo más duro será ver la tristeza social»

Siete efectivos pondrán mañana rumbo a Canarias para ser un apoyo en las labores de limpieza y rescate durante una semana

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Sábado, 27 de noviembre 2021, 00:50

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Mañana parte a La Palma el primer contingente del Consorcio Provincial de Bomberos (CPB) de Málaga. Los siete efectivos que lo integran no dudaron en proponerse voluntarios para echar una mano en la isla, en la que el volcán cumple 70 días en erupción. Lo que más les preocupa no son las complicaciones derivadas de la actividad volcánica. Ni las lluvias que están aumentando el riesgo de derrumbes. «Lo más duro puede ser la situación social que nos vamos a encontrar, la enorme tristeza de quienes lo han perdido todo», afirma Francisco Soriano, inspector técnico del Consorcio de Málaga.

Será la primera unidad de la provincia que se traslade a Canarias, pero le seguirán más dotaciones si la catástrofe que asola a la población palmera no remite. Esta solidaridad se ha sellado en un compromiso con el Cabildo de La Palma por el que, cada mes, un grupo de bomberos de Málaga se desplazará para apoyar en las tareas de rescate y limpieza durante una semana. «Cuando se pidieron voluntarios para ir y relevar a los compañeros de allí, a quienes las fuerzas ya les tienen que estar empezando a flaquear, inmediatamente se propusieron unas 50 personas. Eso es digno de reconocer», incide Soriano, orgulloso de la sensibilidad de su equipo.

En esta ocasión, el inspector técnico acompañará en los primeros días a otros seis profesionales: María García, Antonio Manuel Cobos, Salvador Olivas, Joaquín Molina, Marta Soria y Jair Pereira. «Afrontamos esta misión con ilusión y con muchas ganas de trabajar para ayudar a los palmeros y las palmeras», apunta Molina, sargento del Parque de Bomberos de Coín. Estarán operativos durante 24 horas toda una semana, pero eso no les quita el sueño. Al contrario, saben que la causa lo merece.

Estos últimos días han servido para ultimar todos los preparativos, estar el mayor tiempo posible con las familias antes de la partida y poner a punto los equipos de protección individual (EPI) que van a llevar a La Palma. «Estaremos allí a la expectativa de cualquier rescate que pueda producirse: de animales, de personas... intervendremos en accidentes de tráfico y en incendios, como haríamos en cualquier parque de bomberos», adelantaba este miércoles Soriano en una reunión previa al viaje.

Acompañamiento

Uno de los puntos abordados fue el acompañamiento a personas a lugares que puedan entrañar cierto riesgo. Ahí, como explicaba el inspector técnico, será necesario contar con detectores de gases debido a que el viento está moviendo gases tóxicos, como el dióxido de azufre o el ácido sulfhídrico, provocando que la atmósfera sea menos respirable. En el interior de la isla, además, se está detectando monóxido de carbono.

Las lluvias, que esta semana han hecho su primera aparición en Canarias desde el inicio de la actividad volcánica el pasado 19 de septiembre, también están contribuyendo a empeorar la situación en la isla. «Se prevé que el peso de las cenizas aumente, multiplicándose por dos, a consecuencia de las precipitaciones. Esto hace que el riesgo de derrumbe de las estructuras en las que están depositadas las cenizas sea mucho mayor», continuaba detallando Soriano en el encuentro.

Ninguna de estas circunstancias amedrentan el ánimo del personal. Pesan más las ganas de ayudar, pese a ser conscientes de que se van a encontrar con situaciones adversas en los próximos días. «Va a ser una intervención anómala porque nos enfrentamos a una erupción volcánica, y eso no forma parte de nuestro día a día, pero como bomberos estamos perfectamente formados y cualificados para hacer frente a cualquier tipo de situación», sostiene el inspector técnico del Consorcio.

Otras catástrofes

Si algo caracteriza al equipo dirigido por Soriano es la enorme vocación de estar donde más se le necesita. De hecho, algunos de sus miembros cuentan con una dilatada trayectoria colaborando en las labores de rescate y ayuda en catástrofes que han tenido lugar en diferentes puntos del planeta. Una de las más recientes fue la explosión que tuvo lugar en el puerto de Beirut en agosto de 2020. Allí estuvo el cabo Jair Pereira, tratando de paliar las consecuencias del devastador detonante que se saldó con la vida de 217 personas y dejó 7.000 heridos.

Otros integrantes, como María García y Antonio Cobos, también han intervenido en desastres internacionales de gran magnitud, como en las inundaciones de Perú que sucedieron en marzo y abril de 2017 y dejaron más de un centenar de fallecidos; o en el terremoto de Nepal de 2015, en el que murieron miles de personas.

«Cuando acudimos a estas operaciones vamos a dar lo mejor. Y es a la vuelta cuando nos quedamos dándole vueltas a la cabeza; mientras estamos allí nos encontramos inmersos en el trabajo, pero es al regreso cuando procesamos las situaciones de desbordamiento y de tragedia que hemos visto», relata García.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios