Un estudio del CSIC apunta por primera vez a la posibilidad de que la viruela del mono se transmita por el aire

Según el trabajo publicado en la revista 'The Lancet Microbe', el contacto directo, especialmente con lesiones cutáneas de alguien infectado, sigue siendo la forma de contagio dominante, pero determina que, a la vista de los nuevos resultados obtenidos en la investigación, «proponemos no desestimar y vigilar la posibilidad de que se pueda transmitir también a través de las microgotas de saliva y por vía aérea», como indica Antonio Alcamí, investigador del CSIC en el Centro de Biología Molecular Severo Ochoa (CBMSO-CSIC-UAM).

En este estudio, los científicos analizaron muestras de saliva procedentes de 44 pacientes que, entre el 18 de mayo y el 15 de julio de 2022, acudieron a dos centros sanitarios de Madrid (una de las comunidades con una de las incidencias más altas del mundo) porque presentaban lesiones cutáneas características de la enfermedad.

Tras analizar las muestras de saliva, los investigadores detectaron en el 85% la presencia de ADN viral. «Otro dato relevante es que, en el 66% de las muestras, el virus mantenía su capacidad infecciosa», añade Bruno Hernáez, investigador del CBMSO-CSIC-UAM. Además, detectaron la presencia del virus en la mayoría de las mascarillas que los pacientes infectados llevaban puestas durante la consulta médica.

Pero no fue el único descubrimiento, ya que hallaron ADN viral en el aire a una distancia de entre dos y tres metros del paciente. Esta detección fue posible gracias al empleo de unos filtros de nanofibras desarrollados por el CSIC y la empresa Bioinicia, capaces de capturar el virus. «Hemos podido determinar por PCR la presencia del virus de la viruela del mono en el aire muestreado durante la visita médica del 64% de los pacientes del estudio», indica Alcamí, quien destaca que, en este caso, lo que no pudieron constatar fue la capacidad infectiva del virus que circulaba por el aire.

Actualmente, los casos detectados de viruela del mono, desde que en mayo de 2022 surgiera un brote a nivel mundial declarado emergencia de salud global por la Organización Mundial de la Salud (OMS), asciende a más de 79.000. Una cifra que ya supera al total de los registrados en África desde el descubrimiento del virus en 1970. En Europa, y hasta el 8 de noviembre, eran cerca de 25.400 los casos confirmados, según el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades, mientras que, en España, el brote ha llevado hasta ahora a la confirmación de más de 7.300 casos.