Polémica por el posible cambio de género musical en la Esperanza

Sin embargo, una vez tomada la decisión y hecha pública por parte de la corporación, las reacciones de los cofrades, a favor y en contra del cambio de género musical para el acompañamiento del trono del Nazareno del Paso, no se han hecho esperar. Circulan comentarios de todo tipo en redes sociales, además de un manifiesto redactado, al parecer, por un grupo de hermanos de la archicofradía que se está reenviando entre grupos de aplicaciones de mensajería instantánea y espacios digitales. En esta carta, que contiene 15 puntos, se defiende abiertamente la música sinfónica para el Nazareno frente a la «música de fanfarria», según señala el manifiesto para referirse a las cornetas y tambores. Termina la misiva haciendo un llamamiento a los archicofrades «para que participen en un deseable cabildo de hermanos donde se someta a votación tal cambio. Y a todos aquellos cofrades y malagueños que no estén de acuerdo con este pretendido cambio musical tras el trono el Nazareno del Paso, para que hagan una respetuosa protesta a la permanente y junta de gobierno de la Archicofradía por las redes sociales, internet, correo postal o cualquier otro medio. Este tema es de una trascendencia que supera con creces el ámbito de nuestra archicofradía por atentar contra la tradición y la forma de portar los tronos en Málaga».

A este respecto, este periódico se ha puesto en contacto con el hermano mayor de la Esperanza, Sergio Morales, para conocer su opinión acerca de la polémica que ha surgido. Sin embargo, Morales, que el próximo mes de julio cumplirá un año en el cargo, ha preferido no pronunciarse al respecto, aunque, preguntado por SUR, sí ha anunciado que el cabildo de hermanos se celebrará «en el mes de junio, posiblemente».

No obstante, desde la junta de la Esperanza se recuerda que formaciones de cornetas y tambores acompañaron al Nazareno en las décadas de los años 50, 60, 70 y 80. «Desde la llegada de la imagen de Mariano Benlliure a la ciudad de Málaga en 1940, han sido diferentes los acompañamientos musicales que han desfilado tras el trono del Señor. En este punto, cabe referenciar la constante presencia de bandas de cornetas y tambores (y timbales) tras el Nazareno durante la década de los años 50, 60, 70 e incluso 80. De esta forma, según consta en el archivo histórico, hasta 1984, formaciones de este género se situaban abriendo la sección de la Virgen y sirviendo como acompañamiento en el andar del trono del Señor», rememora la archicofradía en el comunicado difundido este jueves, y hace especial hincapié en que la banda de la corporación, «en su género musical, es plenamente idónea para afianzar esa impronta y estilo, desde luego irrenunciables, y mantener el sello incomparable que distingue al sobrio caminar del Nazareno del Paso».

Cierto es que el cambio de género musical para el Señor de Mariano Benlliure era un tema que llevaba encima de la mesa desde hace años y que trascendía, incluso, fuera de la propia corporación. En cambio, la hermandad no se ha atrevido a dar el paso hasta ahora. Y es que muchos cofrades no entendían que esta formación, considerada una de las mejores de Andalucía, estuviera relegada a abrir el cortejo, mientras que el Nazareno de Paso ha ido acompañado en las últimas décadas de una banda de música ajena a la hermandad, como ha ocurrido esta Semana Santa con la banda sinfónica Virgen de la Trinidad. Esta medida llevó, incluso, a la formación a abrir otros horizontes en el día procesional de la archicofradía, y, aunque firmó un contrato con la Hermandad de la Exaltación de Sevilla en septiembre de 2018, la lluvia y la pandemia solo han permitido que acompañe a la cofradía hispalense de Santa Catalina en 2022 y 2023, además de la salida extraordinaria del pasado Sábado Santo por la celebración del Santo Entierro Grande.

En todos estos años, la banda de cornetas y tambores de la Archicofradía de la Esperanza salía en la tarde del Jueves Santo en Sevilla y, tras la estación de penitencia, viajaba de inmediato a Málaga para incorporarse al cortejo de la Esperanza, en el frente de procesión, una vez alcanzada la torre sur de la Catedral, en el final del recorrido oficial.

Por su parte, la formación musical que acompañó este Jueves Santo al Nazareno del Paso, la sinfónica Virgen de la Trinidad, también ha hecho público un comunicado este viernes en sus canales oficiales en el que, conocida la decisión de la Archicofradía de la Esperanza, ha decidido «no dilatar más la espera ni la decisión que salga del cabildo de hermanos de la Pontificia y Real Archicofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno del Paso y María Santísima de la Esperanza, tal y como los responsables de la archicofradía nos pidieron en la misma noche de ayer para conocer la decisión que los hermanos tomarán sobre el acompañamiento musical del Dulce Nombre de Jesús Nazareno del Paso y, por lo tanto, el próximo Jueves Santo de 2024 tenemos disponibilidad para acompañar a cualquier hermandad que requiera de nuestros servicios», indica el comunicado, al tiempo que se lamente de que los responsables de la archicofradía no ha informado a la formación musical de la Cofradía del Cautivo «de manera adecuada», señalan desde la Sinfónica Virgen de la Trinidad.

Con todo, la polémica está servida, aunque el cabildo de hermanos tiene la última palabra.