Miércoles Santo con un histórico acto de liberación de El Rico
Jesús Nazareno devuelve la libertad a Manuel, Antonia y Jorge en una ceremonia celebrada por primera vez en la Catedral
Las varias veces centenarias bóvedas de la Catedral de Málaga fueron ayer mudos y privilegiados testigos de un hecho extraordinario e histórico: la liberación por ... Jesús El Rico de tres presos. Un hecho inédito en los 270 años de esta tradición y que permitió a Manuel, Antonia y Jorge recuperar la libertad en virtud del privilegio concedido a esta cofradía por el rey Carlos III en el siglo XVIII.
El acto solemne presidido por las imágenes de Jesús El Rico y la Virgen del Amor (que fueron trasladados de forma privada desde la iglesia de Santiago, a la conclusión de los actos celebrados por la mañana, hasta la Catedral, donde se situaron en sendas peanas en al altar mayor) estuvo cargado de emoción por la excepcionalidad de lo vivido en una atípica Semana Santa. El primer templo de la diócesis se une así a otros enclaves de la ciudad que han sido testigos, a lo largo de la historia, de la ceremonia de la liberación: la antigua prisión de mujeres –en la avenida de la Rosaleda–, la Aduana o la plaza del Obispo.
Revestidos con la túnica negra y el capillo del mismo color que ocultaba sus rostros recobraron la libertad Manuel C. L., de 24 años y condenado como autor de un delito de tráfico de drogas, a la pena de tres años y tres meses de prisión y cuya pena vencía en noviembre de este año; Antonia L. R., de 46 años y condenada como autora de un delito contra la salud pública a la pena de cuatro años de cárcel, que se extinguiría en 2023; y Jorge M. R., de 41 años y condenado como autor de un delito de robo con fuerza en casa habitada, a la pena de dos años y tres meses de prisión, que vencía en noviembre de 2021.
Dos de los penados estaban internos en el Centro de Inserción Social de la capital y otro en la cárcel de Archidona. Por ello, la directora del CIS, Ana María Villalón Montesinos, y su homóloga en la prisión archidonense, Noelia Moreno Rojas, dieron lectura a los mandamientos de libertad tras el indulto aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 23 de marzo.
Tras esta lectura y la firma de los documentos por parte de los penados, las autoridades presentes y el secretario general de la cofradía, Ricardo Ortega, con el visto bueno del hermano mayor, Antonio Martínez, tomaron la palabra la presidenta de la Audiencia Provincial, Lourdes García, el subdelegado del Gobierno en la provincia, Teófilo Ruiz, el secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Luis Ortiz González, y el obispo de la diócesis, Jesús Catalá, quienes incidieron en la «segunda oportunidad» que la vida da a los tres liberados, mientras que el prelado destacó que el gesto de perdón de El Rico es «una manifestación de la misericordia del Padre que nos reconcilia a todos».
Concluidos los parlamentos, el comisario provincial de la Policía Nacional, Javier Peña, tocó la campana para que la imagen de Jesús El Rico impartiera la bendición mientras sonaba el Himno Nacional interpretado por el organista de la Catedral, Antonio del Pino.
En el acto en la Catedral estuvo presente el consejero de la Presidencia de la Junta, Elías Bendodo, así como los consejeros de Empleo y Transformación Económica, Rocío Blanco y Rogelio Velasco, respectivamente. En las horas previas visitaron igualmente las sedes de la Cofradía del Rescate y de la Congregación de Mena.
SALESIANOS
Cruz de angelitos para un nuevo ángel del cielo
La hermandad salesiana de Málaga se caracteriza por cuidar especialmente la simbología y los detalles de la puesta en escena de sus cultos y de su salida procesional, un esmero que ha quedado de manifiesto en el altar instalado en el presbiterio del santuario de la calle Eduardo Domínguez Ávila, presidido por las imágenes delCristo de las Penas, la Virgen del Auxilio y San Juan Evangelista, escoltadas por los arbotantes del trono de María Auxiliadora.
Cientos de personas acudieron ayer a venerar las esculturas que realizara el imaginero sevillano Manuel Carmona, y también a visitar la pequeña exposición del patrimonio artístico de esta joven cofradía, habilitada en la casa hermandad, situada justo frente al santuario salesiano.
En la capilla de las imágenes, donde hoy ya se encuentran ubicadas para permitir la celebración de los santos oficios en el altar mayor, hasta ayer se situó la cruz guía de la cofradía, exornada con tres angelitos, uno de ellos bautizado desde hace años como 'Pablo' y que suele figurar en la trasera del trono portando algún elemento en alusión a un motivo especial. En el altar ha sujetado una corona de espinas. «Con este grupo de ángeles hemos querido recordar a los niños fallecidos durante el último año, pero en especial a Nicolás, un alumno del colegio de apenas ocho años que murió de forma repentina la semana pasada y que iba a hacer la comunión este año», explicó el hermano mayor de Salesianos, David Martín. Los cofrades de María Auxiliadora lo tuvieron muy presente en sus oraciones.
MEDIADORA
Un altar dedicado a la santa cruz y a los titulares
La Hermandad de la Virgen Mediadora ha hecho coincidir con esta inédita Semana Santa la celebración de su quinario, para lo que las imágenes han presidido un altar extraordinario en la parroquia de la Encarnación (Ave María). El culto está dedicado a la santa cruz, flanqueada por el Nazareno Redentor del Mundo y la Dolorosa, que ayer lució la nueva corona que se le impuso el pasado mes de diciembre, realizada por el orfebre sevillano Emilio Méndez con diseño de Salvador de los Reyes, hermano mayor de la hermandad.
Este altar, que ayer fue visitado por cientos de personas, especialmente por los vecinos del barrio de Las Delicias, va a tener esta Semana Santa una doble función. Hasta ayer ha sido el altar para el quinario dedicado a los titulares de la corporación cofrade de esta iglesia de la avenida de Sor Teresa Prat, y hoy, Jueves Santo, servirá como monumento para reservar al Santísimo tras la celebración de los oficios. Para ello, las imágenes ya estarán situadas en sus capillas, y un farol del trono de la Virgen se ha adaptado como tabernáculo en el que guardar la presencia de Jesús sacramentado para la hora santa.
SANGRE
Cajas rebosantes de devoción hacia los titulares
Esta Semana Santa sin procesiones está sirviendo para sacar a la luz costumbres desconocidas por muchos pero que ponen de relieve la devoción y el arraigo popular que suscitan muchas de las imágenes que recorren las calles de la ciudad cada primavera. Es el caso de los titulares de la Archicofradía de la Sangre, cuya junta de gobierno ha decidido desarrollar en su veneración en la parroquia de San Felipe Neri una iniciativa que hasta ahora quedaba limitada al ámbito de los 'submarinos' de ambos tronos, compuestos por los portadores que los llevan bajo la mesa. Se trata de recabar papeles con peticiones de personas que se colocan en unas pequeñas arcas de madera en los tronos y que, una vez que pasa la salida procesional, se queman para que siempre quede en secreto ese diálogo por escrito del devoto con el Cristo de la Sangre y la Virgen de Consolación y Lágrimas. «Pensamos que este año era una buena ocasión para ofrecer a las miles de personas que están pasando por la iglesia la posibilidad de que dejen sus rezos y peticiones ante las imágenes, y hemos colocado unas cajas de madera a sus pies para que puedan depositar los papelitos doblados», explica Laura Berrocal, hermana mayor de la Sangre. La iniciativa, especialmente promovida por el submarino de la Virgen, denominado 'La Naveta', ha tenido tal éxito que el restaurador y pintor Francisco Naranjo ha diseñado un arca de orfebrería en la que, en años venideros, se recopilarán todas las peticiones por escrito y que figurará en el frontal del trono de la Dolorosa.
Cientos de personas pasaron ayer por San Felipe para venerar a los titulares de la Archicofradía de la Sangre, que también vivió un momento muy especial con la inauguración y bendición de un nuevo retablo cerámico con la imagen de su Cristo para reemplazar al que se colocó frente a la fachada principal del templo en 2007. El párroco de San Felipe Neri, Alejandro Pérez Verdugo, bendijo el azulejo, realizado por Daniel García Romero. La orla que enmarca al Cristo está inspirada en su capilla en la desaparecida iglesia de la Merced, que también figura en una cartela inferior. Este retablo ha sido promovido por el grupo de portadores del submarino del Señor, denominado 'El Mercedario de San Felipe'.
FUSIONADAS
Cuatro imágenes unidas por la misma devoción
Los cofrades de las Fusionadas de San Juan llevan tres años sin salir en procesión. La lluvia lo impidió en 2019 y la pandemia, el año pasado y este. Pese a ello, mantienen la ilusión y la devoción intactas en las imágenes de Azotes y Columna, Cristo de la Exaltación, Cristo de Ánimas de Ciegos y Nuestra Señora del Mayor Dolor, que ayer fueron vistas por muchas personas que a lo largo de la mañana y de la tarde entraron a la parroquia de San Juan, donde en horario vespertino se celebró una misa a la que, entre otros cofrades, asistieron nazarenos y hombres de trono que deberían haber participado en el cortejo procesional de haber podido salido las imágenes a la calle. Fue un momento de reencuentro en el que, guardando las limitaciones de aforo y cumpliendo con las medidas de seguridad fijadas, se hizo hermandad entre los presentes.
El Cristo de la Exaltación y la Virgen del Mayor Dolor fueron expuestos en su altar, mientras que Ánimas de Ciegos y Azotes estuvieron en los suyos, adornados para la ocasión, donde recibieron la veneración de los fieles. Miembros de la banda cornetas y tambores de Fusionadas, vestidos de gala, escoltaron a las imágenes. El hermano mayor de la cofradía, José Manuel Álvarez Chaves, expresó su satisfacción por la gran respuesta dada por los malagueños a las imágenes. «Esperamos y deseamos que el próximo Miércoles Santo podemos salir en procesión». Los fusionados están de enhorabuena por la reciente inauguración de su casa hermandad.
EXPIRACIÓN
Misa, música y un emotivo reconocimiento a la Guardia Civil
La iglesia de San Pedro, en el barrio del Perchel, lució ayer sus mejores galas en el día en que tendrían que haber salido a la calle las queridas imágenes del Cristo de la Expiración y la Virgen de los Dolores Coronada. Fue esta una jornada de emociones para estos archicofrades, que organizaron un programa de actos donde se intercalaron los de carácter religioso, con los musicales y los reconocimientos a la Guardia Civil.
Desde primeras horas de la mañana, fueron numerosos los fieles que acudieron a la capilla para visitar y orar ante los sagrados titulares. A las doce se rezó el ángelus y el hermano mayor, Manuel Corcelles, entregó un recuerdo a Antonia y Josefa, madre y hermana respectivamente, del guardia civil Diego Díaz, fallecido hace tres años al ser arrastrado por el arroyo Galapagar a su paso por la localidad sevillana de Guillena cuando auxiliaba a una familia que viajaba en un vehículo. En este agente se personalizó el reconocimiento de la archicofradía a la Benemérita, de la que el Cristo de la Expiración es su Protector.
La fe se acercó a los más pequeños con un vía crucis infantil y la misa de nazarenos fue el preludio del concierto que ofreció la banda de música de la hermandad, mientras los fieles se seguían embelesando ante la soberbia talla del Cristo de la Expiración y la belleza de la Virgen de los Dolores en el altar de su capilla.
PALOMA
Un gran acto para rememorar la salida procesional
Tres años lleva la Cofradía de Jesús de la Puente y María Santísima de la Paloma sin poder procesionar. En 2019, la lluvia no lo permitió y en 2020 y 2021 la pandemia lo ha impedido. Para resarcirse de ello, los cofrades de la Paloma celebraron ayer un gran acto en una aforada plaza de San Francisco, a la que se accedió por invitación, con la intervención del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que pronunció, vía telemática, unas palabras en las que se refirió a la estrecha vinculación que el Ayuntamiento de la capital de España mantiene con la Cofradía de la Paloma y dijo que espera poder estar el próximo año en la procesión. Al evento acudieron el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y el presidente de la Agrupación de Cofradías, Pablo Atencia.
El programa elaborado por la hermandad comenzó con la celebración de una misa, a cuyo término empezó el acto de rememoración de la salida procesional, en el que la banda de cornetas, tambores y música de la Vera Cruz de Alhaurín el Grande (La Pepa) tuvo un destacado protagonismo. Así, dos chicas integrantes de la banda hicieron una ofrenda floral a los sagrados titulares y, seguidamente, se escuchó el toque de oración. A continuación, la banda tocó la marcha compuesta por Rafael Hernández a la Virgen de la Paloma. Por su parte, Pepe de Campillos cantó dos saetas al Señor de la Puente y a la Virgen de la Paloma. La banda de La Pepa interpretó varias marchas procesionales, a cuya conclusión hubo vivas a la Virgen de la Paloma.
Tras unas palabras pronunciadas por el hermano mayor de la Paloma, Diego Hermoso, y por el presidente de la Agrupación de Cofradías, habló el alcalde de Málaga, que en su intervención apeló a la responsabilidad individual y colectiva para impedir contagios del Covid. De la Torre pidió que se viva con prudencia lo que resta de Semana Mayor. El regidor terminó su alocución con vivas a Málaga, a la Virgen de la Paloma y a la Semana Santa de Málaga.
Uno de los momentos de mayor emoción se vivió al escucharse el himno nacional, cuando se procedió a la suelta de unas 30 palomas y hubo una petalada lanzada desde la torre de la capilla. Tras el himno, la banda de La Pepa volvió a interpretar la marcha dedicada a la Paloma.
A los asistentes se les tomó la temperatura y la Policía Local aforó la plaza de San Francisco. Aparte de la banda, hubo 93 personas sentadas. También se aforaron las calles que dan acceso a este recoleto enclave. A la finalización del acto se pidió a los asistentes que abandonaran la plaza evitando aglomeraciones.
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