José Luis Narbona gana las elecciones en la Hermandad de la Salud

Narbona, por tanto, sustituirá en el cargo a Miguel Ángel Vargas, que ha presidido el gobierno de la corporación durante un solo mandato en esta segunda etapa, si bien ya fue hermano mayor entre 2006 y 2013. Se da la circunstancia de que los dos candidatos que han optado a regir la cofradía pertenecieron a su junta de gobierno, el ganador, como secretario, y Rosales, como vocal de Liturgia.

Tras el rezo de una oración y la lectura del acta correspondiente, ha quedado constituida y abierta la mesa electora, que ha contado con la presencia del presidente de la Agrupación de Cofradías, José Carlos Garín. La casa hermandad ha permanecido abierta durante tres horas, de cinco a ocho de la tarde, para el desarrollo de los comicios y el escrutinio ha arrojado los siguientes datos: de los 264 votos emitidos, José Luis Narbona ha conseguido 164, mientras que Juan Francisco Rosales ha obtenido 96 papeletas de apoyo y, también se han contabilizado tres votos en blanco y uno nulo.

En consecuencia, el ganador de estas elecciones lo ha hecho con el respaldo del 62 por ciento de los votos emitidos.

La candidatura de Narbona estaba formada por Francisco Javier Pérez Ruiz, como primer teniente hermano mayor; Francisco Luis González Reyero, segundo teniente hermano mayor; María Nieves Agredano Atencia, tercer teniente hermano mayor; Mercedes Flores Pérez, secretaria; Antonio Elías Alonso López, tesorero; José Antonio Escot Cerezo, fiscal; Daniel Ruiz Navarro, albacea general; y Gema Aranda García, vocal de Enfermos y Obras Sociales.

El proyecto de José Luis Narbona se cimenta en cuatro pilares básicos: la formación, las obras sociales, el culto y la procesión.

En cuanto al tema patrimonial, para Narbona existen dos anhelos importantes «y un tercero heredado que debemos poco a poco terminar», aclara. Por un lado, la ampliación de la casa hermandad, «adquiriendo el terreno contiguo que nos permita en un futuro, seguir creciendo», señala.

El segundo anhelo es la realización de un nuevo trono procesional para la Virgen de la Salud, «aprovechando todo lo que hasta ahora le hemos ido aportado, siendo solo sustituido el basamento, a lo que llamamos el 'cajillo', teniendo en cuenta el proyecto inicial de nuestro fundador Francisco Puente que, por problemas económicos, no pudo ser desarrollado en su plenitud», recalca. La intención de la nueva junta de gobierno es que las andas procesionales estén culminadas «para el aniversario de la hermandad en 2029», anuncia. «También nos propondremos el poder terminar las bambalinas del palio de la Virgen en su cara interna y limpiar las bambalinas externas, que con el paso del tiempo han perdido su esplendor», afirma José Luis Narbona en su proyecto para los próximos cuatro años.

Finalmente, el nuevo hermano mayor informa que la hermandad ejecutará la imaginería completa del trono del Cristo de la Esperanza en su Gran Amor, y realizará un juego de ciriales para completar la sección del Crucificado de Luis Álvarez Duarte. Pero, además, en 2029, la corporación celebrará su 50.º aniversario fundacional. Es por ello que la hermandad va a constituir en breve una comisión «que estudiará concienzudamente la forma, el modo y orden de los distintos actos que queramos realizar para conmemorar tan señalada fecha, donde la formación, el culto y la caridad tengan su núcleo central», revela Narbona. Todos estos actos culminarán con una procesión de alabanza de la Virgen de la Salud.