Un paseo en el tiempo: Cultopía muestra Málaga a través de Torrijos
Ofrece una ruta histórica que va desde el obelisco del general en la plaza de la Merced hasta el Cementerio Inglés
claudia san martín
Lunes, 24 de agosto 2020, 00:21
Sirenas de bomberos y policía, helicópteros sobrevolando la plaza de la Merced, las campanas de la iglesia de Santiago Apóstol repicando sin cesar, una nube ... negra del incendio de unas viviendas en Lagunillas adornando el cielo tras la Casa Natal de Picasso. A Mar Rubio no se le presentó una tarde de verano ideal para la ruta histórica que había preparado desde el obelisco del general Torrijos hasta el Cementerio Inglés. A pesar de todo, su profesionalidad pudo con la contrariedad provocada por las circunstancias.
La gerente de la empresa 'Cultopía', dedicada a enseñar e instruir sobre Málaga a los malagueños desde la pasada crisis, espera puntual a su grupo de las 19.30 horas en la Merced con carpeta en mano. La reconocemos a pesar de la mascarilla y, segundos después, comienzan a acercarse aquellos que previamente reservaron su entrada para un tour que comienza a su hora. No saben lo que se encontrarán y aún así, con el terral amenazante en una tarde de agosto, asisten a la cita, lo que Rubio agradece sobre manera. La familia de Trini Sendra, entre el grupo, afirma que era la primera vez que asistían, pero lo hacían con mucha intriga para conocer más sobre Málaga. «Uno nunca conoce totalmente la ciudad en la que nace», lamenta Sendra mirando a su hija y marido, con quien acude a la actividad.
Tras un breve recuento de los asistentes, en su mayoría malagueños, Mar Rubio comienza indicando las medidas que hay que seguir durante el paseo, aunque ya la mayoría lo tiene asimilado, y seguidamente arranca una lección de historia del lugar de la cita de obligada escucha. No sólo por su interés, sino porque esta joven licenciada en Historia lo cuenta con pasión y sin titubeos, lo que hace que esta breve lección sea más amena que tediosa. «Vamos a hablar de nuestro general Torrijos y digo nuestro, aunque sea madrileño, porque lo tenemos enterrado aquí», apunta Rubio mostrando el obelisco de la Merced y un retrato entre su carpeta. La breve historia de por qué el liberal José María de Torrijos está en la céntrica plaza se explica en seis escasos minutos, aunque la cuestión tenga más trasfondo. Con la arraigada y firme creencia de instaurar una monarquía parlamentaria en España con la firma de la Constitución de Cádiz, además, de la dura defensa de territorios que iban a caer en manos de los franceses, Torrijos organiza diversos pronunciamientos militares que no tienen mucho éxito.
Cuando Fernando VII recupera su poder absoluto, Torrijos huye hasta Inglaterra, desde donde organizará un último levantamiento con la ayuda del irlandés Roberto Boyd, con quien será fusilado poco después. Pero bueno, no vamos a los spoilers que la cosa se pone interesante. Cuando deciden llevar a cabo este alzamiento ya en Gibraltar, llegan hasta Málaga engañados: «Los capturan en la zona de Alhaurín y los fusilan a todos en la playa de San Andrés, que ahora, más o menos, es donde está el edificio de Gerencia de Urbanismo», cuenta Rubio con los asistentes ya metidos en sus bolsillos.
El encanto del obelisco
Continúa esta lección con el porqué de las coronas de laurel que adornan el obelisco, 49 en total, coincidiendo con el número de fusilados aquel fatídico 11 de diciembre de 1831; que aunque el nombre de Boyd aparece en la placa, no está enterrado ahí, sino en el Cementerio Inglés o las tres veces que se ha abierto la cripta por razones mayores, a pesar de estar totalmente sellada. Rubio comienza un pequeño paseo alrededor del obelisco, desde donde parte el tour. Comenta también, a pesar de que le ruido de helicópteros por la zona dificultan la escucha atenta, por qué el monumento está levemente girado a partir del tercer bloque. Éste, construido en 1842 gracias a la aportación de los malagueños a través de una rifa que puso en marcha el Ayuntamiento del momento, esconde tantos secretos que no son muy difíciles de descifrar.
Como comentábamos, el fuerte terremoto que sacudió Málaga en 1884, con epicentro en Granada, giró sutilmente esta pieza y nunca se recolocó. Además, esta pequeña catástrofe coincidió con el nacimiento de Lola Ruiz Picasso, por lo que se le apodó 'la terremótica'.
Así es la historia, fascinante y hasta divertida. Nos dejamos mucho más en el tintero para que Mar Rubio lo explique in situ, que allí tiene más encanto. El recorrido llegó hasta el Cementerio Inglés, así que la próxima vez llevaremos algo para tomar nota.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión