Saldremos más tontos
CITA EN EL SUR ·
Los últimos datos confirman que de la pandemia saldremos un poco más tontos
De la pandemia íbamos a salir mejores, pero la gente sigue tirando toallitas al váter. Nuestras vidas son las toallitas que van a dar a ... la mar, que es el morir. El váter es un agujero que tenemos a mano, un agujero negro que se traga todo y entonces lo usamos y reusamos. A lo mejor dejan de vender toallitas porque la gente no sabe usar las toallitas. En mi calle pusieron semáforos en varios pasos de cebra porque los conductores no sabían usar los pasos de cebra. Con semáforos está todo más claro: cruza el primero que llegue y en caso de atropello se mira en qué color estaba el semáforo para repartir culpas. Nos hemos alejado del mar debido a la pandemia y el mar lo ha agradecido enviándonos tiburones peregrinos a nuestras playas. Buscaban plancton y se habrán atiborrado de toallitas. Ahora andarán en el fondo del mar, matarilerilerile, haciendo la digestión. Sobre el mar y su fauna y flora acaba de realizar un mensaje impactante el canal de televisión Nickelodeon: ha declarado que Bob Esponja es gay. He tragado mucha agua con Bob Esponja y nunca se me ocurrió plantearme la orientación sexual de un muñeco esponja en cuyas historias no hay además ningún tipo de relación de pareja. Un poco retorcido todo.
También tragué agua con los Teletubbies, es lo que conlleva tener hijos de diferentes edades, y sí me sorprendió la ausencia de belleza en los muñecos, pero nada más. Me gustó además que unos personajes tan horrorosos tuvieran éxito. Entonces el Gobierno polaco acusó a uno de los Teletubbies de homosexualidad y obligaron a retirarlos de la pura Polonia, pues los peques podrían cruzar de acera tras verse dos episodios de los Teletubbies. El creador de Bob Esponja es un biólogo marino y creador llamado Stephen Hillenburg que murió no hace mucho, y por lo visto solían preguntarle si Bob Esponja era homosexual. Stephen Hillenburg aseguró que no, que simplemente era asexual. Quizá fuera mentira y por eso se murió. En Uganda me hospedó hace años un amigo homosexual. En Uganda la homosexualidad está penada con la muerte. Uganda es nombre de chiringuito de feria donde sirven pollo frito en aceite que cuántas veces habrá sido recalentado. Viajé con mi amigo en coche al recién creado Sudán del Sur, que entonces se llamaba Sur Sudán y cuyos caminos de tierra estaban minados. Alguien debería prohibir los dibujos animados si no sabemos usarlos. La homosexualidad también, incluso la heterosexualidad, sobrevalorada. La solución será el confinamiento, pero sin levantar la tapa del váter. Parece que este mundo tiene sus caminos minados y a cada paso van estallando toallitas llenas de tontería.
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