El investigador de 'Gürtel' al juez: «No querían que apareciera Rajoy»

«No querían que apareciera en el cuerpo del informe su mención, ni aquello a lo que se aludía en los documentos», reveló Morocho al juez, según el audio de la declaración al que ha tenido acceso este periódico. «¿Por qué iba a usted a ponerlo?», le preguntó el magistrado, a lo que el testigo respondió que si estaban los donantes del PP «lo normal» era identificar también a los perceptores de «contraprestaciones», las personas «que indiciariamente aparecerían como beneficiarias de fondos de la caja B». En este punto, García Castellón preguntó si entonces estos nombres no llegaron al entonces juez del 'caso Gürtel' Pablo Ruz, a lo que este contestó que «le llegó en un anexo», pero no en el informe.

Preguntado por quiénes le «sugirieron» esta acción, Morocho citó a «toda la cadena de mando», que iba desde el comisario general de Policía Judicial, José García Losada, al que fuera jefe de la UDEF, Manuel Vázquez, y a sus superiores. «Las reuniones eran colectivas y se me compelía a que cambiara y quitara cuestiones», insistió Morocho.

Tras escuchar estas palabras, García Castellón le admitió sin ambages: «Me deja un panorama desolador», a lo que Morocho contestó que se lo podía «dejar peor todavía». En este fragmento el juez le agradeció su honestidad y le invitó a seguir declarando.

En otro momento de la comparecencia, Morocho señaló al comisario Andrés Gómez Gordo, quien fue jefe de seguridad de María Dolores de Cospedal (ambos están investigados en 'Kitchen', pieza separada del 'caso Villarejo'). Según el testigo, le nombraron jefe de seguimiento en la UDEF durante un tiempo y trató de «colocarle» un jefe de sección dentro de su grupo. «Yo no le quería. Recularon pero lo intentaron», afirmó.

También denunció el testigo durante su declaración que sus superiores mantuvieron oculto a Ruz durante un año un informe con contraprestaciones abonadas por el líder de 'Gürtel', Francisco Correa, al exalcalde de Pozuelo de Alarcón, Jesús Sepúlveda, exmarido de Ana Mato. «Consideraban que les podía perjudicar en sus expectativas ante un cambio de Gobierno», relató.

Esta importante declaración judicial tuvo este jueves la primera consecuencia. García Castellón citó como investigado al que fuera jefe de la UDEF hasta 2012, el comisario jubilado José Luis Olivera, por su presunta implicación en 'Kitchen'. Olivera, actual asesor de la Federación Española de Fútbol, comparecerá el 28 de junio, dentro de la batería de comparecencias dictadas esa semana, que incluye a Cospedal o a su marido Ignacio López del Hierro.

Dentro de estas «presiones paralelas» testificadas el martes por Morocho, el inspector también detalló una reunión con Olivera en una cafetería en Madrid en la que este le ofreció un puesto bien remunerado en la Embajada de España en Portugal para apartarle del caso. Esta cita se produjo en junio de 2013, en pleno escándalo por la fortuna oculta por Luis Bárcenas en Suiza y por la difusión de sus apuntes sobre la existencia de una caja B en el PP.

En esa reunión, Morocho relató al juez que Olivera recibió una supuesta llamada del exministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, para interesarse por su respuesta a la oferta para irse a Portugal con una sueldo de 10.000 euros mensuales («Hola ministro. Sí, estoy con él», reprodujo el testigo sobre la llamada a Olivera). Sin embargo, el abogado de Fernández Díaz, presente en la testifical, negó este extremo. El titular de Interior entre 2011 y 2016 está investigado también en 'Kitchen'.

En cualquier caso, un mes después se puso en marcha el dispositivo parapolicial de seguimiento a la familia Bárcenas para recuperar información sensible en su poder sobre dirigentes del PP. Un operativo «ilegal» que, según un informe de la Fiscalía conocido este jueves, logró su objetivo y «alguno o algunos de los mandos policiales implicados» tendría en su poder los documentos sustraídos.