Edmundo Bal: «La gente me para por la calle y me dice que Cs es un partido necesario»
«Las encuestas no valen para nada mientras que no haya convocadas unas elecciones», asegura que el partido naranja no va a desaparecer
El punto de encuentro es a las cinco de la tarde en una cafetería de la Colonia Santa Inés. Edmundo Bal (Huelva, 1967) llega ... puntual, acompañado de Guillermo Díaz y algunos asesores de prensa. Hubo un tiempo en el que los cargos nacionales de Ciudadanos (Cs) citaban para las entrevistas en conocidos hoteles de la capital, donde aguardaba una sala privada con los pertinentes refrigerios.
Bal acude a Málaga para reunirse con afiliados e incentivar a participar en la convención nacional que va a celebrar el partido los días 17 y 18 de julio. Antes, responde a las preguntas de SUR y confirma que es una persona de naturaleza optimista.
–¿Cuántas personas le han pedido una foto desde llegó esta mañana a Málaga?
–En Málaga, igual dos o tres personas. Un camarero, en el sitio que hemos estado antes, me ha reconocido como Edmundo Bal, el de Madrid.
–¿Le preocupa que solo hayan sido dos o tres? Al final, usted tiene alcance nacional.
–Todo lo contrario. Dos o tres ya me parecen muchísimos.
–¿La popularidad embriaga al político y nubla la toma de decisiones?
–Hay personas en la política que se dejan arrastrar por la popularidad. A mis amigos les he dado una instrucción tajante: si ven que me convierto en un tonto, que me lo digan inmediatamente.
–¿Fue lo que le pasó a Albert Rivera? Llegó a ser bastante popular.
–No lo creo. Albert era una persona que, en contra de lo que los medios decían de él, consultaba mucho a las personas.
–¿Sigue doliendo el fracaso electoral de Madrid? Usted fue la gran esperanza naranja.
–El resultado, como todo el mundo entenderá, no fue una alegría. Pero no soy una persona de mirar al pasado. La gente me para por la calle y me dice que hicimos una buena campaña, que Cs es un partido necesario. En breve se nos echará de menos.
–Se presentó como candidato a la Comunidad sin dejar el acta de diputado en el Congreso. ¿Fue por falta de confianza en salir elegido?
–Plantear que fue por falta de confianza es ridículo. Podría estar en la abogacía privada, ganando mucho dinero. Me han hecho muchas ofertas. Fue porque tengo vocación de servicio público. Soy abogado del Estado desde hace 28 años. Mi padre y mi abuelo ya fueron funcionarios.
–Después de dejar a Cs sin representación en la Asamblea, Inés Arrimadas le incluye en la ejecutiva nacional. ¿Nadie en el partido asume las responsabilidades de los malos resultados?
–¿Cómo ha sido la campaña en Madrid? Todo el mundo dice que hicimos una campaña muy buena. Inmejorable. Pedro Sánchez y Pablo Casado han obtenido los peores resultados de sus respectivos partidos. Me da la sensación de que a nuestro partido se le pide más responsabilidad electoral que a los demás.
–¿Ha leído ya 'Una temporada en política', el libro en el que Xavier Pericay recoge sus experiencias estando en Cs?
–No me lo he leído y no me lo pienso leer.
–Relata que las decisiones en Cs solo las tomaban, como mucho, tres personas, y que el resto de la ejecutiva iba solo para escuchar. ¿El partido tiene un problema de hiperliderazgo?
–Yo solo puedo hablar por lo que hay ahora y te digo que Inés Arrimadas es una persona que lo consulta y pregunta todo. Cualquier decisión se toma de manera colegiada.
–¿Por qué está en Málaga? ¿Viene para levantarle la moral a una militancia deprimida?
–Queremos incentivar a la gente a participar en la convención política que tenemos los días 17 y 18 de julio. Es importante porque va a determinar cuáles van a ser nuestros objetivos como partido liberal en un futuro.
–Guillermo Díaz ostenta puestos orgánicos a nivel nacional. Además, es el coordinador provincial de Cs. ¿Tanta acumulación de cargos no es perjudicial?
–Al revés. Nosotros tenemos como norma que un cargo local tenga que tener un puesto de elección. ¿Por qué? Porque eso le permite tener una determinada proyección. Y es importante que la caras públicas que representan a nuestro partido en los territorios la tengan.
–¿Cree que Juan Marín es un buen candidato para las próximas elecciones andaluzas?
–Yo creo que está en la posición ideal para ello, pero todo el mundo sabe que en nuestro partido se tendrán que hacer primarias.
–¿Edmundo Bal votaría a favor de Juan Marín?
–Ni siquiera sé quién se va a presentar en contra de Juan Marín. Prefiero no hacer conjeturas con hipótesis.
–¿Es reversible la tendencia a desaparecer en la que está Cs?
–La tendencia de Cs es crecer. ¿Cómo que a desaparecer? Nos queda mucho por delante.
–Las encuestas dan a su partido una media de tres o cuatro diputados, en el caso de unas elecciones generales.
–Las encuestas son una foto fija. No valen para nada mientras que no haya convocadas unas elecciones. Percibo una ola de simpatía absoluta por Cs. Ni el PP ni el PSOE pueden ocupar el espacio del centro. Nadie ha criticado jamás a Cs por algo que haya hecho estando dentro de una institución.
–En el Ayuntamiento de Málaga, su candidato a la alcaldía se fue del partido y dejó a Cs con un único concejal.
–En todas las organizaciones te encuentras con personas que dicen que son de tu organización, pero en realidad no lo son. Están por su propio interés personal y, cuando ese interés personal les mueve a hacer otra cosa, pues hacen otra cosa.
–Cassá no ha sido el único cargo que ha dejado el partido. ¿No se debería hacer autocrítica?
–Cada día está pasando menos. Los que nos hemos quedado somos los que de verdad tenemos ganas de seguir adelante.
–¿Por qué Cs no se muestra más beligerante con el PP, pese a que desde Génova se siguen captando cargos de su partido a través del antiguo secretario de Organización, Fran Hervías?
–Cada partido se retrata en relación a cuáles son sus actitudes. El PP está perfectamente retratado de cara a la ciudadanía. No nos olvidemos de que el PP acaba de abandonar el pacto antitransfugismo. Es decir, uno de los partidos que ha gobernado a España acaba de decir que el transfugismo está bien.
–¿Dónde sitúa en el espectro ideológico derecha e izquierda a Ciudadanos y dónde le gustaría que estuviera?
–Estamos donde quiero que estemos, que es en el liberalismo. El liberalismo es algo que se explica fenomenal en Europa.
–Si pone como ejemplo a los partidos liberales de Europa, ¿significa que Cs ha abandonado la idea de ser un partido de mayorías?
–Tenemos muy claro que Cs tiene que ser un partido decisivo en la formación de gobiernos. Eso es lo que importa.
–Sobre los indultos a los independentistas catalanes, ¿los partidos deben judicializar las decisiones políticas?
–Cuando el Gobierno decide incumplir los requisitos que establece la Constitución para conceder los indultos, no es una opción, es una obligación por parte de los partidos políticos de la sociedad civil.
–¿Puede descartar una moción de censura en Mijas?
–En Mijas, nuestro criterio es dar estabilidad y cumplir con los acuerdos que hemos firmado. Como hacemos en todas las instituciones en las que estamos. Si la otra parte incumple lo firmado, pues toca arreglarlo. No es el caso de Mijas.
–¿Qué partido votó antes de formar parte de Cs?
–A UPyD.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión