El abogado Marco Arafat encabezará la candidatura de Podemos a la Alcaldía de Marbella

El mecanismo designado por Podemos para la elección del candidato dentro de su proceso de primarias mediante votaciones, a las que estaban llamados a participar los inscritos desde hoy, jueves 28 de febrero, hasta el próximo domingo 3 de marzo, se ha cambiado por una asamblea para la ratificación o no, de la única opción tras la retirada de Gil. Al cierre de esta edición, la fecha, el lugar y la hora de la misma debían concretarse aún, pero parece probable que se pueda celebrar a última hora del domingo. «La convocatoria de una asamblea de ratificación está reglamentada para cuando se dan escenarios de una sola candidatura, ya que no tiene sentido votar con una opción solamente», explicaron al respecto desde Podemos.

Desde la candidatura de Arafat, que es uno de los fundadores de Podemos en Marbella, se defiende un nuevo cambio para la ciudad a través de acciones políticas que conecten con demandas locales. Por ello, se fijan un doble objetivo. «Primero, recuperar el Ayuntamiento, apoyando la formación de un gobierno de izquierdas, para hacer políticas sociales para la gente. Segundo, transformar Marbella en un municipio más integrador e inclusivo, una Marbella para todas las personas, no sólo para los ricos, sino también para las mujeres, los trabajadores, los desempleados, los migrantes, las personas con discapacidad, las personas en riesgo de exclusión social y las minorías».

La actual secretaria general, con quien precisamente Arafat se disputó el cargo el pasado año, afirmó a SUR que la decisión de no participar en estas primarias la tomó en consenso, junto al equipo con el que ha estado trabajando estos últimos cuatro años y tras descartarse la posibilidad de una candidatura única.

Mendiola alude a la presencia en la lista de Arafat de cinco integrantes que han sido denunciados ante los órganos de garantía democrática de Podemos, y también a la falta de conocimiento sobre el resto. «Son personas que en su mayoría no conocemos en absoluto o que no han participado durante estos cuatro años, incluido el propio candidato», zanjó la secretaria general, cargo con una vigencia de 18 meses que expira a finales de año. Este periódico trató de contactar sin éxito con el candidato.