El Málaga recuerda sus antiguas sanciones y critica la decisión del CSD con el Barcelona
El club de Martiricos analiza en un comunicado sus problemas con las inscripciones de jugadores en años atrás y asegura que lo ocurrido con Dani Olmo y Pau Víctor «pone en serio peligro la integridad de la competición»
El fútbol español clama contra la decisión del Consejo Superior de Deportes (CSD) por permitirle al Barcelona inscribir a Dani Olmo y Pau Víctor, en ... contra de lo acordado por LaLiga y la propia Federación al no adaptarse el club azulgrana a la normativa existente en relación al control económico de los equipos. Pero en el caso del Málaga las razones para quejarse tienen mucho más peso debido a que tuvo que soportar duras sanciones por esto mismo en años pasados. No pudo utilizar a jugadores y también compitió dos temporadas con las fichas restringidas a dieciocho jugadores, y todos los fichajes sólo podían percibir el salario mínimo de Segunda. De ahí que ahora se pronuncie con más argumentos, recordando su pasado y criticando lo anunciado por el CSD en relación a la entidad azulgrana.
En un comunicado hecho público la tarde de este viernes, pretende dejar claro el agravio que se pone de manifiesto. La opinión del Málaga, en cualquier caso, es la misma de casi todos los clubes españoles, que tienen que cumplir al detalle la normativa sobre el control económico, algo que todos ellos pusieron en marcha como única medida para evitar la ruinosa situación del fútbol hace ya algunos años. En este sentido, desde la entidad de Martiricos destacan los precedentes sufridos con las inscripciones de jugadores y asegura en el escrito que lo ocurrido con los dos barcelonistas «pone en serio peligro la integridad de la competición».
Este es el comunicado completo publicado por el Málaga este viernes:
«El Málaga CF quiere expresar su perplejidad ante la resolución adoptada por el Consejo Superior de Deportes en los casos de Pau Víctor y Dani Olmo, jugadores del FC Barcelona.
En el curso 19-20, el Málaga CF asumió la imposibilidad de inscribir a varios futbolistas por exceder el límite salarial. Las normas son claras, la entidad falló y cumplió.
Las medidas correctoras no quedaron ahí, el Málaga también fue obligado a competir con un máximo de dieciocho fichas profesionales durante dos temporadas y forzando un ERE deportivo que ya es historia de nuestro país, suponiendo un perjuicio económico y deportivo grave para el club. Cabe recordar que la entidad se encontraba en una situación financiera límite, obligada a una restructuración profunda y con un serio peligro de desaparición.
Solo un esfuerzo titánico de su estructura y el apoyo incondicional -una vez más- del malaguismo mantuvieron a flote al Málaga CF en uno de los capítulos más difíciles de su historia reciente.
Por todo esto, no es comprensible la inscripción de dos jugadores habiéndose incurrido una situación similar. Este antecedente pone en serio peligro la integridad de la competición. La rigurosidad de la norma debe ser equitativa para todos los participantes.
LaLiga y la RFEF han mantenido una postura común, al igual que en el 2019, pero esta posición del CSD desautoriza a los organismos regidores al no tener en cuenta sus argumentos. Este contexto cuestiona el Control Económico -protegido por la Ley del deporte y con gran prestigio internacional- que es garante de la sostenibilidad de nuestro fútbol«.
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