Asoma ya la Liga y la temporada empieza a tomar forma. Venimos de una intensa semana de partidos preparatorios, que han ido desde Los Ángeles ... a Jerez, y muchos equipos siguen incompletos. Casi todos siguen buscando, por lo que pueda caer, ese mirlo blanco que les pueda cerrar la plantilla. Y eso, lamentando cada cual sus penurias económicas, límites salariales y demás. Al Barcelona, por ejemplo, le salen futbolistas por las orejas (supera la treintena) y aun así sigue tratando de incluir otros. He aquí un club que al acabar la pasada temporada estaba en bancarrota y ahorra roza los doscientos millones en fichajes. Y suma y sigue. El Madrid, por el contrario, necesita un 'doble' para Benzema y parece empeñado en no hacerlo. Uno y otro equipo ya han dirimido sus cuentas de partida en América y los azulgrana salen con ventaja y con la moral por las nubes. En un par de días, los madridistas tendrán la ocasión de bajarles los humos con ese encuentro de Supercopa de Europa. Que, sin duda, es una dura prueba para Ancelotti y los suyos. Al margen de los dos colosos, los demás equipos se mueven en situaciones similares. Incluso el Málaga, que saca fuerzas (económicas) de donde no las hay.
Ese problema por exceso que agobia al club catalán me ha llevado a pensar en algún momento de relax en ese proceso tan peculiar en Estados Unidos de exponer, en el jardín de casa, aquellos muebles y trastos que no le valen y que pueden interesar a otros; es cuestión de imaginar una serie de futbolistas alineados con sus cartelones de precio y condiciones. Una broma, sí, pero es lo que parece.
En el caso de nuestro Málaga no es que sobren jugadores, pero sí que me gustaría verlos ya juntos en lo que podría tomarse como equipo para iniciar la Liga. Que el Burgos ya asoma por ahí. La temporada se presenta difícil, los equipos descendidos de Primera llegarán con vitola de favoritos. Y en ese grupo tiene que integrarse el Málaga desde el principio.
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