José Alberto: «El nivel de la plantilla del Málaga es mucho más alto que el año pasado»

-¿Qué tal se encuentra?

-Ahora mismo estoy centrado en estar al día de la categoría. Veo todos los partidos e intento estar en la mayoría de los estadios para tener una referencia directa de equipos y jugadores. Ya he visto a 12 equipos 'in situ'. Es donde queremos trabajar y la tenemos que conocer al dedillo. He tenido varias opciones este verano, pero al final no se han dado. Estoy aprovechando el primer momento de parón en toda mi vida profesional. Nunca me he encontrado en esta situación de no comenzar una temporada. Es tiempo para prepararse lo mejor posible para cuando llegue una nueva oportunidad.

-Es un paro relativo.

-Puedo asegurar que casi trabajamos más que ahora que estando en activo. Es otro tipo de trabajo centrarse en tu equipo y un día a día diferente, pero ahora también echamos muchas horas.

-¿Cómo está viendo al Málaga?

-Lo primero es que me ha sorprendido la capacidad que ha tenido el club para hacer una plantilla de muchísima calidad. Es un regalo para cualquier entrenador aglutinar la cantidad de talento que tiene este año. Pero hemos visto en estas dos primeras jornadas la importancia de crear un bloque, porque es lo que triunfa. Claros ejemplos de ello son el Alavés, Granada o Ponferradina, que son competitivos y compactos.

-¿Ve a esta plantilla del Málaga para luchar por el ascenso?

-Totalmente. El resultado contra Las Palmas fue duro y difícil de encajar, pero sólo van dos jornadas. El Málaga ha hecho un 'draft', una selección de Segunda. Ha realizado un equipo como lo hizo el Eibar la pasada temporada. Una inversión económica muy grande y de mucha calidad. Es normal que los jugadores digan que el objetivo es el ascenso, porque creo que todos los que han llegado este verano lo hacen para ello. Las expectativas de este año sí van acorde a la realidad. El nivel de la plantilla es mucho más alto con respecto al año pasado.

-Es uno de los más indicados para valorar el cambio en el club del verano pasado a este.

-El año pasado el presupuesto era de los más pequeños de la categoría y se planteó una situación de permanencia en el club. Creo que el nivel de la plantilla era para estar en una zona cómoda, como en la que estábamos. Pensaba que con trabajo y el crecimiento de jugadores jóvenes podíamos tener opciones de luchar por los 'play off' hasta el final, pero luego todo el mundo sabe lo que pasó. Todo saltó por los aires con aquel 0-5 contra el Ibiza. Pero un resultado no puede poner en duda el nivel de una plantilla.

-¿Le ha recordado el 0-4 ante Las Palmas al 0-5 frente al Ibiza?

-Son partidos que no tienen nada que ver. Aunque el resultado es muy similar y es duro. Pero recuerdo que contra el Ibiza tuvimos muy pocos jugadores disponibles y aún así el equipo hizo 60 minutos buenos. He visto ese partido infinidad de veces, imagínate. Y el problema llega a partir de encajar el 0-2, que es inexplicable. El lunes Las Palmas se encontró cómodo en La Rosaleda y jugó como bloque. Marcó la diferencia desde el minuto uno. El Málaga pasó del centro del campo en el minuto 12. Jugó muy largo, con demasiado espacio entre líneas.

-Tiene mucho trabajo Guede... No se entiende que jugadores de calidad hagan partidos tan malos...

-Todos los entrenadores necesitamos tiempo y al final es una plantilla nueva con doce fichajes. El técnico maneja diferentes sistemas, hay muchos cambios de estructuras y conceptos y eso requiere mucho tiempo, que lógicamente es lo que no se tiene con la Liga ya empezada. Además, creo que este año ha subido el nivel medio de los equipos de la categoría. Lo que debe de hacer el Málaga es crecer en materia defensiva y ser un bloque sólido, porque a partir de ahí logrará buenos resultados porque tiene mucho talento individual.

-¿Qué le parece la idea futbolística de Guede?

-Cada 'maestrillo' tiene su librillo. Han hecho el equipo a su medida con dos jugadores por posición. Los cambios que se hicieron el lunes ya habla del nivel del equipo. Creo que necesita tiempo para cuajar su idea, pero estoy seguro que va a poder sacarle rendimiento a toda la calidad que esa plantilla tiene.

-Vamos a recordar su paso por el Málaga, ¿era consciente que perder por 0-5 contra el Ibiza en casa le iba a costar el puesto?

-Cuando uno está en un club como el Málaga y pierde por 0-5 sabe que eso puede pasar, pero en ningún momento pensé que nos íbamos a ir. Creíamos mucho en el equipo y que los fichajes de Vadillo y Febas nos elevaban el nivel. Hablamos con Manolo Gaspar para ver la posibilidad de incorporar a algún jugador más. Pienso que la dirección deportiva creía en nuestro trabajo, pero al final un resultado como aquel puede llevar a una decisión drástica como la que se tomó.

-¿Recibió alguna explicación?

-Ninguna. Hay que respetar las decisiones que se toman desde el administrador judicial o la dirección deportiva, y entenderla porque no hay mucho más. Yo entiendo que la única explicación es perder por 0-5.

-¿Cómo quedó su relación con Manolo Gaspar?

-Bien. Volvimos a hablar en una ocasión después de mi salida. Pero tengo pensado ir a Málaga próximamente y quizás quedaré para vernos y charlar sobre fútbol. Somos profesionales y adultos. Entendemos que estas cosas pueden pasar y esta decisión no altera lo que opino de él como profesional y como persona.

-¿Le ha dado muchas vueltas a lo que podría haber sido de haber continuado?

-Me da pena el no haber podido tener el Málaga de esta temporada. Hay un cambio brutal en cuanto a inversión. Da rabia porque sabes el potencial que pueden alcanzar, pero yo cuando llegué hablamos con jugadores que en el momento de presentarle la oferta económica nos la rechazaban. No teníamos posibilidad de competir con otros equipos. En cambio, este año mira qué jugadores han llegado y qué pronto lo han hecho para poder trabajar en pretemporada. Al contrario que el verano pasado, que tuvimos que esperar hasta el final para cerrar la plantilla. Yo creo que llegué algo antes de tiempo al club, pero son situaciones que uno no controla y cuando te llama un equipo así no puedes decir que no porque son históricos y con los que se sueña entrenar. Cuando el Málaga me llamó no pensé en estudiar ninguna otra posibilidad.

-¿Qué es lo que más le enorgullece del paso por el Málaga?

-Estoy orgulloso de haber sido un trabajador honesto e incansable. Pusimos todo lo que estuvo en nuestra mano para que las cosas funcionasen. Apostamos por gente joven y lo volvería hacer. Me pone muy contento ver marcar goles a Roberto con el Barcelona B y el buen inicio de temporada de Kevin en el Gil Vicente. Son cosas que me enorgullecen.

-¿Y qué cambiaría de la gestión del último mes antes des alir?

-Hubo unas expectativas de jugar los 'play off'. Está claro que como club y ciudad se intuye como tal, pero es que las posibilidades y la inversión eran de las más bajas de la Liga. Las circunstancias eran muy diferentes a las de este año. Sobre lo que sucedió, creo que el hecho de no ganar antes fuera nos pasó factura. Dependimos de ganar siempre como locales, y en el momento en el que se acabó esa racha impresionante fue mal. Pero tuvimos fiesta cada 15 días en La Rosaleda. La gente disfrutaba y los jugadores estaban deseando jugar en casa. Al equipo no le tengo ningún reproche.

-Su salida no arregló mucho la situación. ¿Cómo vivió los me es posteriores?

-Me mantuve alejado porque lo pasé mal. Cuando estamos trabajando los entrenadores parece que tenemos un caparazón que nos hacer aparentar hombres indestructibles y súper fuertes, pero cuando no te esperas dejar de trabajar y dar un paso al lado es duro. Me fui de un proyecto ilusionante y lo pasé mal. Pensaba que estábamos llevando a cabo las cosas que se nos plantearon en verano. Teníamos un modelo de apostar por gente joven y hacer crecer a estos jugadores, y la muestra es la oferta que llega por Kevin de dos millones en invierno. Luego también teníamos al equipo en una zona cómoda. La peor posición con nosotros es cuando nos echan. Estábamos decimocuartos y a seis puntos de los 'play-off' y con ocho puntos de ventaja sobre el descenso. No fue un despido por el riesgo de que el equipo se cayera, más bien fue por un resultado catastrófico. Me tuve que alejar un poco para recuperarme.

-¿Volvería al Málaga?

-Es un sitio espectacular para trabajar y vivir. Es un club que lo tiene casi todo. Buenos profesionales, buena estructura y unas instalaciones que serán magníficas con la nueva ciudad deportiva. Tiene unas posibilidades de crecimiento brutales y volver a donde tiene que estar, que es en Primera. Yo quiero trabajar en los mejores equipos y por eso aposté por el Málaga. Me encantaría regresar, pero creo que debe pasar tiempo aún para eso.