El administrador recibe a varios intermediarios de grupos interesados en comprar el Málaga
José María Muñoz ha mantenido ya hasta tres encuentros en La Rosaleda y en ellos ha transmitido que el club trabaja en la buena dirección
Es un secreto a voces que el Málaga es cada vez más apetecible para grupos o personas que pretenden invertir en el negocio del ... fútbol. Algo que crece al mismo ritmo que son capaces de mostrar estabilidad en el seno de la entidad. Muchos de ellos coinciden en que es una de las mejores oportunidades del fútbol español ahora mismo y lo catalogan, de forma coloquial, como un 'caramelo'.
Por eso son muchos ya, sobre todo a través de intermediarios, los que se han interesado por la situación de la entidad y las posibles vías para aspirar a hacerse con el club. Algunos de ellos se sorprenden aún al conocer que ahora mismo no se puede vender el Málaga o que es, al menos, una opción muy complicada por varios motivos. Dejando a un lado que el máximo accionista, Abdullah Al-Thani, tampoco nunca ha dado ninguna señal de querer deshacerse de sus títulos, el escollo fundamental es que no puede hacer una venta oficial hasta que no se cierren todos los litigios (ahora está prohibido por el juzgado).
La presencia de BlueBay
Y luego entra en escena otro protagonista importante: la cadena hotelera BlueBay, que cuenta con una sentencia cautelar favorable en el juicio contra Al-Thani, que ya lleva un recorrido de seis años, donde pasa a tener parte del poder accionarial de la empresa NAS Spain 2000, que cuenta con el 97,7% del total. Es una situación que el propio administrador judicial, José María Muñoz, ha transmitido desde febrero personalmente a varios intermediarios que se han pasado por las oficinas del estadio La Rosaleda para presentarse como posibles compradores. El actual responsable del club ha aclarado él, como profesional que cumple órdenes en última instancia desde el Juzgado de Instrucción número 14, no tiene potestad alguna para conducir a nadie a la adquisición de la entidad.
Por lo tanto, la única función de Muñoz ha sido recibir cordialmente a los interesados que se dirigieron a la administración del club e informar de la dinámica de trabajo actual. Siempre sin profundizar demasiado, pero transmitiendo la idea de que se está trabajando en la buena dirección para asegurar la continuidad y estabilidad del club. Y que está supervisado por LaLiga, el principal agente regulador, además de lo que se derive desde el juzgado y las diferentes investigaciones policiales.
Medidas de austeridad
Según pudo conocer SUR, este tipo de encuentros se han producido ya en tres ocasiones con intermediarios diferentes de grupos o personas dispuestos a pujar por el club. La estimación es que más de una decena han mostrado también interés de alguna u otra forma. En cualquiera de los casos, siempre ha orientado de forma simple a los potenciales inversores a dirigirse a las partes de la propiedad; es decir, el jeque Al-Thani y BlueBay. Sin más. Sobre la mesa de reuniones, el administrador, que recibe también constantemente a diferentes agentes del entorno del club en las oficinas para intentar acercarse lo máximo posible al acierto en sus decisiones, suele exponer en estos encuentros, por lo normal muy breves, las medidas de austeridad ya tomadas en los últimos seis meses.
Entre ellas figura el ERE que ha reestructurado la empresa en cuatro principales áreas de trabajo y que ha supuesto el despido de hasta 36 empleados. También que han puesto al club con el contador a cero en casi todas las facetas, poniéndose al día con todos los proveedores y reorganizando esas partidas desde el principio. Asimismo, les ha insistido en que el club no tiene deuda como tal, que ya se ha cerrado el presupuesto para la temporada que viene y que las estrecheces llegan de la necesidad de ajustarse al control económico de LaLiga, que 'grosso modo', sirve para anticiparse a una situación económica irreversible.
Todo ello despierta aún más los atractivos para futuros inversores, muy atentos a los próximos acontecimientos judiciales (el próximo martes, Al-Thani tendrá que responder para pagar o designar bienes a una fianza de 5,4 millones y se arriesga a un posible embargo de acciones) o también a que se pueda realizar una ampliación de capital, algo que aún se ve muy lejano ya que de momento no existe fecha para la junta general de accionistas, que ya se debería de haber celebrado, como anhelan desde la Asociación de Pequeños Accionistas.
La continuidad de Muñoz otros seis meses, una decisión que no parece albergar dudas
S. CORTÉS / El pasado 19 de febrero SUR adelantaba la identidad de la persona que tenía todas las papeletas para hacerse cargo de la administración judicial del club: «La Fiscalía propuso ayer al abogado y economista José María Muñoz como administrador judicial del Málaga en el caso de que la jueza decida intervenir definitivamente el club de Martiricos. La petición realizada en la 'vistilla' celebrada en el juzgado de instrucción número 14 no contó con ninguna oposición». Dos días más tarde, a primera hora de la mañana, Muñoz aceptaba la propuesta de la magistrada titular del Juzgado de Instrucción número 14, María de los Ángeles Ruiz González. Y a renglón seguido se dirigió al estadio La Rosaleda, donde llegó con parte de su equipo de trabajo, y tomó la primera decisión: la destitución de Richard Shaheen como director general.
El nombramiento de la jueza tenía una vigencia de seis meses prorrogable a otros seis. Es decir, esta próxima semana se cumple el mandato de Muñoz como administrador judicial. Y aunque todavía no se conoce el pronunciamiento de la magistrada no parece albergar dudas la continuidad del economista y abogado malagueño. Precisamente en estos momentos el club se encuentra en uno de los momentos más cruciales de su historia con la actual denominación debido a que la situación económica es muy delicada y el regidor de la entidad tiene en marcha diversas medidas para tratar de equilibrar las cuentas a muy corto plazo.
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