Las claves del Estatuto Marco que no gusta a nadie: lo que plantea el Ministerio y lo que reclaman los médicos y otros sanitarios
Los sindicatos se concentran en Málaga y acusan al Gobierno de no querer seguir negociando y 5.700 facultativos de la provincia irán a la huelga el 3 de octubre
¿Qué es el Estatuto Marco cuya negociación ha motivado ya 50 reuniones entre el Ministerio de Sanidad, los sindicatos que representan a médicos, personal ... de enfermería y al resto de sanitarios y las comunidades? La Ley 55/2003 del Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios de salud es la norma que regula las condiciones de trabajo de todos los sanitarios del país, pero como explica el Gobierno central, es una regulación «obsoleta que lleva sin modificarse en profundidad 22 años». Había que hacer uno nuevo y manos a la obra se puso el Ministerio de Sanidad a principios de 2023, pero casi tres años después la tarea se revela hercúlea y las negociaciones han encallado en numerosas ocasiones.
Sin ir más lejos, UGT, SATSE, CCOO y CSIF se concentraron ayer a las puertas del Hospital Regional Universitario de Málaga (y en todo el país) para reclamar al Ministerio de Sanidad que no cierre las negociaciones, dado que la idea era enviar ya al Congreso de los Diputados el borrador. Además, en esta ecuación hay que mencionar a los médicos, cuyos representantes quieren un Estatuto Médico aparte ya que, según defienden, las implicaciones de su trabajo y su formación son muy distintas al resto de profesionales. Para liar aún más la madeja, son las comunidades autónomas las que gestionan la sanidad y las que, por tanto, «desarrollan la normativa básica en materia de retribuciones, por ejemplo, estableciendo las cuantías de los complementos o el precio de la guardia», y con estas, según el Ejecutivo, también se ha negociado. De las casi 50 reuniones que Sanidad ha tenido con los diferentes actores en liza, 36 han sido con los sindicatos y 13 con las autonomías.
Enfrentamiento a tres bandas
Los médicos fueron a la huelga nacional el 13 de junio y volverán a hacerla el 3 de octubre. En Málaga, un millar de facultativos cortó el tráfico en la Avenida Carlos Haya. El Ministerio de Sanidad, ante este panorama, emplazó ayer a los sindicatos a un nuevo encuentro en el Foro Marco del Diálogo Social y recordó que las condiciones laborales como las retribuciones o la organización de turnos, jornadas o guardias son competencia de cada comunidad autónoma, por lo que se les ha dado voz en el asunto y analizan ahora el texto, lo que, a su vez, parece haber sublevado a los sindicatos, que quieren seguir hablando. En una nota de prensa enviada ayer, acusaban al Ministerio de «romper, de manera unilateral, el calendario pactado».
¿Cuáles son las posturas de Gobierno, los sindicatos médicos y los que representan a otros colectivos sanitarios? El Gobierno se niega a «fragmentar un sistema» con un Estatuto Marco para cada una de las profesiones y proponen uno común, lo que ya ha enfadado a los facultativos. Aunque las medidas propuestas son muchas, se pueden reducir a tres grandes grupos: reclasificación profesional, jornadas de trabajo y de guardia y retribuciones, además de jubilación y compatibilidad, fundamentalmente.
Los médicos quieren un Estatuto Marco propio y piden medidas relacionadas con la compatibilidad y las jornadas ordinarias y de guardia, mientras que los sindicatos exigen que se establezcan las 35 horas semanales y que se contemple la retribución de una nueva reclasificación profesional
En cuanto a la clasificación profesional, incorpora la revolución universitaria que supuso Bolonia, convirtiendo las diplomaturas en grados. El grupo 8, el de mayor categoría, está conformado por médicos, farmacéuticos, biólogos, químicos, psicólogos, físicos e investigadores especialistas. Asimismo, el borrador enumera y define los componentes de las retribuciones del personal, pero no especifica las cuantías porque ello depende de las comunidades; se establece la imposibilidad de que el personal intermedio y los directivos trabajen en la privada, así como ocurre con los médicos residentes durante un lustro, se incluye la posibilidad de una movilidad por razón del servicio a otros centros por tiempo limitado y debido a causas excepcionales y se establece una jornada ordinaria, que es aquella que se realiza entre las 7.00 y las 22.00 horas (cuya duración exacta depende de las comunidades), que no será mayor a 12 horas, aunque bajo ciertas condiciones podría irse a las 24. Además, la jornada de guardia no podrá superar las 17 horas en días laborables, salvo situaciones excepcionales que permitan llegar a las 24 horas.
Las excepciones y las retribuciones
El problema, claro, son las excepciones a la norma y el hecho de que no se pongan cifras a las retribuciones, que son competencia regional.
¿Qué piden los médicos? El Sindicato Médico de Málaga (SMM) critica que se iguale a los facultativos, que han cursado 360 créditos universitarios y necesitan más de una década de formación, con los 240 de otras profesiones; recuerda que en el borrador las horas de guardia no se consideran como extraordinarias y su valor está por debajo de la jornada ordinaria, rechazan las compatibilidades propuestas, piden un régimen nacional y exigen que los facultativos puedan elegir libremente su destino, así como que se elimine el artículo que permite que sean destinados a centros ajenos al previsto en su nombramiento.
Una de las debilidades del texto es que son las autonomías las que han de definir las retribuciones que se mencionan en el borrador del Estatuto Marco, un escenario nebuloso que no gusta a los sindicatos, es decir, la norma requerirá luego de desarrollos normativos regionales que podrían alterar lo negociado
Pero hay más: rechazan que desaparezca la productividad, piden que se abonen las guardias nocturnas, consideran inviable sumar la jornada ordinaria y de guardia de forma sucesiva, sin que exceda de las 17 horas. Además, exigen que se regule la jubilación flexible, la voluntaria, entre los 60 y los 70 años, la parcial y la jubilación anticipada, teniendo en cuenta el coeficiente reductor oportuno; así como que se computen las horas de guardia para la jubilación. Y, sobre todo, quieren un estatuto propio y un sistema de clasificación profesional que reconozca los años.
Reclamaciones sindicales
UGT señala la necesidad de contemplar el reconocimiento retributivo que corresponde a la clasificación profesional propuesta, acceder a la jubilación voluntaria, ya sea anticipada o parcial, 35 horas en todas las autonomías, el reconocimiento del solape de jornada y, sobre todo, que se contemplen esas mejoras ya en el nuevo borrador y que luego se desarrollen y modifiquen las legislaciones necesarias, incluyendo las autonómicas, de forma que reclaman al Ministerio de Sanidad que no eche «balones fuera».
El secretario provincial del Sindicato de Enfermería, SATSE, Juan José Sánchez, destacó ayer que las reivindicaciones sindicales se reducen a tres: reclasificación profesional con reconocimiento retributivo, porque la actual clasificación no contemplaba los cambios del Plan Bolonia; reclamar el reconocimiento al personal sanitaria del derecho a la jubilación anticipada y jornadas de trabajo más acordes a la normativa de salud laboral, «ahora hay turnos de hasta 24 horas».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión