Andalucía necesita 30.000 enfermeras más para llegar a la media europea, según la OMS

En un informe titulado 'Situación actual y estimación de la necesidad de enfermeras en España', elaborado por Ministerio, se recalca que para abordar las necesidades futuras de la profesión enfermera, es clave comparar las ratios de enfermeras por cada 1.000 habitantes que manejan otros países de nuestro contexto dentro de la UE, según el Eurostat, la OCDE y la OMS. El INE a fecha de 31 de diciembre de 2023, describe que actualmente España cuenta con 306.268 enfermeras, lo que supone una ratio de 6,28 enfermeras por cada 1.000 habitantes. Esta cifra sitúa a España por debajo de la media de los países de la Unión Europea (UE-2716) cuya ratio se sitúa en torno a 9 enfermeras por cada 1.000 habitantes.

Para que España logre igualar las ratios europeas, se necesita un aumento notable en el número de enfermeras activas, con incrementos superiores a 100.000 enfermeras para alcanzar las ratios declaradas por todas estas diferentes fuentes (103.634 para Eurostat, 134.865 para OCDE y 130.961 para la OMS).

Por comunidades, las ratios más alejadas de media europea son Murcia (4,79), Galicia (5,13), Comunidad Valenciana (5,46), Andalucía (5,51) y Baleares (5,93). La única región con una ratio similar a la media europea es Navarra (8,84), por lo que es la región con menor necesidad de enfermeras adicionales. El informe establece que para el conjunto de España se precisan al menos 100.000 enfermeras.

Andalucía, emisora de enfermeras

Tal y como señalan en el extenso informe de más de 200 páginas hecho público hace unos días, la movilidad laboral de las enfermeras dentro del territorio nacional es un indicador «clave» para comprender cómo se comporta el mercado de trabajo en el sector sanitario entre las diferentes comunidades de España; evidenciando precisamente la situación andaluza. Este análisis permite visualizar la dinámica de contratación y los flujos de trabajadores que se desplazan entre regiones, así como la proporción de contratos que permanecen dentro de la comunidad de residencia frente a aquellos que implican movilidad.

Los datos presentados provienen del Observatorio de las Ocupaciones del SEPE e incluyen información sobre enfermeras no especialistas, especialistas no matronas y matronas; y permite identificar las zonas que son «netamente receptoras de enfermeras», como Cataluña (saldo positivo de 3.880 enfermeras), Madrid (1.423 enfermeras), Navarra (1.027 enfermeras) y País Vasco (1.001). En el lado negativo o con déficit aparecen Andalucía (-1.937 enfermeras), Castilla-La Mancha (-1.129 enfermeras) y Castilla y León (-679 enfermeras). «Estas comunidades se caracterizan por ser emisoras netas, con un mayor número de salidas que de entradas», recalcan en el informe. En concreto, 1.315 enfermeras entran a Andalucía, mientras que 3.252 salen, prácticamente el doble.

Aun así, los datos indican que, en 2023, la gran mayoría de los contratos (83,7%) fueron realizados a enfermeras que permanecieron en su comunidad de residencia, mientras que 4.257 contratos implican desplazamiento. A pesar de que la tasa de movilidad se situó en el 16,31%, ha habido una leve disminución respecto al año anterior en la proporción de contratos que implican movilidad, con una variación positiva en la tasa de movilidad respecto al año previo (18,61%); en este caso en términos nacionales.

Analizar por qué Andalucía tiene una carencia tan elevada de enfermeras o por qué salen a otras zonas de España el doble que las que entran tiene varios motivos, pero el salarial, en principio, no parece uno de ellos. La comunidad autónoma no registra los salarios más altos, pero tampoco los más bajos. De hecho, está en la media y, en algunos casos, con cifras más elevadas que regiones receptoras.

Entonces, ¿cuál es el problema? Uno de los puntos más llamativos es el que tiene que ver con las contrataciones, la tasa de paro y el incremento de la misma. Según el informe, los contratos cayeron en Andalucía un 36,2% entre 2021 y 2023, convirtiéndose en la segunda que más cae. De hecho, en la región aumentó el número de enfermeros parados en un 80%, de 517 a 920, entre esos mismos dos años.

Para tratar de paliar el déficit de enfermeras, el Ministerio de Sanidad anunció que prevé aprobar en el Consejo Interterritorial el Marco Estratégico de Cuidados en Salud, con 65 acciones divididas en nueve ejes. Entre otras medidas, el documento planea extender la financiación de las plazas de Grado a la enseñanza de la enfermería, la incorporación de enfermeras especialista a la Atención Primaria y la petición a las comunidades de que ofrezcan buenas condiciones a sus profesionales para que se mantengan en sus sistemas autonómicos de salud.