Teresa Porras advierte a los socorristas sobre su protesta: «No pueden colocar una bandera roja cuando la situación es de bandera verde»

La concejala de Servicios Operativos y Fiestas, Teresa Porras, ha advertido que las quejas del colectivo «deben ir a la empresa» encargada del servicio, no al Ayuntamiento, como apuntaban los manifestantes. Según explicó, la gestión de los socorristas depende de la empresa adjudicataria, que recientemente ha cambiado: «Hace unos días se cerró el contrato con la anterior compañía y ahora comienza otra, por lo que cualquier reclamación corresponde trasladarla a la actual adjudicataria», señaló.

Además de aclarar la responsabilidad, Porras criticó la forma en que se llevó a cabo la protesta, centrada en el uso de la bandera roja, que prohíbe el baño. «No pueden colocarla cuando la situación es de bandera verde», insistió la edil, quien considera que recurrir a esta medida puede generar confusión entre los bañistas y proyectar una imagen equivocada del litoral. Cabe recordar que la bandera roja se reserva exclusivamente para casos en los que exista un riesgo real para la seguridad en el mar, y utilizarla como presión «no es aceptable», apuntó.

Los socorristas, en cambio, defienden que trabajan en condiciones precarias, con falta de torres de vigilancia y medios suficientes para garantizar la seguridad en 14 kilómetros de costa. En un comunicado difundido tras la protesta, anunciaron que mantendrán sus reivindicaciones hasta que se ofrezcan «recursos dignos que permitan un servicio adecuado a usuarios y visitantes, además de proteger la integridad del personal».

Este conflicto surge en un momento crítico para Málaga, con un litoral que concentra miles de bañistas y visitantes a pocas semanas del inicio de la Feria. Desde el Consistorio, la postura es clara: la empresa adjudicataria debe garantizar el servicio y resolver las incidencias con la plantilla, mientras el Ayuntamiento supervisa el cumplimiento del contrato.

En la misma comparecencia, Teresa Porras abordó otras cuestiones relacionadas con la gestión municipal. Una de ellas fue el proyecto piloto para instalar lavapiés que utilicen agua salada, que tiene como objetivo reducir el consumo de agua potable. La edil confirmó que la iniciativa ya cuenta con «permisos y financiación», y que la ejecución comenzará en cuanto se completen los trámites técnicos.

Por otro lado, la limpieza viaria también centró parte de las declaraciones. Porras aseguró que el servicio se realiza diariamente en toda la ciudad y que se reforzará con motivo de la Feria de Agosto mediante la contratación de más de 200 personas, siguiendo el modelo de años anteriores.

Además, se trabaja en la ampliación de la bolsa de empleo para incorporar más personal en caso necesario. Por último, la concejala apeló a la colaboración ciudadana para mantener la imagen de la ciudad durante estas fechas: «Todos debemos contribuir para que Málaga luzca como queremos», afirmó.