La promotora del hotel de Moneo planea iniciar las obras a principios de este verano
La cadena catalana H10 Hotels prevé desarrollar una inversión de unos 45 millones de euros en un plazo de un año y medio
Derribados el edificio que albergó la pensión La Mundial y el que acogió los ensayos de la Banda Municipal de Música, la zona de Hoyo ... de Esparteros encara la actuación que supondrá su regeneración tras más de una década de trámites para encajarla y aprobarla. Esta operación urbanística, promovida actualmente por la cadena catalana H10 Hotels y que tiene como pieza clave un hotel con la firma del arquitecto Rafael Moneo, podría comenzar en el inicio de este próximo verano, según apuntaron fuentes cercanas a la misma, «posiblemente en el mes de junio», detallaron. Tras la demolición de las construcciones que aún permanecían en pie en la zona, la empresa está realizando la adaptación del proyecto de Moneo a las actuales avances tecnológicos y en materia de instalaciones, ya que se trata de un edificio diseñado hace seis años.
Según las fuentes, se trata de modificaciones que no suponen una alteración significativa del proyecto que obtuvo la licencia de obras por parte del Ayuntamiento, pero que son necesarias para favorecer el ahorro de energía de un establecimiento de cuatro estrellas que va a contar con 138 habitaciones.
Estos cambios elevarán a los 45 millones de euros aproximadamente el coste de la inversión total de la operación, que también incluye un aparcamiento subterráneo de 220 plazas, un edificio para uso terciario que reproducirá el de La Mundial, en el vértice de la plaza, y otro de planta baja más una para usos comerciales. 170 plazas del estacionamiento soterrado, la copia de La Mundial y el edificio comercial serán gestionados por una nueva sociedad creada por el hasta ahora propietario mayoritario de la actuación, el empresario José Luis López, junto con otros dos socios inversores vinculados con Málaga.
El hotel como tal y la primera planta del 'parking' corresponden a H10, que desarrollará las obras de todo el conjunto, con un plazo estimado en 18 meses, por lo que podrían concluir para finales del año que viene si no surgen complicaciones. Una de las primeras tareas que deberá realizar la promotora es el desvío de un gran colector de aguas que discurre por el eje de la calle Pasillo de Atocha. Estas aguas deberán trasladarse a una nueva canalización más próxima al cauce del Guadalmedina –para permitir la excavación del aparcamiento– que se conectará con el tramo soterrado del colector que ya ha dejado reforzado la Junta en la obra del metro.
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