Miles de malagueños vuelven a la calle para exigir soluciones a la crisis de la vivienda

La manifestación ha arrancado a las 11.40 horas desde la plaza de la Merced, en un ambiente festivo y con una alta diversidad de edades y perfiles sociales en los asistentes. Jóvenes, familias y jubilados se han echado a la calle por igual. Un detalle da idea de la respuesta multitudinaria a la convocatoria de Málaga para Vivir: a las 12.40, una hora después de que la cabecera arrancara la marcha, aún había personas que no habían salido de la plaza de la Merced. A esa misma hora, los primeros de la manifestación iban por la plaza de la Marina. No sería hasta pasadas las dos de la tarde cuando la cabecera hacía su entrada en la plaza de la Constitución, donde a las 14.30 horas se prodecía a la lectura del manifiesto. En ese momento, los asistentes llenaron el espacio haciendo un círculo y realizaron una acción simbólica: alzaron las manos con las llaves de sus casas en protesta por el acceso a la vivienda digna en Málaga.

La lectura del manifiesto cerró esta multitudinaria manifestación: «La ciudad inicia hoy un nuevo ciclo de movilización para reinventar a Málaga. Queremos recuperar los paseos por nuestras calle, no el parque de atracciones en el que han convertido a Málaga donde nos expulsan y explotan. El proceso que empezamos en el 29J es algo imparable, esto solo acaba de empezar».

Al igual que la anterior marcha, esta ha contado con el respaldo de partidos de izquierda, sindicatos y colectivos sociales, pero éstos no han estado en la cabecera de la manifestación, cuyos organizadores han recalcado que no siguen siglas políticas. Entre otros, ha participado en la marcha el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Málaga, Dani Pérez, acompañado de otros miembros de su partido; representantes de Con Málaga, con Toni Morillas a la cabeza; el coordinador de IU Andalucía y diputado de Sumar en el Congreso, Toni Valero; y el secretario provincial de CC OO, Fernando Cubillo.

Dani Pérez, en declaraciones previas a la manifestación, ha exigido al alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, «que escuche a los miles de malagueños que claman por una vivienda digna y asequible». «Estamos ante un drama social que está obligando a miles de personas a abandonar Málaga cada año. Familias y jóvenes que no pueden construir un proyecto de vida en la ciudad que los ha visto nacer. Esto no se puede permitir más. Es insostenible. Una ciudad sin habitantes es una ciudad sin futuro», ha manifestado. Según Pérez, «las políticas de vivienda de Paco de la Torre han fracasado». «Más de 34.000 personas se han ido de Málaga en los últimos cinco años, hay más de 32.000 personas demandantes de VPO y Málaga se ha convertido en la capital donde más ha crecido el precio de la vivienda en alquiler y comprar», ha señalado.

El alcalde no ha estado en la manifestación, pero ha sido protagonista de muchas canciones y consignas coreadas por los manifestantes. «Dónde está Paquito, Paquito donde está, Paquito está vendiendo lo que queda de ciudad» o «Paco, te aviso, te voy a ocupar el piso» son sólo dos ejemplos. También se han visto caretas con la cara de De la Torrea acompañadas de la frase «Eso os pasa por pobres».

La manifestación ha comenzado en la plaza de la Merced y su recorrido ha continuado por la calle Granada, plaza del Siglo, calle Molina Larios y plaza de la Marina hasta la Alameda Principal (pasando por los carriles destinados al tráfico sentido este). Después el itinerario ha proseguido por las calles Puerta del Mar, Atarazanas, Prim, Manuel José García Caparros, Pasillo de Atocha, Pasillo de santa Isabel, calle Carretería, Álamos, Cárcer, Casapalma, plaza Uncibay, calle Calderería, plaza Carbón, de nuevo por calle Granada, finalizando en la plaza de la Constitución.

El único incidente se dio al poco de comenzar la marcha, a la altura del callejón de El Pimpi que da acceso a la calle Granada, donde la Policía Nacional impidió el intento de un escaso grupo de personas de extrema derecha de hostigar a los manifestantes. Estuvieron un rato coreando «Viviendas para los nacionales», pero no pudieron acercarse al paso de la manifestación.

¿Qué piden los manifestantes? El común denominador de todos los asistentes es la exigencia de soluciones al problema de acceso a la vivienda. A partir de ahí, la diversidad de perfiles y motivaciones de los asistentes es muy alta: entre ellos hay militantes y simpatizantes de partidos de izquierda con un discurso muy armado en lo ideológico, pero también jóvenes, familias y jubilados sin orientación política explícita que quieren dejar patente su desesperación por las dificultades vitales que provoca la carestía de la vivienda en ellos mismos o en sus allegados. Se han escuchado también muchas consignas contra la «turistificación» de Málaga y más particularmente, contra las viviendas vacacionales, desde el clásico «Tourists go home» hasta «Casa pa vivir, no pa Airbnb».

En esta segunda manifestación, la plataforma Málaga para Vivir ha querido ir más allá del problema de acceso a la vivienda y hacer una enmienda a la totalidad del «modelo de ciudad», que «expulsa a los vecinos, convierte la vivienda en un negocio y erosiona el tejido social. El objetivo de la protesta es, según ellos, hacer frente a «la explotación de los alquileres, la precariedad laboral y la destrucción del territorio».