El metro ultima sus pruebas para llegar al Centro antes de Semana Santa

No obstante, aún no hay un día marcado en el calendario oficial, dado lo ajustado de los plazos para las últimas tareas pendientes, según han indicado a este periódico diversas fuentes técnicas. Algunas voces apuntan a SUR que la apertura se podría producir entre el 15 y el 20 de marzo, aunque este extremo no ha podido ser confirmado.

Este horizonte temporal tiene encaje tanto a nivel técnico como político. Sobre el primero, cabe recordar que Alstom terminó a finales de enero el despliegue y las pruebas de los sistemas de señalización y seguridad ferroviaria, que se han prolongado durante un año. Los trabajos, que se han realizado durante las noches para no interferir en los tramos en explotación comercial, han permitido acometer la extensión del sistema CBTC hasta Atarazanas.

Por tanto, ahora lo que resta es una primera fase burocrática, que requerirá unas dos semanas, para que la Agencia de Obra Pública transfiera la competencia sobre el nuevo tramo de un kilómetro a la sociedad concesionaria. Y otras dos semanas de marcha en blanco, esto es, la explotación del suburbano con las dos nuevas paradas ya incluidas, pero todavía sin pasajeros a bordo.

A ello, se une la necesidad de tener, al menos, unos días de servicio con una afluencia de viajeros «normal», antes del gran aluvión que se producirá a partir del Domingo de Ramos y durante toda la Semana de Pasión, en la que, como en años anteriores, habrá refuerzos especiales en los horarios.

Desde la perspectiva política, la fecha también encaja. Y es que la Ley Electoral prevé que no se podrán hacer inauguraciones oficiales 54 días antes de unas elecciones (en este caso, las Municipales del 28 de mayo). Por tanto, el límite sería el 4 de abril.

«Igual que en otras fechas anteriores que se han barajado no era posible llegar, como cuando se habló de agosto o de Navidad, este escenario sí que es totalmente real», afirma una de las fuentes consultadas. «Aquí todo el mundo tiene claro que en Semana Santa las paradas del Centro van a estar abiertas», advierte un trabajador del suburbano malagueño; si bien los nuevos esquemas de trabajo todavía no se han definido.

¿Qué queda por hacer? Pues la respuesta es que muy poco. Las fuentes consultadas desgranan que para poder abrir son necesarias entre cuatro y cinco semanas, de ahí que todavía no se haya podido fijar la fecha oficial. En cada momento del planning hay actuaciones previstas, pero todos son hitos muy importantes y ajustados, que pueden bailar en pocos días.

En lo que resta de semana, la obra se va a rematar con los repasos finales para dejar las instalaciones en perfecto estado de revista. En paralelo, de aquí a marzo la Agencia de Obra Pública tiene que transmitir el expediente, con la documentación que se requiere, a la concesionaria, para que pueda ponerlo en servicio. Entre otros documentos, se tienen que concretar los planes de explotación, seguridad, formación y seguros.

Mientras, las dos primeras semanas de marzo, más o menos, se tendrá que hacer la marcha en blanco, que ya se ha comentado, para la habilitación del personal. De la precisión de estas fases y del correcto funcionamiento de todos los sistemas durante las circulaciones sin pasajeros dependerá que la apertura se produzca un día u otro. Esos 15 días se consideran tiempo suficiente para poner a prueba las frecuencias de esa extensión, de un kilómetro, sin limitaciones de horarios, ya que esta marcha estará integrada en las circulaciones normales (con usuarios a bordo), sólo que irá vacío en las dos últimas paradas.

La Consejería de Fomento asegura que no tiene una fecha oficial para la puesta en marcha. De momento, fuentes de este organismo se remiten a los trabajos en desarrollo para la puesta en servicio comercial del tramo de extensión al Centro. Estos se centran en estos momentos en las tareas de remates y comprobaciones finales en ambos tramos para culminar la entrega de la línea a la sociedad concesionaria, Metro de Málaga.

A su vez, se está culminando por parte de la Agencia de Obra Pública la documentación técnica y administrativa que requiere este proceso de traspaso y entrega. «Se trata de una documentación amplia y compleja que viene a certificar que todas las infraestructuras, sistemas e instalaciones se han ejecutado conforme a lo previsto en los proyectos de construcción». Este proceso se encuentra ya en su fase final. Junto a ello, la Agencia de Obra Pública está tramitando el expediente administrativo para la autorización de la puesta en servicio comercial, que se encuentra también en estado muy avanzado.

Una vez se culmine todo el proceso de traspaso documental y material, Metro de Málaga iniciará una breve formación final, puesto que los conductores ya han recibido instrucción sobre la conducción en este tramo mediante el simulador de conducción; y se abordará el test definitivo de circulación comercial (la marcha en blanco).

La inversión acometida por la Junta en la extensión del Metro de Málaga al Centro Histórico, en los tramos Renfe-Guadalmedina, Guadalmedina-Atarazanas y los contratos comunes, para la superestructura de vía, arquitectura e instalaciones y señalización y seguridad ferroviaria, ha ascendido a 154,5 millones de euros, según los datos aportados por la Consejería de Fomento. Estos se desglosan de la siguiente forma: en infraestructura y reurbanización de ambos tramos: 112,8 millones; en suministro y montaje de la superestructura de vía: 5,83 millones; en arquitectura de estaciones e instalaciones: 29,34 millones; y en extensión del sistema de señalización ferroviaria: 6,58 millones.