La carretera que tendrá que usar Amazon en Málaga: una vía de tercera para un megacentro logístico

Las excavadoras y los camiones trabajan sin descanso para ejecutar el movimiento de tierras que dará paso a este proyecto, tras la aprobación que recibió por parte del Ayuntamiento a finales del año pasado, después de cuatro años de trámites urbanísticos. La intervención, valorada en 80 millones de euros, se desarrolla sobre una superficie de 119.000 metros cuadrados que tendrá como principal vía de acceso la avenida de Ortega y Gasset. Es decir, la antigua carretera de Cártama, una carretera de tercera, con carril por sentido, que verá agravado su colapso, cada vez más habitual, al tener que soportar el tráfico de entrada y salida de camiones del nuevo centro logístico de Amazon, que podría estar operativo para finales de este año o principios de 2025.

Según los estudios de tráfico realizados por Montepino para validar el proyecto ante la Gerencia Municipal de Urbanismo, los viales de entrada y salida al nuevo centro de distribución y almacenaje de mercancías soportarán el tráfico de unos 30 vehículos pesados al día. Las obras de urbanización que ya están en marcha prevén un ramal de acceso que prestará servicio tanto al centro de Amazon como a las instalaciones de Mayoral, ubicadas al este de la parcela de Intelhorce. En el caso de Mayoral, se prevé un tránsito de unos 18 vehículos pesados al día, lo que hace un total de casi medio centenar de camiones.

Y todo ello en una carretera que, según los últimos datos recabados por la Consejería de Fomento, soporta una intensidad media diaria total de 14.738 vehículos de los que el 8% son pesados, es decir, unos 1.170 cada día. La transformación de estos suelos para la implantación del centro de Amazon, que actualmente opera en una carpa provisional en la zona de Los Prados, tiene un plazo de ejecución de ocho meses y un presupuesto que asciende a 6.964.453 euros.

La cuenta atrás para su puesta en uso ha comenzado sin que por parte de la Junta de Andalucía, titular de la carretera, se haya dado paso alguno aún para la ampliación de esta vía, prevista desde hace años y todavía sin ejecutar. Como ha venido informando SUR, el desdoblamiento de este tramo de la antigua carretera de Cártama resulta necesario no solo para albergar el mayor tránsito de camiones que va a provocar el centro de Amazon, sino también los incrementos circulatorios que implican los nuevos sectores residenciales previstos en el entorno, como es el caso de las 1.250 viviendas planeadas en los suelos que ocupó la fábrica de Amoniaco o las más de 3.400 de Distrito Zeta, cuyas obras de urbanización ya están muy avanzadas.

Este periódico ha intentado sin éxito conocer cuáles son los planes de la Consejería de Fomento respecto al desdoblamiento de este tramo de la antigua carretera de Cártama, para el que no existe reserva presupuestaria alguna en las cuentas de la Junta para este año. No obstante, no parece que la administración regional tenga mucha prisa en acometerlo. El Plan de Transporte Metropolitano de Málaga, aprobado por el Gobierno andaluz el pasado mes de octubre, no contempla previsión alguna respecto a este asunto. Y el contenido del Plan de Infraestructuras de Transporte y Movilidad de Andalucía (PITMA 2030) tampoco invita al optimismo.

En concreto, respecto al proyecto 'Duplicación Calzada A-7054', que es la carretera que discurre junto al nuevo centro de Amazon, lo incluye en el listado de aquellas actuaciones que no resultan prioritarias para la Junta y cuya ejecución depende de «las disponibilidades presupuestarias adicionales o de la posibilidad de sustituir a otras actualmente priorizadas en el plan». En sus alegaciones al PITMA 2030, el Ayuntamiento de Málaga pidió que se ejecutara el desdoblamiento de este vial previsto desde hace años. De hecho, se llegó a realizar un primer diseño que se valoró en 31,6 millones de euros, para actuar en un tramo de dos kilómetros. La idea era que dispusiera de dos calzadas centrales de unos siete metros para dos carriles por cada una de ellas, separadas por una mediana; dos vías de servicio de unos seis metros de anchura también con dos carriles; y un carril exclusivo para autobuses en el borde exterior de esas vías de servicio.

Sin embargo, en la respuesta a las alegaciones de la capital de hace dos años para solicitar que el desdoblamiento de esta carretera fuera incluido en el plan de infraestructuras susceptibles de acometerse en esta década, y de beneficiarse de la ayuda de fondos europeos, la Consejería de Fomento fue tajante y apuntó que no estaba «garantizada aún su ejecución». Es más, desde la Junta se argumentó que «debido a la incertidumbre sobre la disponibilidad presupuestaria tanto de fondos europeos como propios en el horizonte del PITMA y la gran cantidad de actuaciones con posibilidad de realización, dado que por parte del Ayuntamiento se plantea un proyecto más amplio de adaptación de la carretera a características de vial urbano, más allá de su mero aumento de capacidad, podría plantearse la negociación de un convenio de colaboración entre administraciones».

Es decir, el Gobierno andaluz hizo ver que no está dispuesto a costear íntegramente la ampliación de este tramo de carretera. Además, le respondió al Ayuntamiento que este vial «reúne las condiciones para ser cedido al municipio», lo que supondría que dejaría de formar parte de la Red de Carreteras de Andalucía y cualquier responsabilidad respecto a su capacidad y el proyecto para su desdoblamiento recaería en el Consistorio.