Un informe municipal cuestiona los usos hosteleros del proyecto para el Astoria

Para que a principios de este mes se aprobara este trámite, promovido por la Gerencia Municipal de Urbanismo, este organismo del Ayuntamiento pidió informes sobre la propuesta Málaga All Space a otros departamentos municipales. En concreto, valoraron la propuesta la junta del distrito Centro, el área de Cultura, y la de Promoción Empresarial y Empleo. Los directores de estas tres secciones mostraron su apoyo a la idea, pero el director general de Promoción Empresarial y Empleo, Eugenio Benítez, apuntó en su informe dos observaciones que vienen a cuestionar el proyecto de los empresarios cordobeses.

Una de ellas es que la propuesta no contempla en plantas bajo rasante plazas de aparcamiento, «en una zona con una multitud de espacios de ocio preexistentes, cuando además, se contemplan diversas actividades en las que pueden confluir multitud de personas», apunta el informe del citado directivo municipal, al que ha podido tener acceso este periódico. Además, respecto a los usos de hostelería contemplados en las plantas superiores del proyecto hasta alcanzar un total de 1.844 metros cuadrados (el 36% de la superficie construida), remarca que «se plantean actividades culturales gastronómicas que, precisamente, están en un proceso de limitación en el Centro Histórico, a través de la tramitación que se está llevando a cabo de la Zona Acústica Especial, con una moratoria que inicialmente está planteando la prohibición de la implantación de nuevos usos de hostelería e incluso la prohibición de permitir cambios de titularidad sobre actividades hosteleras (sin y con música) ya autorizadas», señala textualmente el informe.

Ambos apuntes de Eugenio Benítez, que llegó al Ayuntamiento procedente de la Diputación Provincial a principios del año pasado a raíz del cese de Esther Molina, fueron contestados en un informe del gerente de Urbanismo, José Cardador, en el que se argumenta que la tramitación de la Zona Acústica Especial permite hacer una excepción para «aquellas actividades que, por acuerdo de la Junta de Gobierno Local, se consideren de interés general para la ciudad», aunque respetando los límites de ruido establecidos por las ordenanzas.

Respecto a que el proyecto no prevea plazas de aparcamiento bajo rasante, el gerente de Urbanismo alude a un informe del departamento de Planeamiento de la propia Gerencia en el que «se hace constar que dada la semipeatonalización de todo el entorno del futuro edificio cabría considerar la posibilidad legal de excluir de la obligatoriedad de la reserva de aparcamiento». Como ya informó este periódico (ver SUR22/11/2017), el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) obliga a habilitar al menos una plaza por cada 10 localidades en el caso de teatros de más de 500 butacas, por lo que –sin tener en cuenta las reservas precisas para la superficie hostelera– serían más de 170 los estacionamientos con los que al menos debería contar una construcción de estas dimensiones. El PGOU exime de tener que realizar aparcamientos en el caso de que haya que preservar restos arqueológicos, y en zonas peatonales.