Un aula para dar voz a las mujeres gitanas en el mundo digital
La Fundación Orange y la Fundación Secretariado Gitano arrancan la primera edición del curso Edyta, que ofrece formación a mujeres en situación de vulnerabilidad y que culminará con la creación de un blog
Aprender a navegar, acceder información en la Red, crear un currículum o buscar un empleo a través de Internet, crear un perfil en una red ... social o tener un espacio propio donde poder compartir experiencias u opiniones. Internet lo ha revolucionado todo, pero existen colectivos que aún están lejos de poder acceder a todas las posibilidades que ofrece.
La Fundación Orange y la Fundación Secretariado Gitano de Málaga (FSG) han inaugurado este jueves en la capital de la Costa del Sol un Aula Digital donde se impartirá la primera edición de curso Edyta. Se trata de una formación en educación digital para mujeres en situación de vulnerabilidad y/o riesgo de exclusión social que ambas entidades impulsan conjuntamente como parte del programa de formación sociolaboral que ofrece FSG en esta ciudad andaluza.
El proyecto Edyta consiste no solamente en equipar el Aula Digital con diferentes dispositivos tecnológicos como ordenadores, tabletas…, sino que se acompaña también de un programa pedagógico adaptado a la situación y formación de las mujeres participantes gracias a formadores polivalentes que pone la Fundación Orange.
La charla motivadora que emocionó a los asistentes a la presentación de Edyta
La presentación de la primera edición del curso Edyta, inaugurado hoy en la sede de la Fundación Secretariado Gitano de Málaga, se convirtió en una charla motivacional en la que todos los asistentes acabaron emocionados al escuchar el relato de Teresa Serrano, la responsable de proyectos sociales Fundación Orange, entidad que patrocina este aula digital.
Serrano contó a las mujeres que participarán en esta formación su propia historia de vida para que viesen en primera persona que los estudios pueden llevarlas adonde ellas quieran. «Yo nací en una familia muy humilde, en un barrio de chabolas en la periferia de Madrid; a los tres años, mis padres, por extrema pobreza, tuvieron que dejarme en un internado porque no podían mantenerme. Y allí estuve hasta los 16 años», explica. Al salir del centro, empezó a trabajar. «Trabajaba 13 y 14 horas al día limpiando casas, fregando escaleras y los fines de semana en una fábrica de churros», continuó. Todo, para poder ayudar económicamente a sus padres.
Verse en esa situación, totalmente atrapada en esa vida, le llevó a una profunda depresión que le llevó al hospital. Cuando tuvo fuerzas, decidió que seguiría estudiando para salir de esa situación. Con 23 años se acercó a la escuela nocturna. Ya se habían acabado los plazos, pero cuando le contó a la directora su situación, ella le permitió matricularse porque vio en sus ojos las ganas que tenía de aprender.
Así, trabajando y estudiando, terminó COU. Luego aprobó unas oposiciones y ya como funcionaria se matriculó en Económicas, acabando según dice la primera de su promoción. Ya con un niño de dos años a su cargo, le diagnosticaron por primera vez un cáncer. «Siempre pensé que si había podido con lo que había pasado, saldría adelante», señala, y así fue. Se recuperó y decidió hacer un doctorado, mientras trabajaba y criaba a su hijo, que ya tenía cinco años.
«He llegado a ser profesora de universidad, he luchado por segunda vez contra un cáncer que me diagnosticaron hace ahora un año; y ahora trabajo en la Fundación Orange en algo que me apasiona, en un puesto de responsabilidad; por eso digo a las mujeres que realizan este curso de Edyta que pueden ser lo que quieran», señala. «Que nadie os diga nunca que no tenéis talento», indicó a los asistentes.
«Las quince mujeres inscritas en esta primera edición y que harán un curso de 120 horas hasta el mes de mayo van a aprender no solo competencias digitales y contenidos técnicos, sino también habilidades transversales, como por ejemplo la autoconfianza, motivación, creatividad o planificación», explica Tamara Esteve, coordinadora provincial de FSG. «Se trata de dotar a estas mujeres de herramientas para romper la brecha laboral y la doble discriminación que sufren, por ser mujeres y gitanas», continúa.
Así, en el Aula se imparten diferentes habilidades digitales, desde aprender a navegar y a buscar información online hasta elaborar un currículo, buscar empleo online, etc. Esta formación se ofrece con la colaboración de Womenteck – Asociación Mujeres y Tecnología. De hecho
La de Málaga es la quinta acción de este tipo que Fundación Orange y Fundación Secretariado Gitano ponen en marcha. La primera tuvo lugar en Madrid en 2017 y posteriormente en 2018 en Córdoba y León. En este mes de marzo ha comenzado la segunda edición en Córdoba y está prevista la inauguración de otra Aula Digital y su correspondiente curso en Valencia.
La inauguración del curso ha contado con la presencia de Mar Torres Casado de Amezúa, Concejala de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Málaga; Teresa Serrano Castillo, responsable de proyectos sociales Fundación Orange, y Silvia Fernández, directora adjunta de FSG Andalucía.
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