Condenado a diez años de cárcel por abusar de su sobrina discapacitada
El hombre amenazaba a la menor con echarla a ella y a su madre de la vivienda si contaba algo de lo que estaba sucediendo
Montse Martín
Sábado, 5 de septiembre 2015, 00:48
Los abusos se sucedieron casi a diario durante cinco años. Un día el hombre fue sorprendido en la cama con su sobrina de 16 años, ... que es discapacitada psíquica, por un amigo que se había quedado a vivir en su casa. El testigo, tras cerciorarse de que la chica no lo hacía voluntariamente, decidió denunciar los hechos. Ahora la Audiencia de Málaga le ha condenado a diez años de cárcel, y a indemnizar a la menor con 20.000 euros, así como a la prohibición de acercarse y comunicarse con ella durante trece años.
El procesado, de 48 años, su pareja y las dos hijas menores de ambos convivían desde 2007 con su hermana y su sobrina, ambas con discapacidad psíquica, en la misma vivienda en Fuengirola.
La sentencia explica que el hombre, utilizando su situación de superioridad, derivada de su relación familiar, económica y considerable diferencia de edad, aprovechaba las ausencias del domicilio de su pareja y de su hermana a la que en ocasiones obligaba a que acompañara a aquella a recoger a sus hijas del colegio para realizar tocamientos. El hombre consiguió que accediera a sus deseos amenazándola con echarla a ella y a su madre de la casa.
Los tocamientos se repitieron todas las semanas, de lunes a viernes, hasta que la joven cumplió la mayoría de edad. A partir de ese momento consiguió mantener relaciones sexuales completas con ella prácticamente a diario, siempre aprovechando la ausencia de su pareja y de su hermana para ir a a recoger las niños del colegio.
La joven no quería mantener relaciones sexuales, pero el procesado consiguió doblegar su voluntad por el miedo a que la echara de la casa, pues tanto ella como su madre no tenían más familia ni lugar donde ir y vivían con la escasa pensión por discapacidad de aquella.
En noviembre de 2011 un amigo del hombre le sorprendió en la cama con la sobrina y denunció. A partir de ese momento madre e hija abandonaron la vivienda y se marcharon a una casa de acogida.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión