Correos recupera el centro de distribución de Alhaurín de la Torre que ardió en agosto

Lo ocurrido el pasado verano en estas dependencias obligó al personal a reubicarse. En un primer momento, se instalaron en Churriana, desde donde se procedía al reparto de la correspondencia para el municipio alhaurino y, posteriormente, a Torremolinos. Esta situación, mantenida durante más de medio año, movió a la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) a reclamar rapidez para culminar los arreglos necesarios en el inmueble. Y es que, como lamentaron, los trabajadores, afectados por unos hechos sobrevenidos, tenían que asumir, en cada jornada laboral, entre 20 y 40 kilómetros de trayectos extra para desempeñar su tarea, además de los estrictamente necesarios para el reparto de la correspondencia.

Las consecuencias del fuego agravaron un problema «estructural», a juicio de CSIF, que reclama un incremento de los profesionales acorde a las necesidades de una población en pleno crecimiento. Comisiones Obreras, por su parte, puso como ejemplo de la falta de medios humanos para prestar el servicio que, el pasado verano, llegó a haber un «atasco» de veinte mil cartas y quince mil notificaciones sin remitir.

La propia Corporación Municipal alhaurina aprobó por unanimidad una moción para instar a Correos a la «revocación con urgencia de la supresión de cinco puestos de trabajo» contemplada, precisamente, para la unidad de distribución cerrada.

Las llamas de agosto dejaron inservibles, por quemadas, las 15 motos de reparto que usaban los carteros, además de causar importantes daños en el inmueble. El fuego comenzó en una cochera anexa a la zona en la que desarrollaba su actividad la plantilla y, aunque no se registraron daños personales, sí fueron importantes los materiales. El pasado mes de enero, Correos explicó que se había determinado que el incendio tuvo un origen accidental «debido a un cortocircuito en la puerta eléctrica» del garaje.

No obstante, fuentes de la empresa estatal, tras una nueva consulta de SUR, esta vez en abril, aclararon que el expediente del siniestro «no se ha cerrado definitivamente», por lo que no hay «una causa concluyente».