Abdalá II y Rania de Jordania celebran sus 25 años en el trono

Pero si algo ha llamado la atención de esta celebración han sido las palabras que Rania ha dedicado a su marido en sus redes sociales junto a varias instantáneas de este último cuarto de siglo: «Rey de mi corazón… felicidades por tu Jubileo de Plata». Una dedicatoria sencilla y emocionada en la línea de sus últimas manifestaciones públicas. «Me siento honrada de recibir este reconocimiento, pero no hay mayor honor que estar a tu lado y ninguna responsabilidad mayor que tu confianza», le escribió cuando recibió de manos de su marido el gran cordón enjoyado de Orden del Renacimiento el pasado marzo.

Y es que, la figura de Rania de Jordania ha marcado los 25 años de reinado de Abdalá II. Su padre, el rey Hussein había dispuesto inicialmente que su heredero fuera el príncipe Hassan, hermano del actual monarca, pero solo dos semanas antes de su fallecimiento, en enero de 1999, modificó el nombramiento a favor de su hijo Abdalá que juró como rey ante el Parlamento en febrero de ese mismo año. Solo unos días después nombró a Rania su reina y la viuda de Hussein, Noor de Jordania, se marchó a Estados Unidos al día siguiente.

Elegida como la tercera mujer más bella del mundo en una encuesta de la revista 'Harpers & Queen' en 2005, Rania se ha convertido en un icono internacional de la moda. Hija de refugiados palestinos, nació en Kuwait en 1970 y se formó en Gestión Empresarial en la Universidad Americana de El Cairo. La familia tuvo que volver a huir por la Guerra del Golfo y esta vez el destino fue Amán, donde trabajó en el Citibank y en Apple hasta que en 1993 conoció a Abdalá. Solo seis meses después se casaron y en 1994 nació su primer hijo, Hussein, actual heredero. Luego tendrían tres hijos más, Imán, en 1996; Salma, en 2000; y Hashem, en 2005. Su labor social y la defensa de los derechos de la mujer le han valido el apoyo internacional, pero también el rechazo de los sectores más conservadores del país.

Durante estos 25 años, el reino jordano ha vivido diferentes revueltas, como las sucedidas entre 2010 y 2012 por los problemas económicos de ciudadanía, que veía como subía el coste de la vida mientras la corte hachemita se celebraban fastuosas fiestas como la que tuvo lugar en el desierto de Wadi Rum con 600 invitados con motivo del 40 cumpleaños de Rania en la que no escatimaron en iluminación y en agua. Sin embargo, las primaveras árabes que en esos años afectaron de forma importante a Túnez, Egipto, Libia, Yemen o Siria, tuvieron mucha menos intensidad en Jordania.

Otro de los episodios más graves fue el acontecido en 2021, con el intento de golpe de estado del príncipe Hamzah, que había sido heredero al trono, por su disconformidad con la línea política del país. El hijo de Noor fue detenido y lleva desde entonces en arresto domiciliario.

Tampoco han faltado las alegrías en la casa real jordana desde 1999 ya que, durante el reinado, además de ver nacer a sus dos hijos menores, han casado a los dos mayores. Fue el año pasado. En marzo celebraron la boda de la princesa Iman con el millonario venezolano Jameel Thermiotis y en junio era el heredero, el príncipe Hussein quien daba el 'sí, quiero' a Rajwa Al Asif ante 1.700 invitados. Y las buenas noticias no han terminado ahí ya que la princesa Rajwa está esperando su primer hijo, cuyo nacimiento está previsto para este verano.