De la Torre gana con holgura en Málaga pero no tiene garantizada la mayoría absoluta

La encuesta de Sigma Dos elaborada para SUR, con 500 entrevistas telefónicas en la ciudad, apunta que el PP lograría entre 15 y 16 concejales en las municipales, por lo que podría perder la mayoría absoluta, que se sitúa a partir de los 16 ediles, por primera vez desde 2003. De esta manera, los populares volverían a ganar con holgura en la ciudad, haciendo valer la marca personal del hoy alcalde y revirtiendo los malos resultados que obtuvieron en las europeas y en las andaluzas. En las primeras perdieron y en las segundas ganaron por la mínima.

En segundo lugar seguiría el PSOE de María Gámez, con seis concejales, que obtendría muy malos resultados al perder un tercio de sus representantes (ahora tiene 9) y dejarse casi cinco puntos porcentuales. De cumplirse las expectativas del sondeo, el PSOE cosecharía los peores resultados de su historia en la capital, por debajo de los siete ediles conseguidos en 1995 en la época de Eduardo Martín Toval.

Ciudadanos, como ha ocurrido en Andalucía, irrumpe con fuerza con cuatro concejales y serían determinantes para dar la llave de la gobernabilidad a Paco de la Torre si finalmente no consigue la mayoría absoluta. Málaga Ahora (Ganemos +Podemos) sería el cuarto partido y conseguiría tres o cuatro concejales, mientras que Izquierda Unida perdería uno y se quedaría con dos.

Pese a que De la Torre esté al borde la mayoría absoluta, los ciudadanos también le castigan, pues en la actualidad la bancada popular de la Casona del Parque está compuesta por 19 concejales, tres o cuatro menos de los que tendrían pasaporte para sentarse de nuevo en el Ayuntamiento con las siglas del PP. Este sería el peor resultado de De la Torre, pues tendría el 44,4% de los votos, frente al récord que consiguió en las pasadas municipales cuando lo votaron el 53,5% de los malagueños. Aún así, la figura del actual alcalde resultaría determinante, pues mejoraría en 17 puntos porcentuales los resultados del PP en los recientes comicios andaluces, cuando en la capital el PP se quedó con el 27,49% de los votos.

Con este panorama, De la Torre no vería peligrar su vara de mando, pues en el caso de que no alcanzara la mayoría absoluta tiene muy a la mano alcanzar un pacto con Ciudadanos, que con sus cuatro concejales sería determinante para decidir qué partido gobernará la ciudad de Málaga. La lista que encabeza Juan Cassá se aprovecharía del descenso que experimentaría el PP en la capital, consiguiendo un 13% de los votos, prácticamente el mismo porcentaje (un punto menos) que en las pasadas elecciones andaluzas, con lo que el partido de Albert Rivera consolidaría un electorado fiel.

Podemos, que se presenta bajo las siglas de Ahora Málaga, no acabaría de obtener los resultados a los que aspiran sus dirigentes nacionales, que se han puesto un listón que a la vista de los resultados de la encuesta resulta demasiado alto. En Málaga quedarían en cuarto lugar, con tres o cuatro concejales, con un 11% de los votos. Pese a ello, este sería un muy buen resultado para cualquier partido que se presentara por primera vez a unas elecciones municipales. Esta formación volvería a erosionar a Izquierda Unida, que se quedaría en el 8% de los votos y perdería un edil. Zorrilla solo tendría una acompañante junto a él en el salón de plenos del Ayuntamiento de Málaga.

Especialmente grave es la situación en la que se encuentra María Gámez. La candidata socialista no acabaría de conectar con el electorado malagueño, sino todo lo contrario. El PSOE bajaría del 20% de votos, ya que se quedaría en el 19,4%, cinco puntos menos que en las pasadas municipales y seis menos que en los recientes comicios andaluces. UPyD y el Partido Andalucista volverían a quedarse fuera del Ayuntamiento. Ambos han quedado agrupados en la categoría de otros en la encuesta, pues no han alcanzado unos apoyos significativos que les permita salir destacados. El total de los agrupados bajo esta denominación alcanzaría un 3% de los sufragios.